Por Antonia Paz

Ni en la dictadura se cometieron tantos actos de persecución política como lo ocurrido en Maipú en la gestión de Cathy Barriga (pro UDI) y con un "alcalde en las sombras", como Joaquín Lavín León, UDI en ese entonces.

Cuando asume Cathy Barriga, dejaba la gestión el alcalde Cristian Vittori (DC) acusado de irregularidades y que luego fue sobreseído absolutamente por la Corte Suprema.

La mayoría de esos trabajadores de la época de Vittori no tenían ninguna militancia política. Sólo los asesores y jefes directos de la administración de Cristián Vitori eran militantes DC, del PS o del PPD. Todos renunciaron cuando llegó Catthy Barriga...y Lavín León.

Pero el encono y el odio político de Joaquín Lavín, diputado de ese mismo distrito que incluye Maipú fue más allá. 

Con un poder absoluto sobre la alcaldesa Barriga, decidió que había que "limpiar" el municipio de todo funcionario o funcionaria que pensara distinto a sus ideas. O que "oliera" a la Concertación de la época o que tuviera cercanía con Vittori.

Luego de varios años se conocieron correos electrónicos donde el parlamentario ordena el despido de cientos de trabajadores del municipio, el cual, se supone, era administrado por su esposa Cathy Barriga, hoy formalizada por defraudar al fisco en alrededor de $33.000 millones y en prisión preventiva.

Un informe policial determinó que 496 trabajadores fueron despedidos por instrucciones del propio parlamentario, cuya solicitud de desafuero se pedirá por parte de la Fiscalía Oriente.

O sea, cerca de 500 hogares quedaron sin el sustento por el sólo hecho de pensar distinto de las ideas que pregona Joaquín Lavín. Hay personas humildes que fueron despedidas por decisión de Lavín: Dos mayordomos, tres choferes, personas del aseo, guardias, etc.

Uno de los correos: "perjudican" la gestión de Barriga

De acuerdo a un correo electrónico enviado por el parlamentario el 13 de diciembre de 2016 a Barriga y Carlos Fairlie, éste ordena hacer las gestiones para despedir a 235 funcionarios municipales a honorarios, que según el asunto del mail, podían “perjudicar la gestión” de la exbailarina de Mekano.

“Estos funcionarios tienen la misión de hacer fracasar la gestión de la nueva administración, deben ser desvinculados, hoy siguen operando para Vittori". Ese es el mensaje directo de Lavín y da los nombres de esos 235 trabajadores para ser despedidos ipso facto.

Y otro mail de Lavín es tajante: "La mayoría de ellos entraron 2016-2015-2014 para que puedan analizar el costo que esto significa para la municipalidad, pero deben salir de todas maneras. Lo que no quiere decir que sean los únicos, ya que posiblemente se me escapó más de alguno". Lavín usó las mismas decisiones que usaban los funcionarios de la dictadura.

Y en el mismo mail, finaliza señalando y enviando los nombres de las personas a contrata del municipio para ser despedidos: "Enviaré en un momento los (trabajadores) a contrata que estén en está misma situación". O sea para ser despedidos.

Y Joaquín Lavín se despide, feliz con su acción de alcahuete:  "Saludos".

Durante la formalización de la exalcaldesa de Maipú, la jefa de la Fiscalía Metropolitana Oriente, Lorena Parra, afirmó que “Joaquín Lavín participaba en todo muy directamente a través de Carlos Fairlie, quien era su asesor personal”.

Las listas de la ignominia de Lavín: trabajadores que fueron despedidos por pensar distinto

En esa ocasión, la fiscal Parra dio cuenta que tenían en su poder un correo electrónico del diputado que renunció recién a la UDI, donde compartía una lista con Fairlie de “funcionarios a desvincular”.⁠⁠

En la querella presentada por la administración del alcalde de Maipú Tomás Vodanovic, se cita un informe policial que analizó los mail del parlamentario Lavín, concluyendo “que fueron un total de 496 trabajadores los desvinculados como resultado de lo instruido en los nueve correos analizados”.

Sin embargo, esto significó que 72 exfuncionarios demandaran al municipio, el cual tuvo que pagar más $1149 millones por condenas, transacciones o avenimientos.

Otras acciones judiciales por facturas falsas

La acción judicial presentada por la Municipalidad de Maipú también va dirigida contra Arnoldo Domínguez, exasesor parlamentario del diputado Lavín León, donde se relatan hechos que darían cuenta de la emisión de facturas falsas al Congreso y gestiones para otros militantes de la UDI.

Según la declaración del dueño de la imprenta MMG, Juan Alberto Silva, durante años elaboró material gráfico para el parlamentario, el cual se habría pagado con dineros de las asignaciones parlamentarias.

“Arnaldo Domínguez (asesor de Lavín) me propuso pagar de forma mensual con nuevas facturas que yo emitiera a Joaquín Lavín, las que él rendiría (al Congreso), ya que esa era la única forma en que él tendría que pagarme lo que debía, lo que yo acepté”, sostuvo Silva.

En la querella también existe la declaración de un funcionario de la Municipalidad de Estación Central, quien sostiene haber emitido boletas a la Cámara de Diputados por servicios que no corresponden a la labor parlamentaria por un total de $3 millones, afirmando que “estas tareas, como ya dije, eran diversas, y entre ellas había algunas que eran de único beneficio personal del Diputado, como, por ejemplo, ir al supermercado a comprar materiales para su casa, ir a la feria a comprarle fruta o también ir a buscar encomiendas”.

“Necesito pedirte un favor”

En la querella también fueron revelados otros correos electrónicos recibidos por Joaquín Lavín Léon, donde militantes de la UDI le pedían favores políticos, para acomodar a gente conocida en la Municipalidad de Maipú.

El 17 de enero de 2107, el exalcalde y exdiputado de la UDI, Gustavo Hasbún, le escribió en el asunto: “Solicitud”.

“Necesito pedirte un favor, me llegaron estos dos currículum si los puedes en Maipú (sic). Uno es la hija de un garzón y el otro es el sobrino de una secretaria”.

El mismo mes, fue el turno del expresidente de la UDI, exministro del Trabajo y exalcalde designado de Pudahuel en la dictadura, Patricio Melero, quien le coloca en el asunto: “Solicitud de documentos”

“Joaquín, a esta persona la conozco, trabajó en Pudahuel y por su experiencia puede ser muy útil. Un abrazo.

Pato".

Otro de los hechos dice relación con la emisión de facturas supuestamente falsas por parte de Modo74 SpA, empresa que es propiedad de un exasesor de Lavín León, que mantiene la página web y oficina virtual del parlamentario, pero según las declaraciones el sitio nunca habría funcionado.