Oh I'm just counting

Heraldo Muñoz, presidente del PPD y su análisis del gobierno de Piñera a Cambio21:"Gobernaron para los poderosos" y "esperamos que se acabe pronto"

Por Teresa Frías 

El presidente del Partido por la Democracia (PPD) Heraldo Muñoz, se refirió al escenario y la coyuntura política que se desarrolla a sólo cinco meses de la elección presidencial en su primera vuelta. En cuanto a declaración pública que hizo la Democracia Cristiana (DC), Partido Socialista (PS) y el Partido por la Democracia (PPD) donde se comprometieron a llevar una opción presidencial única, el excanciller y exembajador, Heraldo Muñoz apuntó que esto se hizo con el fin de "llegar a un acuerdo para tener una candidatura unitaria presidencial, que para nuestro juicio debiera ser una primaria ciudadana".

Por otra parte, en conversación con Cambio21 tuvo duras críticas al gobierno de Sebastián Piñera, puntualizando en las ayudas sociales las que calificó como pan para hoy y hambre para mañana. 

¿Qué lo llevó a bajar su candidatura presidencial?

No fue una decisión fácil. Gané una primaria ciudadana que convocó a 14 mil personas, mis números en las encuestas eran buenos en el marco de la Unidad Constituyente, levantamos un programa de gobierno que miraba al Chile de la próxima década, con un equipo de colaboradores de alto nivel técnico, paritario y en su mayoría independiente, y con la motivación de aportar a través de mi candidatura a un mejor país. Además, el PPD por primera vez llevaba un candidato presidencial propio, puesto que Ricardo Lagos fue candidato socialista y PPD.

Dicho lo anterior, decidí declinar mi candidatura por un bien superior, que fue unir a la izquierda democrática en una candidatura única para enfrentar a la derecha en noviembre. EL PS y Paula Narváez habían decidido ir a la primaria con el PC y el FA y no era posible que el PPD fuese separadamente a esa misma primaria, o fuésemos a una primaria que ya no sería de la Unidad Constituyente. Todo lo que ocurrió ese miércoles 19 de mayo fue realmente bochornoso, pues no pudimos consensuar una primaria de la centroizquierda, mediante el mecanismo de primarias legales. No fui partidario de concurrir a una primaria de la izquierda que dividía a la oposición, y fue un espectáculo lamentable el veto injustificado del Partido Comunista hacia el PPD, Nuevo Trato y el Partido Liberal, porque los apoyos a Paula hacia su candidatura la tornaron mucho más competitiva. Los supuestos campeones de la unidad de la oposición se sacaron la careta y demostraron que su discurso de unidad era tan solo eso. 

La exclusión nos permitirá, espero, arribar con la DC, y otros partidos de Unidad Constituyente, Nuevo Trato y el Partido Liberal, a una primaria convencional para definir una candidatura unitaria que compita con los abanderados que surjan de la derecha y del pacto PC y FA.

Junto a la DC, PS y el PPD acordaron llevar un solo candidato presidencial ¿Usted cree que este es el camino correcto?

No solo estoy convencido de que es el camino correcto, sino que además creo que es el único posible para un buen resultado en las presidenciales. Una centroizquierda fragmentada en dos o tres candidaturas tiene pocas opciones de enfrentar a la derecha y pasar a una segunda vuelta.

Además, nos parece fundamental una primaria ciudadana para definir esa candidatura única presidencial, porque eso le dará la legitimidad que requiere. 

Los tiempos se acortan finalmente ¿ la ex Concertación y ex Nueva Mayoría tendrán su candidato presidencial?

Efectivamente, el tiempo apremia. La primaria ciudadana podría hacerse a fines de julio o principios de agosto, ya que la fecha para la inscripción de candidatos y candidatas es el 23 de agosto. Es poco realista pensar en una primaria convencional antes del 18 de julio, que es cuando se harán las primarias legales de las otras coaliciones. 

Confiamos en arribar a una candidatura única a la brevedad posible y que –ojalá-- reúna a la DC, el PS, el PPD, Nuevo Trato y Partido Liberal, el PRO, el Partido Radical, y Ciudadanos. 

Si en una posible segunda vuelta presidencial están Lavín y Jadue en la papeleta ¿Ustedes como partido apoyarían a Jadue?

No nos ponemos en ese escenario. Las últimas tres elecciones –plebiscito de octubre, mega elección de mayo, y segunda vuelta gobernadores de junio- han demostrado una sola cosa: toda elección debe tomarse en forma particular y distinta a otras elecciones, a lo cual se suma un contexto político y social que sigue siendo muy líquido. Recuerde que hace unas semanas Pamela Jiles lideraba las encuestas y hoy se ha desplomado. Jadue, además, en la última elección de gobernadores fue uno de los principales derrotados.

Entonces, a cinco meses de la elección puede pasar cualquier cosa. No me gusta la política ficción y. por tanto, no especularé sobre escenarios hipotéticos. Nuestra preocupación hoy es arribar a una candidatura única de la centroizquierda, ser competitivos en noviembre y ser una alternativa real para la gran mayoría de los chilenos y chilenas que no quiere otro gobierno de derecha que proteja los intereses de las minorías.

¿Cómo califica usted los anuncios de ayudas sociales del Gobierno y los montos que se han entregado?

Hemos sido críticos de la gestión del gobierno al respecto. El Presidente Piñera jugó durante meses con la desesperación de la gente a través del regateo y el cuentagotas. Hay que recordar que dos actuales presidenciables de derecha -Ignacio Briones y Sebastián Sichel- se congratulaban de abrazos en el parlamento por un bono de 65 mil pesos. Y porque la ayuda llegaba en montos insuficientes y tarde, surgió la mala política de los retiros del 10% de los fondos de pensiones. Gracias a la presión de la gente y la unidad de la oposición en el Senado por los mínimos comunes, el Congreso fue capaz de hacer mejorar los aportes del gobierno. 

Tras los tres retiros del 10% se habla de un cuarto e incluso de un 100% de retiro de fondos  ¿Cuál es su opinión sobre estos proyectos y también qué piensa de las AFP y qué debería hacerse con estas entidades?

Considero que el gobierno debió ir en ayuda de la gente y no que las y los trabajadores tuvieran que sacar sus menguados ahorros destinados a la vejez para poder sobrevivir. El ejecutivo fue complaciente y torpe, y trató, inútilmente, de torpedear los proyectos de retiros, apoyados incluso por la derecha en el Congreso, recibiendo la estocada final cuando el TC declaró inadmisible su intento de declarar inconstitucional la iniciativa parlamentaria.

Hoy se estima que más de 4 millones de chilenos tienen menos de un millón de pesos en sus ahorros previsionales, o sencillamente saldo cero, esto es prácticamente el 40% de los afiliados al sistema. Permitir el retiro del 100% me parece que reviste un peligro aún mayor, porque condena a la gente a no tener cómo solventar la vejez. El sistema de AFP debe ser sustituido por un sistema de seguridad social, de carácter mixto, solidario y con equidad de género; pero a punta de retiros parciales o totales tendremos pan para hoy y mucha hambre para mañana.

El debate sobre la reforma profunda del sistema de pensiones está totalmente estancado y el gobierno no ha sido capaz de impulsarlo, pues solo protege el negocio multimillonario de las administradoras. 

¿Cómo califica al gobierno de Sebastián Piñera? 

Ha sido un gobierno pésimo, que no dejará ningún legado, pese al deseo del Presidente de dar aletazos de última hora para que lo recuerden positivamente, como el anuncio inesperado de dar urgencia al proyecto de matrimonio igualitario, que terminó por fragmentar a una derecha hoy hundida en la encuestas y los malos resultados electorales.

Creo que la lista de errores de este gobierno es infinita, desde una pésima gestión en política exterior, con tres ministros en cuatro años, hasta el manejo de la seguridad pública, con altos índices de delincuencia y temor ciudadano, pasando por retrocesos en cultura, ciencia, deportes, obras públicas, etc. Este gobierno gobernó para los poderosos, partiendo con una pretendida rebaja de impuestos.

Más de alguno dirá que la coyuntura del estallido social y la pandemia afectó los logros del gobierno; pero ahí también cometieron y aún cometen gruesos errores. Frente al estallido social el Presidente habló de una guerra y un enemigo poderoso, se violaron gravemente los derechos humanos de muchas personas que protestaban pacíficamente, y el descontento finalmente se logró canalizar mediante el proceso constituyente que hoy tenemos. 

Y respecto a la pandemia, quizás lo más valorable ha sido la compra anticipada de vacunas y el proceso de vacunación, pero seguimos teniendo cifras muy altas de contagios y fallecimientos, pese a que otros países, con menos cobertura en vacunas, ya comenzaron a desconfinar gracias a medidas efectivas de trazabilidad y cuarentenas más robustas para frenar los contagios. El manejo sanitario ha sido bastante irregular y eso ha costado vidas.

La verdad, y a modo de resumen, no hay legado de este gobierno que valga la pena resaltar, y como dijo una senadora ex presidenta de la UDI, esperamos que esta gestión se acabe pronto”.