Oh I'm just counting

Exministra Alejandra Krauss a Cambio21: Cuando fui ministra lo viví: quienes nos gobiernan son pro AFP

Por María Cristina Prudant
 
Alejandra Krauss, abogada, ex ministra del Trabajo en el gobierno de Michelle Bachelet y de Planificación del presidente Ricardo Lagos, obviamente que no está de acuerdo con la violencia en las manifestaciones, cree que es necesario solucionar también el problema político y buscar los caminos para cambiar la Constitución. En este sentido destaca la iniciativa de los alcaldes de llamar a plebiscito. Sobre las pensiones tiene claro que quienes gobiernan el país son pro AFP.   Sobre la agenda seguridad anunciada por Piñera recuerda que no tendrá efecto ahora porque una Ley Penal nunca tiene efecto retroactivo.
 
¿Qué sensación tiene de lo que está pasando en el país en estos momentos?
Creo que estamos viviendo un momento histórico porque necesariamente este convoca a toda la sociedad a que se realicen cambios de verdad, cambios profundos pero también no deja de generar  tristeza el que de una u otra manera la falta de diálogo, de encauzar y que ha ido de una u otra manera frente a respuestas que a la ciudadanía le parecen, aparentemente insatisfactoria quieren mostrar otro lado que a nadie nos gusta que es el vandalismo, los daños, la delincuencia y que no podemos permitir que eso tape los verdaderos anhelos, sueños de una sociedad de un país más justo, más equitativo que no puede permanecer en el statu quo, eso hace que necesariamente debemos abordar sin duda, el orden público pero no podemos sino colocar en la verdadera y justa dimensión las demandas sociales, que no son sino de una sociedad que no creció de igual manera para todos.
¿Hay que abordar también el tema constitucional?
No podemos eludir el tema del orden político y que supone atrevernos a cambiar la constitución a través de un plebiscito e iniciar ese proceso que otros países lo iniciaron hace muchos años y que nosotros frente a una constitución bastante pétrea queremos que todo permanezca igual y eso ya  no es posible. Vale decir,  tenemos que abordar todas y cada una de estas temáticas como corresponde dentro de un Estado de derecho, dentro del marco legal y dándole las urgencias e importancia como corresponde.
 
Usted ha escuchado a Piñera ofrecer cosas, en medio de la crisis, pero no hay sintonía con lo que quiere la ciudadanía. ¿Qué piensa al respecto?
Yo espero  de todos y cada uno de los actores relevantes  de nuestro país que estén a la altura de la situación y  crisis que nos encontramos, que entiendan que hoy día no puede ser más de lo mismo ni menos en la medida de la posible. Hoy son otros los desafíos porque la época nos lo permitía, porque se podía por el momento histórico que nos encontrábamos  nos permitían hacer cambios hasta una determinada manera y fuimos postergando otros, hoy día ya no podemos seguir postergando esas materias y debemos, sin duda, con responsabilidad, pero sin duda acogiendo en anhelo de los ciudadanos.
Hacer los cambios en materia previsional que se repiten en todas partes, en materia de pensiones, educación, salud. Eso no podemos seguir haciéndole acomodos, maquillaje, requiere de responsabilidad de sí, pero de justicia, sin duda.
 
El gobierno y la derecha parlamentaria están de acuerdo con la represión y han exaltado las movilizaciones, también Piñera anunció una agenda de seguridad ¿Qué le parece a usted?
Lo primero que me gustaría precisar es que a mí no me parece extraño que el Presidente Piñera que fue parte de una coalición, fue parte esencial de la dictadura, de una respuesta tan distinta para una parte de la sociedad, para una parte del mundo político el orden y la seguridad pública tienen un valor muy fuerte. Entonces, no me extraña que frente a los hechos que han estado ocurriendo se respondiera con esta agenda es lo que más les acomoda inicialmente. Sin embargo, obviamente en nuestro país, nuestra sociedad, nuestros hijos, nosotros mismos, nuestros nietos anhelan una sociedad justa y democrática, para eso recuperamos la democracia. Entonces, obviamente no responde a la sociedad en la cual nosotros estamos siendo activos participantes y queremos construir.  
La agenda de delincuencia, las leyes es importante precisar que para efectos la Ley Penal nunca tiene efecto retroactivo, nunca. Vale decir, el saqueo detestable, inaceptable, ilegal con todos los adjetivos que correspondan, que fueron cometidos antes de que entre a regir esa ley, antisaqueos, antibarricadas, antiencapuchados, no se  les va a aplicar. La Ley Penal opera siempre en futuro, entonces tampoco es la respuesta para generar el orden público que todos quisiéramos aspirar y que no se  produzca ni vandalismo, ni delincuencia, ni daños a la propiedad pública y privada y que nadie tenga derecho a perder un ojo.
Pero esas personas no van a ser resarcidas  con esta ley porque cuando se apruebe obviamente, esperemos en Dios, vamos a estar en ese Chile que todos anhelamos tener.  
También citó a reunión al Consejo de Seguridad Nacional (Cosena). ¿Qué opinión tiene al respecto?
Precisando eso, creo que el llamado al Cosena, creo que no solo fue inoportuno sino que además no correspondía lisa y llanamente, este no es un problema de seguridad nacional, es un tema de orden público y creo que desde esa perspectiva se cometió un error porque creo que las instituciones nos gusten o no deben utilizarse en función de lo que ha sido pensado respecto de ellas. Y no soluciona nada, no aporta nada al debate que en un momento dado que el Estado requiere de decisiones ciertas, claras, eficaces y no pirotecnia.
 
¿Piñera no entiende todavía lo que la gente quiere?
Da la impresión que el Presidente y sus asesores, probablemente la lectura que están haciendo no es la lectura correcta y eso demora la solución y bajar el clima confrontacional en el cual nos encontramos y hace tomar decisiones erradas y esto puede tener costos muy grandes. Por eso todos vimos cuando diagnosticó que estábamos en estado de guerra y que teníamos un enemigo poderoso. Cuando los ciudadanos estábamos en la calle no en la pizzería de Vitacura, nosotros sabíamos que eso no era así, probablemente tenemos un enemigo poderoso que es la pobreza, la inequidad la injusticia y eso es deber de todos enfrentarla en forma oportuna.
 
Sobre las AFP, recién el gobierno está cediendo a aumentar el Pilar Solidario, pero olvida a la clase media. Pone a una ministra pro AFP y eso no es buena señal para la gente. ¿Qué opina usted?
Pero es que yo creo que quienes gobiernan son pro AFP. Yo lo ví durante el proceso de votación del proyecto presentado por la Presidenta Bachelet, cuando fuí ministra del Trabajo, donde la derecha sin pensar votaron todos cerradamente en forma negativa, rechazaron el proyecto que contemplaba la modificación del sistema, se incorporaba un Consejo de Ahorro Colectivo, se incorporaba solidaridad que es el mecanismo que, efectivamente permite incrementar las pensiones. También es cierto que la ciudadanía no entendía la solidaridad sino  solo mientras fuera a través de pagos del fisco.
 
Sin embargo, yo siento que, probablemente ese es el gran cambio y por eso estamos viviendo un momento histórico, de haber transitado de una sociedad totalmente individualista que nos horadó a todos en todas las dimensiones de nuestras vidas que, justamente este proceso pacífico, de reivindicaciones sociales ha ido valorando al otro, donde hoy día más que nunca lo entendemos y por eso marchan en las calles más de un millón de personas luchando, reivindicando deudas propias que la sociedad  puede tener, pero también  de un colectivo, el valor del otro.
 
Ese es el sentimiento que ha ido emergiendo y por eso creo que es una tremenda oportunidad y por eso empieza la solidaridad para el sistema de pensiones a ser entendida. Creo que vamos a poder transitar hacia una sociedad distinta. Sin duda que hay que modificar instrumentos legales, el Decreto 3.500 en los hechos, la Constitución, pero hoy día la sociedad comienza a entender lo colectivo, que solos no podemos hacer el cambio, lo podemos hacer en paz pero con otros. En esta sociedad no sirvió que nos rascáramos con nuestras propias uñas.
Expectativas de vida
 
También se reclama porque la mortalidad  no tiene que ver con la realidad   ya que los chilenos no se mueren a los 110 años. ¿Qué pasa con ese tema?
Ese es un tema tremendamente técnico. Es muy cierto que se hace en función de  las tablas de expectativas de vida de lNE, pero también es muy cierto que no es parejo. No es que me dividan mi fondo como si yo viviera hasta los 110 años. Después de los 85 decrece brutalmente, entonces sin duda  creo que el desafío de las autoridades es mejorar los datos administrativos para calcular de mejor manera las tablas de mortalidad, mediante las cuales se calculan las pensiones porque eso tiene que ajustar porque no basta cuantos años vivimos, también influye dónde vivimos. Las personas de la comuna de  Maipú viven menos que las de Las Condes y así hay otros factores. Eso debiera ser un desafío de las autoridades de afinar los datos de tal manera se ajusten a lo que, efectivamente a cuánto va a vivir esa persona en concreto. Y así calcularle su fondo de pensión.
 
Eso es por un lado, pero también y por eso es importante la modificación al sistema, es que alguien tiene que asumir el riesgo si vivo más, imagínese que yo vivo hasta los 85 años y resulta que vivo hasta los 98, quién paga. Ahí surge este seguro de longevidad.
Son muchos los cambios que se deben hacer porque es cierto que la gente se indigna con las utilidades de las AFP, entonces hay que fijarse bien qué es lo que hay que modificar para eliminar todos los elementos que le permiten a las AFP tener tremendas utilidades en circunstancias que todos los fondos van hacia la baja.
Creo que tenemos que empezar a sentar las bases para la modificación y que, efectivamente tengamos un sistema de protección social donde los principios de la seguridad social se esmalten, pero es un desafío, tenemos que hacerlo.
 
¿Y sobre lo que pasa en el país, la crisis social?
 Dentro de toda esta visión que tenemos hay un hecho que está siendo profundamente esperanzador y es que los alcaldes han acordado de forma amplia, vinculándose, recogiendo el anhelo de la ciudadanía y han convocado a un plebiscito el próximo 7 de diciembre y eso es esperanzador porque se es posible también, desde la ciudadanía, con actores distintos que sean relevantes para conducir, para abrir campos para esta salida que debe ser también política, pero hay que relevar eso.