Por María Cristina Prudant
La actriz y concejala por San Bernardo, Soledad Pérez, cumple rigurosamente con su papel de autoridad municipal. Atiende a las personas con paciencia y dedicación. También deja tiempo para su labor como animalista, es así como para las Fiestas Patrias encabezó una funa a un rodeo en el Parque Intercomunal Padre Hurtado.
“La Colorina”, “Playa Salvaje”, “Fuera de Control” y “Mujeres de Lujo”, entre otras, fueron las teleseries en las que participó. Es una mujer de personalidad fuerte y dice las cosas a la cara. Es muy empática con los temas sociales y sabe escuchar a la gente.
Soledad Pérez conversó con Cambio 21 sobre lo que ha pasado en el país durante este año.
¿Usted es animalista?
Si, soy muy animalista. Hace 15 años que estoy preocupada de los derechos, palabra súper manoseada en este país, que parece que a todos se les olvidó que significaba. A mí me da la impresión que en Chile hay muchas palabras que han pasado a ser parte de la repostería nacional. Que creen que es un postre, un agregado. Parece que de verdad se acabaron los diccionarios en este país que nadie tiene idea de lo que significan ciertas palabras, por eso que hay uso y abuso de tantas cosas.
¿Qué temas le interesan actualmente?
Me interesa mi país, lo que está ocurriendo día a día, lo que estamos viviendo, como se han pasado a llevar muchas cosas, como nos hemos olvidado que somos una república con derechos, con instituciones que deben dar lo que prometen , lo que se les obliga, etcétera.
¿Qué impresión tiene de lo que pasó en Ercilla donde mataron a un joven mapuche?
Toda la vida en Chile hemos hablado de la guerra y yo primera vez en mi vida, que escucho y lo digo en tono irónico muy sorpresivamente, descubro que hay guerras donde en un lado están armados hasta los dientes y los del otro lado están armados con palos y piedras. Yo no entiendo, a no ser que sea muy lenta, que exista una guerra donde unos estén respaldados por la cosa bélica y por el otro lado completamente desarmados. A mi me parece insólito, inconcebible, no lo puedo creer porque esta gente habla, digo el gobierno, habla de guerra en La Araucanía; que guerra hay si ellos han sido, toda la vida, pasados a llevar, robados, denigrados, vejados, maltratados, sus derechos olvidados.
Ellos lo que reclaman es una necesidad profunda de un buen vivir. Hay varios gobiernos que se han pasado la pelota unos a otros y no han podido llegar a un acuerdo real o a una solución que a ellos les dé una mejor forma de vivir, pacíficamente y sobre todo respetados. Esto es tan terrible lo que está pasando que me da la impresión que quisieran extinguir a nuestros pueblos originarios, terminar con el pueblo mapuche, que no molesten más, que no sea una piedra en el zapato. Me parece una vergüenza nacional e internacional. A mí me da vergüenza ser chilena, lo digo de lo más profundo de mi corazón.
Entonces, ¿cuál es su opinión del gobierno que está haciendo Piñera?
Primero que nada, no es mi Presidente, yo no voté por él porque no me identifico en nada con su pensamiento. Sabía que iba a venir esto y que vendrán otras cosas más. Lo pude vivenciar en su gobierno anterior. Creo que llegó calladito y se proyectó para volver a gobernar. Lamentablemente, la Nueva Mayoría se lo dejó en bandeja. Los chilenos pasan fácilmente del amor al odio, siempre estar con este vaivén de acuerdo a los acontecimientos. No hay una idea filosófica, ni histórica clara, ni que las cosas tienen una consecuencia y los hechos traen un camino histórico que recorrer. Yo te devuelvo el voto, te entrego tal cosa, te digo que te quiero y así sucesivamente.
Me llama mucho la atención porque no tenemos una postura acorde con las determinaciones serias que debemos tomar, como votar por nuestras autoridades.
Lo que usted dice nos recuerda cuán falta ha hecho la enseñanza de la educación cívica cuando llegó la democracia...
A la gente no se le preparó para lo que íbamos a empezar , para el camino que íbamos a recorrer. Se siguió adelante no más. Sin pensar que dos generaciones habían sido exterminadas durante la dictadura. Luego, gente que nació después de la dictadura, hijos de gente que había renegado de lo que ocurrió en Chile se formaron bajo el alero de ese pensamiento y por otro lado personas que no tienen idea de nada porque ni lo vivieron , ni se les orientó, ni educó, nada. Entonces, no podemos esperar tener un país con conciencia en ese sentido. Y votan por cualquiera.
El tema de los derechos humanos también ha cobrado importancia en el último tiempo
Absolutamente. Para mi gusto este año han ocurrido hechos súper dolorosos y la gente los pasa como si nada. Tenemos esta educación cristiana entre comillas donde hubo una indignación general por el tema de la pedofilia con los curas, pero seguimos rescatando que la Iglesia no tiene la culpa. ¿Cómo no va a tener la culpa? Si es la institución que salvaguarda y protege y que ampara a todos estos curas. Una vez más, no vamos al meollo de las cosas, siempre justificamos, pero el tema no va por ahí.
Y lo mismo pasó con la muerte de Anita González, gran luchadora de los derechos humanos que perdió a casi toda su familia durante la dictadura, que a nadie le importó salvo a un grupo, pero el resto de la gente no tiene idea. La culpan a ella de lo que hizo el marido y eso tiene la consecuencia de castigarla duramente. Eso es una visión cristiana muy malentendida.
Ahora tenemos como la guinda de la torta la muerte de Camilo Catrillanca y así sucesivamente. Para mí ha sido un año con muchos dolores y vivo con mi entorno, soy parte de una sociedad y no puedo hacerle el quite a lo que pasa o mirar para otro lado, con los acontecimientos casi a diario que están ocurriendo.
Los condenados por delitos de lesa humanidad que están en Punta Peuco quieren el indulto...
O sea, eso en ninguna parte del mundo existe. De que estamos hablando, cuando no se tiene compasión, y ellos no la tuvieron, deben cumplir su pena y se acabó, ellos fueron de una brutalidad, una maldad, de una perversidad sin límites. Mostraron la bestia más oscura que habita dentro del ser humano. Eso no tiene perdón ni olvido, ni nada y ellos tendrán que cumplir su pena hasta el último día de su muerte. Uno tiene que hacerse cargo de las cosas que hace en la vida.
¿Qué le parece que los adultos mayores vivan con pensiones miserables?
Soy una convencida que Chile es un país republicano manejado por el poder. El gran poder económico, empresarial, es el que maneja nuestras vidas. Basta ver las tarjetas de plástico, los grandes almacenes que venden a crédito y asfixian a la gente porque es pan para hoy día y hambre para mañana. No olvidemos que las tarjetas plásticas las trajo a Chile Piñera.
Aquí los pobres seguirán haciendo más ricos a lo que ya lo son, por lo tanto tomen las propuestas que se hagan en el país a nivel de leyes. Me sorprende la actitud política del país, de los legisladores. Me da que pensar esta especie de trenza política entre empresarios y políticos para no legislar, no poner leyes más duras, para no aplicar la ley como corresponde.
¿Usted quiere un cambio a la Constitución?
El cambio a la Constitución es válido. ¿Por qué no se trabajó en una nueva Constitución, por qué si los hechos hablan por sí mismos? Yo tendría que ser muy bruta para no darme cuenta de que si políticos partieron en democracia trabajando en eso no se haya cambiado. Una Constitución antojadiza , exprimidora, arbitraria que les permite hacer todo lo que se hace. Soy una ciudadana común y corriente que vivo bajo ese yugo. Me entristece que los legisladores elegidos por el voto popular no sean capaces de sacar adelante todo esto, de cambiar la calidad de vida.
Hay tan poca compasión por los adultos mayores, quienes serán mayoría en el país en 30 años más. Yo he visto cosas horrorosas que viven los adultos mayores, más bien de lo que no viven, porque ellos sobreviven de una manera dramática. Aquí no existe la voluntad de hacer las cosas, Chile es un país rico, es mentira que es pobre. Si no siguieran llenándole los bolsillos a los más ricos este país podría estar mucho mejor, con calidad de vida.
Foto Portada: Actriz Soledad Pérez en una de sus tantas teleseries.