En su declaración ante Fiscalía, el ex ministro de la Vivienda de Piñera, Felipe Ward (UDI) explicó el rol que el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, habría cumplido en las presuntas gestiones en el Ministerio de Vivienda para acelerar permisos de construcción para el proyecto Parque Capital, propiedad de los hermanos Jalaff, también imputados en la causa. Desde la UDI, este martes, hubo defensas, pero también solicitudes para que el ex secretario de Estado entregue explicaciones.
Ward hasta hace 15 días era vice rector de la Universidad San Sebastián y directivo de la municipalidad de La Florida, contratado por Rodolfo Carter. De ambas entidades tuvo que renunciar hace dos semanas.
La investigación se originó en un reportaje de Ciper que reveló que el influyente abogado Luis Hermosilla -hoy en prisión preventiva- realizó gestiones con el Minvu, entonces liderado por Ward, para acelerar la aprobación de la construcción de un condominio en la comuna de Lampa, iniciativa del holding de la familia Jalaff.
Los permisos para el proyecto -llamado Parque Capital- fueron otorgados en apenas dos meses y medio, pese a que suelen demorar cerca de dos años. El holding era dirigido en la época por Álvaro Jalaff, íntimo amigo de Hermosilla y de Chadwick.
Ward detalló, en una comparecencia ante la Fiscalía Metropolitana Oriente que, tras asumir en el Minvu en junio del 2020, fue convocado para hablar de política por Chadwick, que había salido del Gobierno y luego sido inhabilitado para ejercer cargos públicos -vía acusación constitucional- a fines de 2019, en medio del estallido social.
De acuerdo con Ciper, Ward declaró que almorzaron juntos y, después, Chadwick lo llevó al despacho de Hermosilla para saludarlo, instancia en que los tres hablaron sobre Parque Capital.
La reunión, precisó el extitular del Minvu, tuvo lugar en la oficina que Chadwick y Hermosilla compartían en un edificio del Grupo Patio, en la calle Alonso de Cordova de Vitacura y días después él le envió un mensaje a Hermosilla sugiriendo que solicitaran una reunión por Ley de Lobby con su jefe de gabinete.
Tras conocer la nueva información del caso, el diputado socialista Daniel Manouchehri, querellante en el caso audio, comentó: "Parece que el señor Chadwick no era el amigo defraudado de Hermosilla, como dijo Evelyn Matthei".
"Evidentemente, el señor Chadwick era el brazo político del señor Hermosilla y, por lo que hemos sabido, un importante gestor en los negocios del señor Hermosilla", acusó.
En este contexto, recriminó que los partidos de la derecha sigan apoyando la figura del exministro del Interior: "Chile Vamos y la UDI han puesto las manos al fuego por el señor Chadwick, (pero) ya se están quemando las manos y, si siguen con ese ánimo, van a terminar quemados enteros por el señor Chadwick", advirtió Manouchehri.
La directiva de la UDI, y la tienda en general, han desestimado suspender la militancia de Chadwick, pese a que voces como el diputado Cristhian Moreira han deslizado que sería conveniente seguir ese camino mientras el exministro permanece investigado.
Sobre los antecedentes del caso, el jefe de la bancada gremialista, Gustavo Benavente, sostuvo que "el tráfico de influencias se configura cuando se trata de influir en una decisión en una determinada dirección, y aquí lo único que se trató de decir es que se atendiera una solicitud (en torno a los requerimientos del proyecto Parque Capital) y nada más".
"Aquí no se influyó para que se resolviera (la solicitud) en uno u otro sentido, sino que para atender una solicitud, nada más. (Por ello), yo apelo un poco al tema más humano, y sobre todo quienes estuvieron en esa reunión tendrán que explicarlo", puntualizó el diputado Benavente.
Consultado sobre una eventual suspensión de la militancia de Chadwick, pidió esperar a ver "cómo se desenvuelve el proceso" y anticipó que, "si esto va desembocando en una formalización, ahí sí sería, quizás partidario, de ir mirando esa" opción de suspenderlo.
En lo inmediato, la fiscal metropolitana Oriente, Lorena Parra, adelantó la semana pasada que Chadwick será próximamente citado a declarar en calidad de imputado.
Ward renunció el pasado 13 de septiembre al cargo que desempeñaba en los últimos años en la Universidad San Sebastián, plantel hoy implicado en el "caso Cubillos".
La semana pasada, en tanto, Chadwick hizo lo propio al dimitir de la presidencia de la Junta Directiva de la USS, según dijo, para concentrarse en su ofensiva legal contra diputados oficialistas por el delito de difamación, tras ser nombrado en las acusaciones constitucionales presentadas contra los ministros de la Corte Suprema Ángela Vivanco y Jean Pierre Matus, protagonistas de la arista judicial del caso Hermosilla.
Anteriormente, a fines de agosto había dimitido a la USS el exfiscal Manuel Guerra, que impartía clases en la Facultad de Derecho. Días después, renunció al Tribunal Supremo del partido Amarillos por Chile.
El otrora persecutor es investigado por presuntamente entregar información a Hermosilla sobre diligencias de alta connotación pública, como los casos Penta, Exalmar y Dominga.
Este martes Guerra concretó otra salida al renunciar a su cargo de jefe de la Defensoría de la Gente de la Municipalidad de La Florida.
A través de una carta a los vecinos, el exfiscal argumentó que su decisión se funda en el proceso penal que enfrenta y la realiza "para no afectar" la iniciativa municipal, "mas cuando -fustigó- es posible observar maliciosas y tendenciosas opiniones que no solo buscan perjudicar a mi persona sino que al proyecto, las cuales tienen su fuente en mezquinos intereses políticos de los que abundan en una época electoral como la que enfrenta el país".