Por María Cristina Prudant

La diputada Loreto Carvajal (PPD) que representa en el Parlamento a la Región del BíoBío, está próxima de dejar la vicepresidencia de la Cámara. En estos momentos sus preocupaciones son múltiples dado el panorama que ha generado en el país la pandemia de coronavirus. Precisamente, es su región donde en estos momentos existe un gran déficit de insumos e infraestructura para atender a los contagiados.

La diputada que conversó con Cambio21 no está conforme con el manejo de las autoridades sanitarias y tampoco aprueba la actuación del gobierno que ha querido pasar "colados" proyectos de ley que perjudican a los trabajadores precarizando aun más su situación.

Y la vice presidenta de la Cámara plantea una idea que es lo más probable que no le agrade al Presidente Piñera: Qué mejor y potente señal que debiera tener el mandatario que donar la mitad de su patrimonio. Según Forbes, su riqueza llega a más de dos mil 600 millones de dólares.

Toda una controversia ha sido la discusión en el Parlamento sobre el proyecto de ley que precariza la situación de los trabajadores. ¿Cuál es su opinión respecto a este tema?
Es necesario y urgente atender que es la crisis sanitaria, por un lado, tratando de ver en esto y enfocando también la política y todo el quehacer del gobierno en esa materia, pero con matices que a veces caen en la improvisación y la prepotencia por parte de alguno de los actores. O sea, escuchar al ministro de Hacienda (Ignacio Briones) escuchar a la ministra del Trabajo (María José Zaldívar) creyendo que esto se trata de una suerte de gallito entre la oposición y el oficialismo, en razón de mejorar los proyectos y aprobarlos sin más trámite nos parece un poco prepotente. O sea, yo siento que hoy día es efectivo que la crisis mundial y, particularmente en Chile, merece la atención pero eso no puede servir tampoco de canal o de compuerta para generar acciones o políticas, en este caso, o proyectos de ley que buscan de cierta manera no hacerse cargo del problema completo o acrecentar y hacer ver en la ciudadanía como si esto fuera un enfrentamiento entre la derecha y la izquierda.

¿Qué fue lo que pasó en la discusión del bono covid?
Digo esto porque a propósito del bono (Covid-19) que se quiere entregar a un grupo sumamente definido, un bono de 50 mil pesos por carga por una sola vez es no hacerse cargo del conjunto de los problemas ya que la crisis va a durar al menos tres meses. El poder oponerse a eso en el Congreso tiene que ver con que también hay conciencia de que las realidades y que lo que hoy día convoca es, justamente tratar de orientar los recursos y las políticas públicas de manera unitaria a resolver el objetivo y a frenar los daños que se generan o los efectos que esto genera; la subsistencia de la población más vulnerable.

¿Cree usted que el gobierno se está aprovechando?
Es evidente que el gobierno no puede pretender aprovecharse de una crisis sanitaria de pasar como se dice vulgarmente “gato por liebre”, es decir, venir a imponer a corto plazo proyectos que no solucionan el problema completo, sin hacerse cargo, por ejemplo, de cuestiones tan trascendentales hoy día, dentro de la emergencia que tenemos, a propósito, por ejemplo, de retener o impedir que los efectos negativos de los fondos de las AFP sean hoy solamente parte del efecto o más que eso, que repercutan solamente en los afiliados. El poder generar políticas públicas en esa materia creo que, obviamente habla de un sistema que sigue siendo muy vulnerable en todo contexto y el gobierno no mira, ni pretende, a propósito de la crisis, solucionarlo de manera profunda.

Pero hay recursos que se ocupan en arrendar el Espacio Riesco. ¿Qué opina?
Cuando vemos el arriendo de Espacio Riesco, uno se pregunta a causa de qué hoy día se inventan, se anteponen, se prevén recursos, independiente del número de personas, que también es legítimo, pero que en las regiones no tengamos ningún soporte adicional de financiamiento, ni tengamos siquiera instalaciones adecuadas para la crisis que también está afectando a mi región Ñuble, a la del BíoBío y de La Araucanía. Entonces, ahí hay una visión centralizada, hay una visión absolutamente desagregada de lo que pasa en Santiago, en ciudades con más condiciones económicas que soporten más y qué pasa con el resto de las comunas del país. Hay crisis sanitaria en los hospitales, también a propósito de los insumos, hay una necesidad urgente de resolver el tema económico pero para todos no sacamos nada de aportarle ciertos recursos a la banca, en este caso BancoEstado, cuando en la práctica tenemos lugares donde se cierran las sucursales de BancoEstado a propósito de la barrera sanitaria, eso no se condice cuando llegan los días en que los vecinos, adultos mayores llegan a cobrar sus pensiones, que significa la subsistencia de ellos, no se condice que haya negativa del Ejecutivo o del ministro de Hacienda para abrir un poco más la billetera y generar una bonificación o un bono Covid a un grupo más grande de personas, sobre todo a los trabajadores informales.

¿Y qué pasa con la decisión de la dirección del Trabajo que deja a los trabajadores a la deriva?
No se condice que haya una resolución de la Directora del Trabajo, en que permita o le dé la carta blanca a los empleadores para despedir y que a propósito nos apuren con un proyecto de seguro de cesantía donde lo que se quiere hacer, es cubrir con los propios recursos de los trabajadores una situación que debiera abordarse desde el gobierno y no de los propios recursos que tenemos cada uno para situaciones excepcionales, de fuerza mayor. El gobierno debe hacerse cargo.

El ministro de Hacienda dijo que las indicaciones de la oposición al proyecto del gobierno son inconstitucionales y que perdieron 7 horas discutiendo para nada. ¿Le parece a usted?
Ahí tienes tú la prueba más certera de lo que ha sido la prepotencia del gobierno. Qué cree que nosotros somos autoridades de segundo, tercer plano que no tenemos capacidad para discutir el proyecto, para se profundice y se amplíen los recursos porque es mucha más la gente que necesita ayuda. Quién crea que el efectivamente que el gobierno, dada esta crisis, se pueda aprovechar del aparato legislativo y pueda pasar “gato por liebre” puede venir a pretender leyes que son de un efecto acotado y no llega a lo profundo de la situación está muy equivocado y se tiene que bajar del peldaño.

Por ejemplo, se vio el proyecto donde se pretende dejar en libertad por razones de humanidad a los que tengan sentencias y puedan cumplirlas en sus casas, con condición antes súper estrictas en que había un consenso total para aprobarlas, pero aparece la diputada Flores, el diputado Bobadilla, gente de derecha pretendiendo que también podrían tener acceso a ello, que era discriminatorio no permitir este derecho a los que cometieron crímenes de lesa humanidad, para que se vayan a sus casas. Ahí uno piensa que esto se convirtió en una oportunidad para ellos, para darle libertad a los criminales y que se vayan a sus casas. El ministro estaba consternado porque fue su propia gente la que le echó abajo un proyecto que estaba listo, que tenía otros objetivos y que ahora gracias a la derecha va a tener que votarse de nuevo.

Es extraño que el gobierno se apresure tanto a tomar medidas en ese nivel cuando aun no llevamos un mes de la pandemia en el país, y por lo tanto todavía no repercute en las empresas. ¿Qué le parece?
Yo creo que la mirada engaña al gobierno de Piñera en el sentido que siempre mira el menor efecto posible que pueda provocar al grupo minoritario que son sus adherentes, que son las grandes empresas. Le cuesta genuinamente entender y ponerse en el lugar de la población más vulnerable, a propósito de lo que mencionas en la pregunta. Ya estamos pensando en cómo adecuamos las condiciones para que en el caso de cierre de empresas podamos despedir a los trabajadores. Eso no se entiende, no tiene lógica, no tiene ningún sentido de la realidad. Estamos en medio de una crisis social profunda, tenemos una crisis sanitaria sumada, que va a provocar efectos por supuesto gigantes, a propósito de la economía y estamos mirando cómo mantener las mejores condiciones del empresariado con mucho más resguardo del que tiene la población más vulnerable. Lo que corresponde es en qué aportará el Estado en este problema y no que la solución sean los recursos del seguro de cesantía.

Deben haber medidas más concretas en la mantención del empleo, generar condiciones para que los pequeños propietarios, empresarios tuvieran más condiciones para poder solventar sus empresas a tener que pensar inmediatamente que el trabajador de una gran empresa por tener un 10% menos de utilidades tenga carta blanca para cerrar y despedir. Creo que las condiciones de vulnerabilidad hoy día son mucho más grandes, se acentúan con esta crisis y hoy día se desmantela, se desvela lo mismo de siempre las poblaciones, los sectores más carentes son los que están pagando las con secuencias.

La potente señal que debiera tener Piñera: donar la mitad de su patrimonio

¿Pero los ministros, por ejemplo, anunciaron que se van a disminuir un 30% sus remuneraciones?
A mí me parece una señal bien oportunista aparecer diciendo que los ministros se van a disminuir un 30% el sueldo. Yo digo, si aquí habláramos realmente en serio los ministros tienen fecha de vencimiento igual que nosotros, distinto es cuando queremos avanzar en un proyecto de ley que rebaje la dieta, sería bien poco útil, pero si ellos quieren realmente hacerse cargo de una parte del patrimonio que ellos tienen, digamos cuánto es lo que tienen. Partiendo por el Presidente Piñera: ¡qué buena señal sería que dijera yo dono la mitad de mi patrimonio!... A propósito de generar con eso recursos para enfrentar la crisis. Creo que eso sería más genuino.

Ahí esas señales medio populistas que de pronto pretenden, a propósito de la crisis, revertir la crisis social profunda que tenemos, que venimos arrastrando desigualdad hace tantos años, creo que no corresponde siento que debieran, efectivamente hacerse cargo de una realidad sanitaria que denota la vulnerabilidad del país, pero que además hay que enfrentarla, pero sin dejar de hacerse cargo de las realidades sociales y de los cambios estructurales que demanda un país que quiere enfrentar la crisis de manera completa no solo con medidas que a veces suenan bonito, pero que vemos en los proyectos de ley, querer solucionar por un tiempo acotado o revertir la mirada de los chilenos hacia un gobierno que ha sido deficiente y que hoy a propósito de la crisis está tratando de salir a flote.

¿Cuál es la situación sanitaria en su región Ñuble?
Está muy mala. Yo vengo diciendo hace casi 15 días y desde que entregué una carta al Ministerio de Salud, pidiendo y exigiendo mayor atención ya que dado los altos contagios el panorama es muy complejo. Hoy con esas condiciones somos la región en Chile que tiene menos hospitales con resolutividad o cama UCI. Tenemos solo capacidad para 34 y las tasas de contagio van en aumento.