Por María Cristina Prudant
Helia Molina fue nombrada ministra de Salud en el gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, para su segundo gobierno. Asumió la cartera de Salud el 11 de marzo de 2014. El 30 de diciembre de 2014, en una entrevista dada a un diario, afirmó que “en todas las clínicas cuicas, muchas familias conservadoras han hecho abortar a sus hijas”. ​Esto ocasionó revuelo que llevó al gobierno a emitir un comunicado donde se establecía que las declaraciones de la ministra eran estrictamente personales. ​El mismo día, la doctora presentó su renuncia al cargo, la cual fue aceptada por la mandataria.  Actualmente es  Decana de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago de Chile desde el 2017 a la fecha, además de desempeñarse como académica en dicha casa de estudios. De este modo, se convirtió en la primera mujer en asumir estas funciones desde que se fundara la Facultad hace 25 años, luego que sus pares la eligieran con un 60,97% de votación.

¿Cuál es su opinión respecto al panorama político que hay en el país, con clima de tensión entre el gobierno y la oposición?
Es un panorama bien complicado porque, obviamente que ha sido complejo para la oposición el poder tener un sentido de unidad. Ha habido muchos temas que dividen con la Democracia Cristiana, pero creo que es un proceso. Creo que los países viven procesos que tienen que ver con los cambios estructurales, con los cambios de gobierno, con los cambios de mirada de un país distinto. Probablemente, los paradigmas se enteraron durante muchos años tanto el lado de la derecha, el neoliberalismo extremo, hasta las propuestas radicales de izquierda.

Creo que hoy día están, relativamente obsoletas y hay miles de evidencias que han demostrado como el neoliberalismo extremo no ha llevado a nuevas mejoras reales de los países y por otro lado, también está la evidencia que los países que han implantado un socialismo dogmático  tampoco han tenido buenos resultados. Entonces, creo que el mundo está viviendo una crisis, no es solo en Chile. Están dándose espacios a populismos que son bastante negativos y que han sido parte de la historia del mundo también.

Entonces, como soy optimista por naturaleza, creo en los diálogos que se están dando, los encuentros y tampoco uno puede esperar que los conglomerados políticos sean absolutamente homogéneos y todos digan lo mismo y piensen lo mismo. Creo que las uniones políticas tienen que ser en pos de un programa, de un objetivo común y no solamente que cada uno mire propio paragua conceptual. Chile requiere una mirada moderna, innovadora donde podamos ajustar los mecanismos del mercado, los que son globalizados en el mundo a nuestra realidad que es un país inequitativo, absolutamente desigual que si bien durante los gobiernos de la Concertación se logró históricamente la baja más grande de la pobreza que ha habido nunca en Chile.

Sin embargo, no logramos de verdad tampoco reducir la brecha de la inequidad, entonces creo que hay desafíos muy grandes, creo que hay gente muy buena y bien intencionada, la política es compleja, pero por lo menos en el ambiente en que yo me muevo, en mi partido, el Partido Por la Democracia, estamos en una profunda reflexión, trabajando, con propuestas y no estamos cerrados a ninguna alianza política porque creemos que lo que importa es Chile y no el ego de unos partidos.

Hubo varias reacciones, incluso del PPD, por la posición de algunos diputados mayoritarios de la Democracia Cristiana que votó a favor de la reforma tributaria. ¿Qué opina al respecto?

Helia Molina, ex ministra de Salud

Correcto. Por eso digo, como hoy día no hay un programa, no hay una estrategia común de todo el conglomerado que constituyó la Nueva Mayoría, obviamente que cada partido toma sus propias decisiones. Está bien, yo entiendo las críticas, no soy economista, pero lo que  me han explicado mis economistas más cercanos, que no son para nada economistas marxistas ni mucho menos. No es una buena reforma porque mantiene y refuerza la inequidad y hasta ahora no hemos visto que por pagar menos impuestos las empresas suban los sueldos y la gente esté mejor. Eso no ha pasado nunca.

La verdad que entiendo la posición y si hubiera sido diputada habría votado en contra de eso porque no me parece, creo que no hay ninguna evidencia que diga que eso de verdad va a mejorar a las pymes y de hecho el mismo Fantuzzi, que es un empresario no es  ningún político de izquierda dijo que de verdad iba a ser un porcentaje menor al 20% de las pymes, las que podrían en algún momento ser favorecidas. Pero creo que cada partido está en su derecho, ellos han hecho algunas  negociaciones y uno no sabe lo que hay detrás de las decisiones, o bien simplemente creen que es una buena reforma.

Yo no estoy de acuerdo con eso porque creo que es una reforma, por lo que me han explicado gente que sabe y a la que le creo, incluso han venido extranjeros como el economista coreano (Ha-Joon Chang)  que estuvo acá en el CEP, y cuando uno lo escucha a él se da cuenta que aquí nosotros estamos haciendo justo lo que no hay que hacer.           

Otro tema ¿Qué le parece que el gobierno vincule al Partido Socialista con el narcotráfico?
Me parece de la peor estofa que un gobierno se meta en la vida interna de los partidos, que puede ser mala yo no digo que sea buena, no estoy defendiendo a nadie, creo que en todos los partidos hay de todo y hay personas que pueden ser de todo tipo, pero a mí no me parece que el gobierno tenga que meterse en la dinámica interna de los partidos y a ofenderlos porque en realidad, yo no soy del Partido Socialista, pero es un partido clásico de nuestro país, que tiene alta representatividad en el Congreso, entones me parece del todo desubicado.

Vocera desubicada y corrupción de la UDI
¿Qué cree que busca el gobierno  con este tipo de actitudes?
Bueno, no le queda otra porque no hay como hacer otra cosa. Creo que la vocera ha sido bien negativa para este gobierno porque es desubicada. Creo que las vocerías de gobierno tienen que hablar de las cosas del gobierno y de los problemas del país, pero no meterse en la política contingente de los partidos políticos, no corresponde  porque los gobiernos son para todos. Por qué no han dicho nada de la corrupción en la UDI, con muchos de sus militantes. Y de otros partidos también que son gente corrupta que están condenadas y sin embargo no dicen nada. Está bien porque no les corresponde decir nada.

¿Qué le ha parecido la gestión de Piñera hasta ahora?
Yo no estoy en la política contingente, soy decana de una Facultad, hago política a nivel de formar personas, de transformar el país, de generar el capital humano para que este país mejore. Pero, como cualquier ciudadano, desde mi particular punto de vista puedo decir que ha sido una gestión muy mala, que ha hecho muchos anuncios de buenas cosas, pero que a la hora de mirar qué está pasando y cuál es el desarrollo de eso, la inversión que se ha hecho, la evaluación y el impacto de las políticas, creo que no hay nada.

¿Piñera no ha cumplido con las expectativas que creó durante la campaña?
Para nada. Nos decían los que hoy gobiernan, que en la administración de Michelle Bachelet si no creció más el país, era por culpa  del gobierno. Ahora ellos dicen que no crece el país es por la guerra comercial de Estados Unidos y China. Entonces, es un doble estándar que, a mí en lo personal, me molesta. Aunque me perjudique con un análisis desde mi personal postura, yo no podría tener ese doble estándar, no podría estar siempre echándole la culpa al empedrado como señala el Gobierno y nunca a su propia gestión y trabajo.

¿Está de acuerdo con el proyecto de las 40 horas como jornada de trabajo?
Como concepto. Creo que Chile es un país que tiene indicadores de salud complicados. Creo que las estadísticas chilenas muestran un país que tiene altos niveles de problemas de salud mental graves, más que ningún otro país de la OCDE.

¿Cómo analiza usted la gestión que se está haciendo en el Ministerio de Salud?
Desde fuera una no puede hacer tanto juicio y yo no soy de desprestigiar a la gente. Pienso que el cambio de  ministro demuestra de alguna manera que, probablemente la gestión no estaba tan buena porque  no veo por qué iban a cambiar a ministro Santelices. Me parece que como todo este gobierno hay mucho anuncio, poca sustancia. Sin duda, no es fácil hacer buena gestión porque es súper complicado para que voy a mentir lo digo por experiencia propia. Pero, no cabe duda que muchas cosas que son de difícil solución aparezcan con tan mágica solución. O sea, en una semana se solucionaron 3.000 mil licencias médicas, por qué no se habían solucionado antes si se podía hacer en una semana, es raro, es complejo.

Yo valoro las iniciativas como hospital digital, pero sin duda no he visto ninguna política para fortalecer la atención primaria, por ejemplo, que es donde hay que ponerle mucho esfuerzo y en el mismo tema de VIH hubo muchos errores, pero no puedo hacer un juicio de valor más profundo sin tener documentación, estadísticas, sin tener toda la información.