Por Alfredo Peña
Jaime Ravinet es conocido en el mundo político como "el colorín Ravinet". Desde muy joven que participa en política y en lo que fue su partido, la DC. Fue presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile cuando estudiaba Derecho en esa casa de estudios.
Trabajó en la campaña del No a Pinochet y en la campaña de Patricio Aylwin.
El mismo Presidente Aylwin lo designó luego de la vuelta de la democracia, alcalde de Santiago. Luego, cuando hubo elecciones de alcaldes, Jaime Ravinet fue candidato y ganó lejos dos veces.
Fue ministro de Ricardo Lagos y de Sebastián Piñera.
Hoy es candidato a Consejero Constitucional por el partido de centro derecha, Evópoli.
Y tiene una muy mala evaluación del Gobierno de Boric y recuerda que el mandatario y todo su gobierno se "la jugó" por lo que él lo grafica como un "mamarracho jurídico" que fue la Constitución que fue plebiscitada y derrotada ampliamente el 4 de septiembre del año pasado. "Creo que Boric cometió un gran error al abanderarse con esa Convención que presentó un proyecto de Constitución que era una aberración jurídica, era más un programa de gobierno que una Constitución y sufrió las consecuencias de una derrota estrepitosa".
-¿Por qué decidió ser candidato a consejero constitucional?
Como un deber moral y cívico. Participé activamente en la campaña del rechazo a ese mamarracho jurídico que preparó la Convención Constitucional el año pasado. Y cuando se me ofreció por parte de Evópoli ir como independiente, me pareció después de consultar con varios amigos, que era un deber moral aceptar redactar una nueva Constitución que nos una y sea transversal, que modernice Chile y proteja a la gente, que sea fruto de un gran consenso.
-¿Por qué decidió ir en la lista de Evópoli?
Porque Amarillos y Demócratas, que son partidos con los cuales me siento muy cercano, en mi calidad de independiente, no están constituidos, no llevan candidatos, y Evópoli es un partido de centro derecha que abre esa posibilidad y me pareció importante aportar mi experiencia y trayectoria en este nuevo proceso constitiucional.
-De ganar la elección, ¿cuál será su rol dentro del consejo constitucional?
Defender con fuerza los derechos fundamentales de libertad en materia educacional, salud, previsión, vivienda, a la vez modernizar el aparato constitucional de Chile, generar una mayor descentralización hacia las regiones y los municipios, y muy especialmente, incorporar con algunos artículos que fortalezcan la acción del Estado en materia de delincuencia e inmigración.
-¿Esta es la última oportunidad para tener una nueva Constitución?
No estoy seguro, después del circo que fue la Convención, esta es una oportunidad que ha sido fruto de un gran acuerdo político muy amplio y que está bastante acotado en términos de definir 12 bases constitucionales. Hay un consejo de expertos nombrados por unanimidad en la Cámara de Diputados y el Senado, una suerte de Comisión Arbitral en caso de diferencias sobre procedimientos, también nombrado por unanimidad en el Parlamento. Y yo siento también que los 50 consejeros constitucionales van a tener una tarea acotada entre junio y noviembre para discutir el proyecto de Constitución que presentarán los expertos a fines de mayo.
-El Gobierno dice que no se hará parte esta vez de la constituyente, ¿cómo toma esa decisión?
La tomo muy bien. Creo que Boric cometió un gran error al abanderarse con esa Convención que presentó un proyecto de Constitución que era una aberración jurídica, era más un programa de gobierno que una Constitución y sufrió las consecuencias de una derrota estrepitosa el 4 de septiembre pasado. Hace bien en no involucrarse como Gobierno en este tema. Sin embargo, me parece muy grave que el Gobierno no esté haciendo publicidad ni difusión del proceso electoral que vamos a tener el 7 de mayo, quizás con la intención de que vote menos gente y así el Frente Amplio y los comunistas tengan una mejor representación.
-La izquierda y la centro izquierda van divididas, en listas separadas ¿qué piensa de esta decisión política?
Mi rol no es ser comentarista político. Creo que obedece a una realidad que tienen planteamientos distintos, me cuesta entender por qué el PDD, los radicales y la DC se sienten todavía como parte del Gobierno, en circunstancias que van en listas separadas pero no me corresponde opinar al respecto.
-Hay candidatos de mucha experiencia, usted, Andrés Zaldívar, Carmen Frei, Sergio Bitar, Ricardo Nuñez, por nombrar a algunos
Me alegro que después de la inmadurez y la irresponsabilidad de la gran mayoría de los convencionales del fracasado proyecto, haya postulantes con mayor experiencia política como los nombrados, a los cuales yo agregaría a Mario Ríos por Chillán, a Jorge Ulloa por Concepción. Es gente de distintos colores políticos que tiene experiencia y capacidad de llegar a acuerdos en forma transversal. Todos ellos fueron actores en los años 90 y los primeros años del siglo XXI, que es el periodo en que Chile más ha progresado con mayor estabilidad, con mayor superación de la pobreza y con mayor récord en materia económica. Entonces creo que aportar esta experiencia, y más canas, es una buena señal. Ojalá todos ellos sean electos y podamos trabajar una Constitución que nos una y que vuelva a que Chile viva en paz.
-Usted fue alcalde y ministro, ¿cómo analiza la gestión del gobierno y del presidente Boric?
Si ejerciera como profesor le pondría un 2 o un 3. Creo que ha sido una muy mala gestión. Creo que el equipo de gobierno hoy tiene tres defectos: soberbios, inexpertos e ineficientes, Sin embargo, veo con expectativas nombramientos de Van Klaveren en la Cancillería, Jaime de Aguirre en Cultura, Jessica López en Obras Públicas, gente con experiencia, con trayectoria y con capacidad de generar acuerdos. Y ojalá que estas declaraciones del Presidente para respaldar a Carabineros, que han sido duramente contradichas en las votaciones por parte del Frente Amplio y los comunistas en la Cámara, sean no solo palabras, sino acciones, de manera que verdaderamente haya un giro en la gestión de Gobierno en los próximos tres años, para que Chile recobre su crecimiento económico con mayor equidad y disminuya la inflación, y la incertidumbre que hoy tiene paralizados muchos proyectos de inversión.
-Después de esta elección, ¿seguirá en política?
Siempre he estado preocupado de lo público, de lo que pasa en el acontecer del país, no siempre en primera línea durante los últimos 12 años. Creo que el rol de consejero constitucional es bastante acotado entre junio y noviembre de este año. Dios dirá. El ser candidato y electo inhibe cualquier posibilidad de ser candidato a alcalde, concejal, diputado, senador o Presidente de la República, por tanto, probablemente seguiré colaborando como un ciudadano interesado y preocupado en el devenir de Chile.