El ministro de Salud Enrique Paris rechazó las publicaciones hechas por The Washington Post y The New York Times señalando que “el Washington Post y el New York Times ambos se ponen de acuerdo, parece, para transmitir esta noticia, esta noticia no es verdad, nosotros si no hubiésemos vacunado, ¿qué nos hubiesen dicho?”, planteó Paris y agregó, “si no hubiésemos tenido una vacuna nos hubiesen criticado 100 veces más”.
Por su parte, el ministro vocero Jaime Bellolio declaró “nosotros jamás hemos sido exitistas en términos de la vacuna. De ahí que hemos seguido un calendario que comenzó con las personas más críticas, los adultos mayores, y así sucesivamente y vamos bien en eso y, nunca jamás, hemos dicho que hay que relajar las medidas, sino por el contrario”, indicó en entrevista con Radio Concierto.
Este jueves, el prestigioso New York Times, (NYT) señaló en forma inusual que “respaldamos nuestra cobertura sobre el despliegue de la vacunación en Chile y el estado de la pandemia en el país. NYT trabaja para reportar la verdad e interrogar al poder y lo seguiremos haciendo”, con esas palabras el famoso medio cerró el tema tras las cuestionamientos sobre la gestión de la pandemia reflejados en textos sobre el tema.
El New York Times publicó en reportaje titulado “A pesar de la rápida campaña de vacunación contra la COVID-19 en Chile, los casos aumentan”, donde señala que “al flexibilizarse las restricciones de viaje, escuelas y actividades económicas, se creó la falsa sensación de que lo peor de la pandemia había pasado”.
El texto fue compartido por Eric Feigl-Ding, epidemiólogo y economista de Salud en la Universidad de Harvard en Twitter.
Por su parte, el Washington Post publicó un columna donde explicaba que pese al avance del proceso de inoculación los casos aumentan debido a la falta de medidas sanitarias estrictas. “Chile se posicionó en pocas semanas como el líder latinoamericano y uno de los tres primeros países a nivel mundial. Pero al mismo tiempo que el gobierno celebraba su éxito, expertos en salubridad advertían que la inoculación no podía presentarse como un hecho aislado, pues el proceso debía ir acompañado de cuarentenas”, señala el texto.