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Felipe Berríos, sacerdote jesuita y su análisis de Piñera a Cambio21: “Es una persona muy buena para hacer negocios pero no para ser un mandatario”

Por Teresa Frías

El sacerdote Felipe Berríos, director de la Fundación Recrea y que vive en la población La Chimba en Antofagasta, se ha destacado es ser uno de los pocos religiosos en decir las cosas sin pelos en la lengua. Es así como se ha ganado el respeto de varios y muchos como también ha recibido críticas de otros, especialmente de sectores de derecha.

En conversación con Cambio21, Berríos se refirió a los temas que hoy en día mantienen a la ciudadanía con incertidumbre en el plano económico, lanzando sus dardos a Sebastián Piñera. Frente a esto, aseguró que “nosotros necesitábamos en tiempos difíciles, un estadista”.

Sobre la migración, el presidente de los empresarios Juan Sutil culpó a los inmigrantes en Chile de detener el crecimiento y desarrollo, por otra parte la OMS exige detener de inmediato las expulsiones ¿Cómo toma usted este tema?

El mismo Juan Sutil se corrigió después, que no había leído el informe del Banco Central del año pasado, en que dice que los migrantes han ayudado en el crecimiento del país y también hay un estudio que habla sobre el avance que ha tenido Chile diciendo que el problema son los chilenos, refiriéndose en que si se sigue criticando la migración no se podrá avanzar en inversión.

¿Usted cree que hay una crisis migratoria?

No. Creo que los migrantes son una riqueza, pero hay dos problemas. Uno es que esta migración no la hizo el Estado, sino el mercado. Segundo, nosotros siempre tratamos al extranjero bien porque era alto y rubio, pero no estábamos acostumbrados a tener extranjeros latinoamericanos, afroamericanos, lo que despertó en nosotros un clasismo muy importante.  

¿Cuál es su opinión sobre los detenidos de la revuelta social?

Requiere de una solución, así como el gobierno no aplicó la ley contra los camioneros, quienes estuvieron durante la pandemia saltándose varias leyes del abastecimiento y libre acceso, sin embargo el gobierno se dio cuenta que era un tema político y lo resolvió así como tal, eso también espero que lo haga con estos chiquillos, que han llevado el proceso donde estamos ahora. Que en vez que el gobierno quiera aplicar la ley se resuelva todo políticamente y se revise cada caso.

¿Usted cree que existe una justicia para los ricos y otra para los pobres?

En el papel la justicia es igual, pero en la práctica ha sido pura gente pobre la que ha tenido poco acceso a abogados. Hay un delito que cometió una persona de otra clase social y ni siquiera lo muestran en televisión.

¿Cómo analiza a los constituyentes electos, quienes vienen de distintas realidades?

Estoy muy feliz con las cosas que están pasando, es un Chile representativo, donde la diversidad en nuestro país estará representada en la constitución.

Según usted ¿Cuál sería ese cambio fundamental en la constitución?

Una constitución que nazca de la diversidad de  Chile y que marque el dialogo no que sea impuesta como lo ha sido la constitución actual. Aprendimos con sangre en la dictadura que ningún chileno sobra.

Entonces ahora se empieza a producir ese diálogo y se empezará a escribir a nueva constitución.

Una de las discusiones por la constitución es el modelo neoliberal ¿Si se cambia este modelo se acaba con la desigualdad?

Este modelo hizo crecer y avanzar mucho a nuestro país, pero también concentró la riqueza con mucha desigual y mató ideales. Nosotros no solo tenemos que cambiar un modelo que está agotado, sino que también cambiar nuestra mentalidad.

¿Cómo toma usted el abrupto rebrote de la pobreza en nuestro país?

Es una pobreza disimulada. Antes uno reconocía la pobreza porque la persona andaba con hilachas, los zapatos rotos. Esta es una pobreza que está bien vestida, que tiene cable, que tiene plasmas, que tiene celular, pero no tiene oportunidades y eso es algo cruel.

¿Existe esta tan anhelada clase media?

Yo la llamaría más bien clase endeudada. Una clase que para llegar a fin de mes debe endeudarse. Más que clase media a la que estábamos acostumbrados, hoy día es una clase endeudada.

¿Cómo califica las ayudas sociales del gobierno en que mucha gente sigue quedando fuera?

Donde yo vivo, en el campamento, más del 60% de las familias no les llegan beneficios. Sus días son informales y no están en el registro social. Hay que hacer un cambio muy profundo, hasta el momento para los beneficios del estado no debiese postular, porque mientras más marginal que uno viva más difícil es la postulación, entonces es un círculo vicioso.

Debiésemos usar la tecnología que tenemos para que así sea el Estado quien busque al más necesitado, que se le acerque. Porque mientras se postule a los beneficios lo ganarán quienes no lo merecen.

Hay una frase que hoy en día resuena bastante: “Somos muy ricos para el Estado y muy pobres para el banco” ¿Qué tan real es?

Es una frase para la denominada clase media, es el sector de la población que más ha sufrido porque como dice la frase no tiene la suficiente riqueza para subsistir y tienen demasiado para las ayudas del gobierno, entonces quedan en el limbo.

Se sigue hablando con respecto a una renta universal ¿Cuál cree que sería el monto para esta renta?

Creo que esos temas son políticos. Políticamente nosotros no queremos que ningún chileno viva en la miseria y que no pueda transportarse, que no pueda tener una cama decente donde dormir, ahora, como se hace eso, es más bien una cosa más técnica.

Yo no me atrevería a decir un monto, porque además es tan relativo todo, en lo básico, una persona puede subsistir con su trabajo, lo que no puede hacer ahora.

¿Cómo ve usted la situación en que la ciudadanía ha debido subsistir con los retiros de sus fondos de pensiones?

Hay dos cosas, una es porque la gente no les llegó la ayuda y debió sacarla de otro lado, y segundo hay un tema político, en que las AFP representan el modelo neoliberal y la gente se sintió dañada. Hay un fenómeno político.

¿Qué piensa sobre la negativa del Vaticano sobre las uniones de personas del mismo sexo?

En Papa está peleando contra tres mafias, uno de ellos es la plata, otra es los ultra conservadores y la otra de la lucha de poder. Como sacerdote yo no tengo ningún problema en bendecir a una pareja del mismo sexo como lo he hecho.

Entonces cuando un sacerdote no lo hace, pero sí  bendice una sucursal de banco o bendice una micro no hay ningún problema. Espero llegue ese día que no solo el sacerdote bendiga a toda la sociedad.  

 ¿Cuál es su opinión del gobierno de Sebastián Piñera en el ámbito social?

La pregunta sería, para qué lo elegimos. Es una persona que es buena para hacer negocios, para especular en la bolsa, pero no para ser un mandatario. Nosotros necesitábamos en tiempos difíciles, un estadista.