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Diputado Ignacio Urrutia defiende el Golpe y a Pinochet en Cambio21: No puede haber reconciliación si el que dio la orden de matar a Pinochet es diputado

Por María Cristina Prudant
 
El diputado Ignacio Urrutia milita en el nuevo Partido Republicano, que dirige el ultraderechista José Antonio Kast. Perteneció a la UDI durante varios años. Es conocido por sus exabruptos en la Cámara donde sus dichos han causado escozor porque ha llegado a las ofensas. Lo han pasado varias veces a la Comisión de Ética, pero no le teme. Tenía 15 años cuando fue el golpe militar y lo llama pronunciamiento militar. Este es su relato a Cambio21.
 
¿Se dio cuenta del golpe, sabía lo que estaba pasando en el país?
Le voy a contar algo. En Parral se hace un homenaje a Guillermo Valdés. Era un transportista que fue asesinado el 10 de septiembre del año 73. Un transportista parralino que trabajaba con mi familia. Yo para el día 11 de septiembre iba detrás de la carroza caminando hacia el cementerio, me acuerdo perfectamente bien de todo lo que ocurría y el sufrimiento durante el gobierno de Allende, durante la segunda mitad del gobierno de Frei Montalva, de mi familia cuando le quitaban sus bienes, me acuerdo perfectamente, jamás se me ha olvidado. Pero lo que más me quedó grabado fue el asesinato de Guillermo Valdés.
El asesino de Valdés, fue un miembro del grupo de amigos personales de Allende.
 
¿Ese caso está resuelto o no?
No tengo idea, después vino el pronunciamiento militar, yo supongo que le deben haber pegado un tiro al huevón. Lo único que le puedo decir es que dejó a 5 niñitas, la mayor de 9 años, y mi familia se hizo cargo de ellas por muchos años cuando se debería haber hecho cargo el Estado.

¿Usted después estudió?
No, yo no estudié en la Universidad. Yo salí del colegio y me puse a trabajar.

¿Usted cómo vio al país después del golpe?
El país estaba completo y totalmente destruido. Yo era joven, todo lo que quieran, pero veía a mis padres. Ellos salían todas las tardes a apoyar a los agricultores que les tomaban los campos y en la noche  llegaban a las tres de la mañana. Se vivían momentos de mucho nervio  de mucha preocupación. No fue un tema fácil por lo menos para mi familia.
 
Con el tiempo, ¿cuándo se instaló la Junta de Gobierno, hubo cambios en el país?
Vinieron cambios profundos, principalmente en el tema económico ya sea de ayuda porque Pinochet tenía una ventaja, no era un hombre cerrado aceptaba consejos, mucha asesoría que, probablemente otro militar no habría  aceptado, meter  todos los Chicago Boys, el propio Jaime Guzmán, Jorge Alessandri que le ayudaron a armar la Constitución. Otro no lo habría hecho, pero él sí tuvo la capacidad de escuchar a más persona y abrirse a ellos por lo demás.

Hay quienes reconocen los avances económicos, pero sí hay  muchas críticas a como se trató el tema de los derechos humanos porque hubo muchos desaparecidos…
Sí, efectivamente ahí hubo errores graves, pero hubo muchos enfrentamientos,  y los enfrentamientos no existen. Todos los que quieran revisarlo lo que hace el juez (Mario)Carroza de meter presa a gente que el año 73 luchó porque hubo una guerra durante mucho tiempo y esa guerra no existe hoy, son todos asesinos para el juez Carroza.
 
Entonces, a mí me da la impresión que, efectivamente hubo violaciones a los derechos humanos y yo las lamento profundamente y  hay gente que se haya prestado para eso, pero lo que encuentro inaceptable que se diga que aquí el gobierno se tomó el poder a propósito para aniquilar a cierta cantidad de personas, eso me parece absolutamente absurdo. Aquí se provocó un pronunciamiento militar porque la gran mayoría de la ciudadanía pidió la intervención de las Fuerzas Armadas.
 
Era cosa de pasar por los cuarteles  y ver la cantidad de maíz que había a la entrada de los cuarteles. Entonces no me vengan con cuentos, aquí efectivamente habían muchas armas, había mucho terrorista armado en Chile y ahí hubo enfrentamientos que duraron bastante tiempo, o si no, no me digan que fue el atentado a mi general Pinochet no era para matarlo. Eso fue inventado también, según el juez Carroza.
 
¿Qué están en Punta Peuco?
Los que están en Punta Peuco es gente inocente, recibían órdenes de los que estaban más arriba por lo tanto, no deberían estar casi ninguno de esos preso.
 
¿Usted no cree en la culpabilidad de Manuel Contreras?
No, yo no estoy hablando de Manuel Contreras, él está muerto
 
¿Pero fue condenado y estuvo en Punta Peuco?
Estoy hablando de la gente que está actualmente en Punta Peuco. La mayoría de la gente que está hoy día en Punta Peuco, a mi modo de ver, son absolutamente inocente, recibieron órdenes de arriba. La gente que sabe de las Fuerzas Armadas  entiende que si uno no hacía caso a una orden pasaba a ser un traidor. Por lo tanto, las órdenes son para cumplirlas.
 
¿Y Krassnoff, Corbalán y otros que mataron a muchas personas también son inocentes?
Eran subalternos de otros. Corbalán era subalterno de Manuel Contreras por lo que sé y Krassnoff también.
 
Entonces, ¿usted no cree en los informes como el Rettig y otros?
Escúcheme, no nos confundamos. Yo digo que,  efectivamente hubo violaciones a los derechos humanos, pero la gran mayoría no, fueron enfrentamientos con terroristas, con delincuentes comunes y corrientes. Hasta el año 86 teníamos terroristas adentro del país, ahí fue cuando se atentó contra el Presidente de la República.
 
¿Cómo encuentra usted que fue el proceso para recuperar la democracia?
Ese es otro cuento más de la izquierda, según ellos recuperaron la democracia. Aquí se aprobó una Constitución el año 80 y decía clarito como el agua cómo se entregaba el poder y se cumplió paso a paso, no hubo nada que no se cumpliera. No es que ellos hayan recuperado la democracia.
 
¿Usted hubiera preferido que siguiera gobernando Pinochet?
En esos momentos de todas maneras, ante la posibilidad que pudiera llegar la izquierda no me cabía ninguna duda. De hecho voté por el Sí y lo volvería a hacer de nuevo.
 
¿Y cómo ha visto la recuperación del entendimiento entre los chilenos?
No sé cómo se puede recuperar el entendimiento entre los chilenos cuando el que dio la orden de matar al Presidente de la República, mi general Pinochet está hoy día como diputado de la República en el Congreso. Discúlpeme, pero no hay por dónde buscar que haya una reconciliación.
 
¿Usted se refiere a Guillermo Teillier?
Yo me refiero al que dio la orden. Lo reconoce él, se define como combatiente, lo dijo en un reportaje. Él dio la orden y fueron asesinados cinco escoltas. Entonces, cuando usted tiene a ese personaje como diputado de la República, de qué podemos hablar.
 
¿Cómo se explica entonces que haya ganado el NO por mayoría?
Porque hay un desgaste. Usted comprenderá que un gobierno que lleva 17 años tiene un desgaste tremendo. Aquí los gobiernos tienen cuatro años y al que viene después le va como la mona. Es cosa de ver lo que ocurrió con Piñera uno, que se suponía que había hecho  un buen gobierno y salió la Bachelet. Con Bachelet  dos se suponía que lo había hecho bien y salió Piñera otra vez.
 
Entonces, si hay desgaste con cuatro  años imagínese el desgaste que se puede producir. Y no fue tan abrumador el triunfo, pese a eso  Pinochet  sacó un 43 por ciento, que no es bajo.
 
¿Usted cree que ese 43%  se mantiene en el país?
Es cosa de ver las últimas elecciones. De ese 55% que sacó Piñera cuánto corresponde a ese 43, yo creo que hay una parte importante. Hoy día quien encabeza las encuestas no es Joaquín Lavín, es José Antonio Kast. La mayoría de la gente que lo apoya es precisamente la gente que apoyó el gobierno de las Fuerzas Armadas.
 
¿Usted votaría por Lavín o Kast?
Por Kast de todas maneras. Yo soy militante del Partido Republicano. No tengo donde perderme, usted comprenderá que no voy a votar por alguien que se declara aliancista-bacheletista, no es ni chicha ni limonada, por ningún motivo.

Usted se refirió al juez Mario Carroza ¿qué le parece cómo lo ha hecho en el caso de Hernández Norambuena?
Ese fue un acuerdo que se tomó entre el gobierno de Chile y Brasil. Y el ministro solo tenía que mantener el acuerdo, habría sido simplemente insólito que no lo hubiera mantenido. Era un acuerdo de Estados.

Los tiempos mejores no llegaron

¿Y cómo encuentra usted el país en la actualidad?
No muy bien, no como yo quisiera. Me encantaría que a Piñera le estuviera yendo fantástico, que estuvieran las cosas muy bien, pero la verdad que siento que los Tiempos Mejores no han llegado. Se le dio muchas expectativas a la gente y no se le ha cumplido.
 
Estamos con una delincuencia, pero tremendamente  desatada, yo no había visto nunca tanta delincuencia en nuestro país como ahora. A mi familia le han entrado a robar nueve veces durante este gobierno. Le voy a contar que la última vez que le entraron a robar a mi familia en el campo habían pasado catorce días y todavía el fiscal no había dado la orden de investigar.  Así es como nos respalda la justicia en nuestro país.

¿No cree en la justicia chilena?
No, no es que yo no crea en la justicia, encuentro que la justicia está funcionando pésimo. Y por eso yo soy absolutamente partidario de cambiar casi entera la Reforma Procesal Penal, ahí está el problema mayor y se lo he planteado al Gobierno. A Chadwick se lo plantee también, le dije: hagamos cambios.

Cómo va a ser posible que sigan teniendo abogado los delincuentes. Eso es absolutamente impresentable.

¿O sea ellos no pueden tener abogados?
No, pagados por el Estado. Que se lo paguen ellos. Entonces, nosotros las víctimas tenemos que esperar que los fiscales atiendan nuestras causas, pero pasan catorce días y todavía no dan la orden de investigar. A mí no me sirve para nada eso.

¿Qué opina del alto desempleo?
El problema es que se han creado 170 mil nuevos empleos de los cuales 160 mil son para extranjeros. No estoy en contra de ellos, pero hay que hacer las cosas de forma igualitaria. El tema de las listas de espera en los hospitales es una cosa horrorosa. Yo no sé si en Santiago es así pero aquí (Parral) es una cosa tremenda, el que no tiene cuña no tiene  ninguna posibilidad de operarse está  cagado -perdón la palabra-pero esa es la verdad de las cosas.
 
Yo no siento que los tiempos mejores hayan cambiado todo eso. Tiempos Mejores no los veo por ninguna parte. Y eso a mí me preocupa de sobre manera porque si Piñera sigue mal como va hasta ahora, la posibilidad de que le entreguemos nuevamente el gobierno a la izquierda es muy cierto.