Por María Cristina Prudant
La diputada Ximena Ossandón en entrevista con Cambio21 aseguró que cualquier Presidente que asuma en el próximo gobierno, tendrá problemas, “será muy complicado” porque la gente está más demandante y desconfiada. Respecto a su partido RN espera que la próxima mesa directiva no sea de consenso porque duran poco.
¿Cuál es su reacción frente a la extensión del posnatal de emergencia?
De hecho, todas las diputadas de Renovación Nacional hicimos un proyecto de resolución, justamente pidiendo al gobierno la evaluación de que se prolongara el postnatal de emergencia, debido a que el Presidente también alargó el período de estado de catástrofe y bueno, la situación no se ha normalizado. Las circunstancias que existían anteriormente, hoy día siguen siendo angustiosas para las madres y también con este tema que no todos los jardines están abiertos y además, existe el temor y por otro lado, tampoco están habilitados los que están para el cien por ciento de su capacidad entonces, creemos que si el gobierno lo tiene bien nos encantaría. De alguna forma, transversalmente estamos haciendo una petición, las senadoras también para que se vuelva a evaluar esta medida que ha tenido un impacto, para mi gusto, bastante positivo.
Aseguran las autoridades que viene un rebrote fuerte del coronavirus y nuevamente comienzan las medidas como las cuarentenas. Una vez más se presentarán los problemas económicos para las familias. ¿En su opinión cómo debería reaccionar el gobierno esta vez?
En este minuto tenemos la Región Metropolitana en Fase2, más allá de que las cifras están empezando a ser preocupantes, justamente para anteponerse a una situación sanitaria peor y entendiendo que las fiestas (de fin de año) dado por lo que significa para las familias chilenas, la tendencia es a saltarse eta norma y estamos siendo un poco inconsciente. Entonces, en el fondo, lo que está haciendo el gobierno en este minuto es hacer un llamado a que volvamos a tomar conciencia que la segunda ola no solo está pasando en Europa, que es una cosa real, que puede pasar en Chile.
Una segunda ola muchas veces, está comprobado científicamente que los bichos son más resistentes que la primera vez y hay que volver de nuevo a preparar todo el sistema público y también el privado, en el peor de los casos, y es por eso que se ha tomado esta medida dado que la gente, por razones muy naturales no solo por las fiestas sino por la cantidad de tiempo que han estado de alguna forma confinado ha salido en masa a las compras, a la playa, tratando de alguna forma de volver un poco a la normalidad, siendo que bajo ninguna circunstancia estamos en un período normal.
Y es por eso que el ministro dijo que va a evaluar en dos semanas más porque se tiene conciencia también de los efectos colaterales que esto tiene en términos económicos y la idea es de alguna forma ir controlando lo sanitario para poder ir dando pasos en el tema económico y es por eso que en esta Fase2, en el fondo, es Fase2 de fin de semana pero, prácticamente es Fase 3 en la semana, cosa que de alguna forma vayamos tomando conciencia, pero no nos han mandado a todos a cuarentena como estuvimos tantos meses, al menos recuerdo que los mayores estuvieron 4 a 5, 6 meses. Nosotros tuvimos la cuarentena tres meses también en la zona donde yo vivo.
Entonces, es de alguna forma prevenir, para que el día de mañana, tampoco se vaya a decir que las autoridades no tomaron las medidas sanitarias porque hoy día la gente está en contra pero si después empiezan a aumentar los muertos, comienzan a buscarse los culpables en todos lados. Y yo creo que ya tenemos una suficiente experiencia acumulada como para, de alguna forma, plantear una estrategia distinta a la que se planteó en el principio y evitar la mayor cantidad de muertes posibles y seguir con el tema de las trazabilidades y las personas tomen conciencia de que esto no ha terminado. Si bien estamos ya hablando de la vacuna, pero mientras no estemos vacunados una parte importante de la población con sus dos dosis y después de eso tengan anticuerpos no está resuelto.
Los problemas económicos derivados de la pandemia aún no se superan. Una parte de los trabajadores formales ha recuperado su trabajo, pero qué pasa con los informales que son muchos. ¿Cree usted que el gobierno debiera pensar en una ayuda, tal vez tomar en cuenta esto de entregar un IFE universal?
Yo soy partidaria del IFE universal, claramente con su cierta focalización porque como bien se dice hay muchos que han podido volver a sus trabajos, pero claramente hoy día yo noto un ambiente distinto con este retiro del segundo 10%, al menos en los sectores más vulnerables y las personas que tenían cotizaciones ya no les queda un peso, entonces no se va a sentir esa mejora que se sintió inmediatamente, por el contrario, yo estoy sintiendo que de alguna forma las ollas comunes están empezando a tomar fuerza de nuevo porque, claramente esas personas que tuvieron un pequeño alivio con el tema del IFE y además de su retiro del primer 10% y en algunos fue su 100%, hoy día se está empezando a sentir. Así yo me imagino y estamos insistiendo también que el gobierno de aquí al menor tiempo posible reevalúe un IFE, que fue una política que en un principio tuvo problemas de4 implementación, pero que hoy día ya se tiene harta más experiencia, ya se sabe bastante mejor cómo entregarlo, a quién entregarlo porque entre los municipios y las personas que estamos participando en este proceso hemos ayudado muchísimo a las personas que puedan tener al día su Registro Social de Hogares (RSH), que estén al día aquellas personas que han terminado sus trabajos y que de alguna forma esos finiquitos no han conversado con el RSH.
Bueno, lo que vamos a tener para Chile en adelante, o sea, esta pandemia a nosotros nos tiene que enseñar que el tema digital es tremendamente importante, que Impuestos Internos tiene que estar digitalizado, tiene que estar on line, con la Inspección del trabajo también, o sea, hay muchas cosas que vamos a tener que mejorar como país dado la experiencia que tenemos, porque uno no sabe cuándo, ni cómo puede volver una catástrofe de esta índole, pero creo que, claramente se tiene que venir otro IFE, ojalá fuera universal porque hay una clase media que siempre es el jamón del sándwich, que quedan fuera de todo, me consta tengo varios casos reales de personas que no les bajó lo suficiente para conseguir los $500 mil y por otro lado tampoco fueron susceptibles de recibir el préstamo de los $350 mil por tres meses que era para la clase media también. Hay un grupo de personas que quedó fuera de todo y creo que ahí es donde hay que poner ojo también porque la clase media si bien tiene más ingresos, pero jamás recibe la ayuda directa del gobierno que da a lo largo del año y son personas que de alguna forma tienen más gastos que tal vez una familia vulnerable, en términos de endeudamiento, pago de arriendo, de hipoteca, colegios, universidades, muy angustiados. Eso es lo que yo percibo al menos, en los distintos cabildos que he estado realizando, el último tiempo y que van a terminar mediados de enero.
El gobierno no quería un segundo retiro del 10%, sin embargo más de cinco millones de personas y lo han solicitado. ¿Qué le parece a usted?
Es bien impresionante. Primero que todo también hay que reconocer que el gobierno terminó presentando un proyecto que jamás, nunca pensaron que lo iban a hacer. Y me imagino que fue después de una meditación sobre lo que pasó con el primero, que de alguna forma vino a producir una pequeña reactivación económica sobre todo en la economía local, de la zona y que al final es triste, a mí me parece, que es triste que después se tenga que retirar el segundo 10% y ahora viene apoyado por el gobierno porque, en el fondo son las mismas personas que están, de alguna forma solventando esta crisis. Creo que Chile es un país que tiene un prestigio, que siempre se está comparando cuando le conviene con países latinoamericanos cercanos, pero que no tienen capacidad de crédito y a nosotros ahí se nos olvida que nos tenemos que comparar con países que sí tienen un prestigio, una capacidad crediticia que otros no tienen. Entonces, el gobierno dice que hemos gastado más del promedio del PIB, hablan de 9 puntos que es mucho más que varios países que están alrededor nuestro, pero no nos estamos comparando con países que realmente tienen esta capacidad de tomar créditos, por la historia financiera que nosotros hemos tenido y ahí nos saltamos a otros países donde la ayuda para la gente ha sido del 19 puntos del PIB. Entonces, ahora veremos si el gobierno arriesga más y cuando uno tiene la familia enferma y tiene algún problema, ahí es cuando uno pone toda la carne a la parrilla. Yo entiendo que hay que sr prudente y moderado, pero los ahorros y la capacidad de crédito, justamente están para cuando se vive una pandemia económica y también una pandemia sanitaria como la que estamos viviendo ahora. Espero que exista ese análisis y nos comparemos con los países que han gastado los 19 puntos del PIB.
Renovación Nacional está en crisis como todos
Diputada, en el plano político, ¿qué pasa con Renovación Nacional está en crisis, están muy divididos, varias renuncias? ¿Cuál es su opinión?
Mal de mucho consuelo de tontos, pero claramente creo que no existe ninguna colectividad que en este minuto no esté en crisis porque la política está en crisis. Y eso no quiere decir que nosotros no lo estemos. Si analizamos todo lo que está pasando en la oposición, está recién empezando a organizarse con esta Unidad Constituyente. Tiene problemas con el Frente Amplio que se está descolgando la gente, la izquierda tampoco tiene líderes definidos, la UDI también está en un proceso complicado, también se le han ido diputados. Y nosotros siempre hemos sido un partido bastante diverso, entonces es fácil que se den este tipo de situaciones, no es la primera vez, no espero que sea la última tampoco y tendremos que ver si tenemos la capacidad de entre todos, entre Chile Vamos, de alguna forma jugarnos por un plan común, por un objetivo común de lo que nosotros consideremos lo que nosotros queremos para nuestra sociedad, para nuestro Chile y tenemos que salir adelante.
Es cierto que la prensa como que agranda mucho el problema, yo no siento tan grave porque siempre han existido estas divisiones. Renovación Nacional, excepto la última mesa que es de consenso, que para mi gusto los consensos no sirven de nada porque al final cada tira el mantel para donde se le ocurre y de alguna forma no se pueden plasmar los proyectos políticos que pueden estar dentro de los mismos partidos. Así es que yo espero que cuando vayamos a elecciones, cuando los consejeros decidan, pero a mí me parece que seguir con estas mesas de consenso son como ciertas fotografías que se van como para el mundo exterior y para la prensa especialmente, pero en la práctica no sirven mucho porque incluso dentro de un partido uno tiene tendencias distintas y está bien que tú puedas de alguna forma, poner en práctica tu posición, tus prioridades versus otros que tal vez pierden elecciones. Lo importante es que no perdamos el sentido democrático y que en elecciones la mayoría que pierda respete a la mayoría que gane porque siempre ha sido la tónica de Renovación Nacional. Pero a mí lo que no me parece y espero, no puedo asegurar que no resulte que vuelvan a hacer una mesa de consenso y para mí gusto las mesas de consenso duran poco.
¿Le gustaría que volviera Mario Desbordes a la política activa en RN?
Desbordes se fue, yo creo que me encantaría que volviera quien tenga que volver, también Cristián Monckeberg también puede ser y pueden haber otras cartas. Lo importante es que tenga el consenso mayoritario de los consejeros porque ellos son los que votan en definitiva y representan a las bases. En eso soy profundamente democrática y creo que parte de nuestro problema fue cuando Mario se fue porque nadie esperaba que se fuera, fue una sorpresa para todo el mundo y se veía venir inmediatamente el descalabro porque se va la cabeza y es natural que las fuerzas disidentes dentro del partido, empezaron a golpear la mesa.
El 7% de aprobación de Piñera: “Al gobierno le cuesta dialogar”
El Presidente Piñera ha tenido una baja ostensible en aprobación, ahora llega al 7%, el gobierno en general con un 8% crece la desaprobación. ¿Por qué cree usted que está pasando esto?
Primero que todo, hay que ser súper justos. Le tocó pagar la cuenta de políticas públicas que vienen hace 30 años y yo creo que el gobierno ahora está entendiendo cuando vemos estos proyectos con el 10%, se está entiendo un poco lo que la gente quiere, pero hasta hace poco tiempo no había ese vínculo con la ciudadanía y eso la gente lo resiente muchísimo, de no sentirse amparado frente al gobierno en una crisis sanitaria y económica y necesita que el Estado te dé ese nivel de protección y eso es lo que no siente, pero se arrastran dos temas distintos, que el estallido social es anterior a la pandemia y no es solo culpa de Sebastián Piñera y su malestar de un sistema, de un modelo que viene instalado hace mucho tiempo que si bien hizo avanzar al país en muchos aspectos, mucha gente se quedó atrás y llegó el minuto en que la gente dijo: no quiero más. Y parte del problema actual es la clase política, somos nosotros, también entra el gobierno cualquiera sea y creo que cualquier presidente que venga no lo va a tener fácil, va a ser muy complicado, va a tener un país bastante arruinado en varias materias y con una ciudadanía que está cada vez más demandante.
Así es que no es fácil y es muy difícil hoy día comprometerse o prometer ciertas cosas porque la gente está muy resentida, muy dolida, cree poco. Hoy tenemos un nivel de desconfianza y de falta de cohesión social brutal, lo que digan lo que hagan hay sospechas. Después llega un gobierno que promete en una campaña que era netamente económica, que íbamos a recuperar el crecimiento, el empleo, y por distintas circunstancias no se dio. Y eso es lo que se le pasa la cuenta, independiente de que tú puedas decir me llegó la pandemia, pero es que a las persona eso no le importa, habían una ciertas promesas de campaña que no fueron cumplidas y tenemos un gobierno que le cuesta dialogar, entender a la gente y que le cuesta incluso comunicarse con sus parlamentarios y eso están tratando algunos de revertirlo.