Por Teresa Frías
Este 11 de septiembre se cumplen 50 años del golpe de Estado que derrocó al presidente Salvador Allende. Dos informes presidenciales revelados por el departamento de Estado de Estados Unidos el pasado 25 de agosto dan más luces sobre el papel de ese país gobernado por Richard Nixon en los días previos a la asonada civíca-militar que fue encabezada por el dictador Augusto Pinochet.
El expresidente de la Democracia Cristiana, Ricardo Hormazábal, quien además era parlamentario en 1973 en conversación con Cambio21 reveló que el general Carlos Prats que había sido jefe del Ejército hasta 20 días antes de la asonada militar le aseguró a Allende el día sábado 8 de septiembre, que hay una intención de Golpe en los próximos días a lo que Allende le responde que él sabe y que llamará a un plebiscito. A lo que Prats le dice: “Pero Presidente usted está nadando en un mar de ilusiones, el golpe militar viene en los próximos días, no hay tiempo para esperar 30 o 60 días”. Allende le pregunta entonces cuál era solución: Pida permiso constitucional en el Congreso, le aconsejó Prats, durante un año para que así pueda volver cuando el país se encuentre en un proceso más tranquilo de conciliación”.
Además Hormazábal se pregunta: “¿Es cierto que intervinieron los norteamericanos?, es cierto. ¿Hay alguna duda que la derecha y grandes empresas estuvieron en el Golpe?, no hay ninguna. Pero es absolutamente falso que la DC y Eduardo Frei Montalva u otros dirigentes de este nivel hayan participado en la elaboración del Golpe. Eso es absolutamente falso porque yo era presidente de los jóvenes DC”.
¿Cómo estaban los ánimos antes del Golpe de Estado?
Lo que mucha gente en Chile no sabe, es que se generan imágenes falsas sobre lo que ocurrió y lo que tenemos es mirarlo no para tomar venganza o sacarse unos problemas de encima, sino para que aprendamos lo que ocurrió.
Lo primero, es cuando asumieron Nixon y Kissinger, iniciaron una campaña para botar al gobierno de Eduardo Frei Montalva, eso ocurrió en 1969. Lo dirigió un general de Ejército (Roberto Viaux) con el apoyo de la extrema derecha chilena y hay pruebas de todo tipo que muestran que la intervención norteamericana fue evidente para desestabilizar el Presidente de Chile que era Eduardo Frei Montalva. Eso fue denominado como el "Tacnazo" porque el regimiento que se sublevó fue el Tacna de Santiago.
A partir de eso, los Demócratas Cristianos planteamos la necesidad que el próximo gobierno tuviera y representara la máxima unidad política y social del pueblo. Porque los sectores de derecha estaban en el Golpismo. Los sectores de derecha no querían cambios, menos estaban disponibles para aceptar a un conjunto de políticas que quería alcanzar la dictadura del proletariado.
La discusión de los hechos: ¿es cierto que intervinieron los norteamericanos?, es cierto. ¿Hay alguna duda que la derecha y grandes empresas estuvieron en el Golpe?, no hay ninguna duda. Pero es absolutamente falso que la DC y Eduardo Frei Montalva u otros dirigentes de este nivel hayan participaron en la elaboración del Golpe. La experiencia que he tenido, tanto en la relación que tuve como actor en ese momento o lo que he podido estudiar después es que aquí la primera gran responsabilidad parte por la política norteamericana en contra de los cambios y con las sugerencias de la derecha chilena de no respetar los gobiernos elegidos democráticamente. Lo que tenemos que recordar como hechos es lo que pasó.
¿Qué hizo el día del Golpe?
El Golpe me pilló fuera de Chile. En ese tiempo era presidente de la Juventud DC y viajé a Costa Rica, precisamente a exponer mi última reunión con Patricio Aylwin, que era presidente de la DC, de la manera de llegar a un acuerdo para intentar dar una salida democrática. Este esfuerzo que estábamos haciendo era inútil, porque Carlos Altamirano dirigiendo el PS, Oscar Guillermo Garretón a cargo del Movimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU), y otros grupos como el MIR estaban lanzados en la confrontación de tipo armado.
Cuando uno lee las memorias del General Prats, hablando con Allende el día sábado 8 de septiembre, avisándole que hay una intención de Golpe en los próximos días a lo que Allende le responde que él sabe y que llamará a un plebiscito. A lo que Prats le dice: “Pero Presidente usted está nadando en un mar de ilusiones, el pronunciamiento militar viene en los próximos días, no hay tiempo para esperar 30 o 60 días”. Allende le pregunta entonces cuál era solución: pida permiso constitucional en el Congreso, le aconsejó Prats, durante un año para que así pueda volver cuando el país se encuentre en un proceso más tranquilo de conciliación.
La DC llamaba a la renuncia a todos los parlamentarios, para que fuera el pueblo quién resolviera el problema. La DC como tal no estuvo nunca con el Golpe. Que algunas personas individualmente estuvireon en ese tema, terminaron siendo expulsados del partido poco después.
¿Se pudo haber evitado el Golpe?
La verdad, es que no se, nosotros los DC creíamos que sí. Siempre que Allende estuviera dispuesto a romper con sus alas más extremistas y esa situación estaba en evidencia. Allende no tuvo la capacidad para tomar esa opción. Pinochet que era el hombre de confianza de Allende en el Ejército, ese personaje estaba de confianza ahí, Allende lo había designado 20 días como jefe del Ejército. Pinochet supo dos días antes que llamarían a plebiscito, entonces aceleraron el Golpe.
Hoy se conoce que Augusto Pinochet tampoco quería entregar el poder luego de perder en el plebiscito de 1988 ¿Cómo vivió ese proceso?
El dictador se tentó con el poder y quiso mantenerse incluso luego de perder el plebiscito. Con los escándalos y fraudes que hizo, en la consulta de los 80, él no quería moverse. El general Matthei y el general Stange reconocieron el resultado del Plebiscito y Pinochet ya estaba buscando una manera violenta y forzosa para mantenerse en el poder. Después de un año, Pinochet termina apoyando una candidatura como la de su ministro de Hacienda Hernán Büchi y con un generalísimo de esa candidatura como Sebastián Piñera. La transición de los primeros Gobiernos demócraticos fue muy difícil, porque teníamos grupos armados muy serios en la DINA-CNI y en la izquierda.