Por Teresa Frías K. 

El ex convencional Bernardo de la Maza (del colectivo Independientes, RN-Evópoli)  aseguró que no le gusta la propuesta final de nueva Constitución elaborada por el órgano.

Analizó que el trabajo durante estos 12 meses fue "extraordinariamente complicado", en un proceso "que tuvo por primera vez reunida a gente de todas las corrientes, pensamientos y edades. Por lo tanto, fue muy difícil lograr acuerdos".

 Sobre el texto definitivo, aseguró en conversación con Cambio21 que "no logré lo que yo quería, una nueva Constitución razonable y amistosa. Se lograron muchos avances en descentralización, paridad, respeto por la naturaleza, garantía de ciertos derechos fundamentales, pero en un ambiente de gran ideologismo”.

Finalizado el trabajo en la Convención ¿Cuál es su análisis sobre lo hecho durante un años?

Fue un año intenso y apasionante que terminó, tal como comenzó: con profundas y lamentables diferencias entre los constituyentes, y con una propuesta de nueva Constitución absurdamente extensa, con 388 artículos, 53 artículos  y 53.887 palabras, con promesas navideñas que ningún gobierno podrá cumplir, excesivamente estatista, indigenista y desconsiderada con el pensamiento de un sector importante de la ciudadanía, que quiere cambios, pero no una refundación. Así como quedó, es posible que no vaya a ser probada por una inmensa mayoría del país.

 Independiente de su opción frente al plebiscito ¿Cómo toma las fake news que rodean a la nueva Constitución?

Las fake news son una realidad de nuestro tiempo y es imposible evitarlas. Con el libre acceso a las redes sociales, cualquiera puede informar o desinformar sobre cualquier cosa. Ocurrió con la Convención como también sucedió que hubo hechos reales que fueron calificados como falsos sin que lo fueran. Los ciudadanos tenemos que elegir bien nuestras fuentes de información para evitar ser víctimas de las noticias falsas.

De ganar el Rechazo ¿usted cree que realmente se trabajará en modificar la actual constitución?

Sí lo creo, absolutamente. Me parece impensable que no se vaya a ir adelante con cambios que el país necesita y exige desde hace mucho tiempo. Hablo de reformas razonables en áreas como salud, vivienda, pensiones, educación, inmigración, seguridad, pueblos indígenas y medio ambiente.

¿Cuál es su opción frente al plebiscito, Apruebo o rechazo?

De forma categórica, Rechazo. Siempre estuve por una nueva Constitución, pero una buena, no esta que contiene errores demasiado graves para el país.

¿La nueva Constitución entrega políticas públicas en favor de la ciudadanía?

La propuesta de nueva Constitución contiene muchos aspectos positivos como un pleno reconocimientos de los pueblos indígenas, de sus lenguas, cosmovisiones y costumbres; un gran respeto por la naturaleza; un cuidado del medio ambiente, respeto por la igualdad de género y las diversidades sexuales y, con mucha fuerza, medidas en favor de una real descentralización.  Además, una norma planteada por mí, con el apoyo de convencionales de casi todas las tendencias, que obliga al Estado a perseguir judicialmente y penalmente a los corruptos, tanto públicos como privados.

 ¿Qué le modificaría a la nueva propuesta constitucional?

Entre otras cosas, dejaría con más poderes al Presidente de la República, aunque menos de los que tiene hoy, no eliminaría del Senado, tampoco el Poder Judicial y restablecería el estado de emergencia. Asimismo, daría certezas sobre la libertad de los ciudadanos para elegir entre salud pública o privada, garantizaría el derecho de los padres a decidir donde educar a sus hijos y a la propiedad privada y a dejar en herencia nuestros fondos previsionales. Otra cosa: eliminaría la expresión de que somos un Estado Plurinacional, porque no somos Bolivia ni Ecuador. Basta con establecer que Chile reconoce la coexistencia de diversos pueblos y naciones en el marco de la unidad del Estado.