Por Teresa Frías

Con 80 años cumplidos, Miguel Littin, reconocido y laureado director de cine, con una larga lista de reconocidas películas y documentales y varios premios incluida dos nominaciones a los Premios Oscar,  se define como una persona de izquierda y hoy es uno de los postulantes al Consejo Constitucional  de la mano del Partido Socialista donde ha militado por casi 40 años.

El realizador de la película “El chacal de Nahueltoro”, conversó con el diario Cambio21 y nos cuenta sobre la decisión que lo llevó a ser candidato a escribir esta Nueva Constitución. “Lo que nuestro país necesita en una Constitución que permita el acuerdo y establecer una plataforma de justicia social de búsqueda del diálogo”, plantea  Littin.

En 1976 ganó el Premio Ariel a la mejor dirección por su película Actas de Marusia (1975) y fue nominado dos veces en el Festival Internacional de Cine de Cannes al galardón de la mejor película por esta cinta y El recurso del método (1978), y a los Óscar correspondientes a 1975 y 1982 como mejor película extranjera, por la primera y Alsino y el cóndor, producciones de México y Nicaragua, respectivamente.​

En 1985 Littín regresó clandestinamente a Chile para filmar una crónica sobre la dictadura que se llamó Acta general de Chile y fue estrenada al año siguiente. Este documental inspiró a Gabriel García Márquez a escribir Las aventuras de Miguel Littín clandestino en Chile, libro que se transformó rápidamente en un superventas.

Posteriormente, retornó a la temática latinoamericana con Sandino de 1991 y tres años más tarde dirigió Los náufragos.

La política no ha estado ajena a Miguel Littin. En 1971, cuando Salvador Allende asumió el poder, lo designó presidente del directorio de la empresa estatal Chilefilms.

Y luego del regreso a la democracia, Littín fue alcalde de Palmilla, su ciudad natal, durante el periodo 1992-1994 y reelecto para el periodo 1996-2000.

El cineasta habló sobre la que podría ser una última oportunidad de tener una Nueva Constitución: “sería una lástima que el país perdiera la oportunidad de llegar a un acuerdo. Que los constitucionales que sean aprobados por la ciudadanía escuchen a la gente, hablen con ellos y lleven a la práctica lo que la gente quiere podemos llegar a tener una Constitución que nos represente”.

¿Qué lo llevó a tomar la decisión de ser candidato al Consejo Constitucional?

La razón principal es porque quiero participar de uno de los momentos más importantes de nuestra historia. Puedo contribuir a redactar una Constitución que represente a todos y a todas, sin fronteras ideológicas ni políticas. Lo que nuestro país necesita en una Constitución que permita el acuerdo y establecer una plataforma de justicia social de búsqueda del diálogo.

¿Cómo toma las encuestas las que dicen que la gente no está entusiasmada con este nuevo proceso Constituyente?

Hay que esperar las elecciones para saber si están de acuerdo o no, porque quién puede decir en este momento si la gente está de acuerdo o no. Entonces la Nueva Constitución es de la gente y ellos decidirán si quieren aprobarla o rechazarla, son las reglas del juego democrático.

En mi caso, no tengo otro interés a estas alturas de mi vida de ser un intérprete válido para las necesidades de la gente. Esta es una nueva oportunidad que tiene el país y tenemos el deber de escucharla, en el sentido de hacer una carta magna que permita al país avanzar los próximos 30 años a un estado social diferente con justicia y mira social.

Es un desafío y quiero hacer un acto de fe al país. Pienso que con la experiencia que tengo, puedo contribuir a que se produzca el diálogo.

¿Usted cree que esta es la última oportunidad de tener una Nueva Constitución?

En este siglo sí. Y sería una lástima que el país perdiera la oportunidad de llegar a un acuerdo. Que los constitucionales que sean aprobados por la ciudadanía escuchen a la gente, hablen con ellos y lleven a la práctica lo que la gente quiere que podemos llegar a tener una Constitución que nos represente.

Tenemos que hacer una constitución de futuro con toda la gente, ya basta de ideologizar los temas.  

¿Cuál será su rol dentro del Consejo Constitucional?

Espero ser elegido para defender los derechos de la tierra. Quiero ser candidato porque quiero plantear la necesidad urgente a la crisis alimentaria en que está en el país. Una gran parte de la tierra debe ser destinada para alimentos de los ciudadanos más que para exportación.

El cine chileno y el éxito internacional

¿Qué le parece que el cine chileno siga sacando aplausos en festivales internacionales?

Los felicito a todas las mujeres, jóvenes y hombres cineastas que han hecho cine internacional con mucha fuerza sobre todo porque toman temas que son contemporáneos. Falta cumplir con la tarea de llegar público chileno y eso es una de las tareas que habíamos empezado a trabajar y que yo nunca dejaré de hacerlo. 

¿A qué se le puede atribuir el hecho que el público chileno no apoye al cine nacional?

El objetivo del cine es llegar al público, por lo tanto no hay que poner énfasis en los premios. Cuando el público rechaza y no ve una película chilena hay que preguntarse por qué. El cine como todo acto es un acto de amor. Felicito a todos, y me he ganado todos los premios internacionales posibles, pero eso es suficiente.