Oh I'm just counting

Hoteles sanitarios, negocio redondo: Grave denuncia vincula a Piñera con dos empresas que manejan residencias

El precio promedio de los hoteles de tránsito para cinco días de estadía gira en torno a los 450.000 pesos, con tarifas que oscilan entre los 250.000 y los 800.000 pesos (o incluso más). La oferta varía desde los establecimientos de dos estrellas a los de cinco, pero todo depende de la disponibilidad que hay en el momento de la reserva.

La gestión de los hoteles de parte del Minsal se ha hecho a través de dos únicas agencias: Cocha y Travel Security, ninguna de ellas postuló a este trabajo con proceso de licitación abierto sino que fueron contratadas como agencias de viaje exclusivas para gestionar, asignar y vender las reservas de los hoteles de tránsito.

Por esta negociación reciben el 20% de comisión de servicio. Algo que ha despertado diversas críticas en el mundo de la hotelería y el turismo pues ambos dueños de estas agencias han tenido negocios o al menos relaciones personales con el presidente Sebastián Piñera.

Sergio Purcell es vicepresidente de la asociación de empresas chilenas de turismo y gerente general de Cocha. Estudió en la facultad de economía de la Universidad Católica cuando Piñera fue su profesor y posteriormente se convirtió en gerente comercial de Bancard, empresa de Piñera.

Según señala una nota de El Desconcierto, el presidente lo nombró gerente general de Intersport (Puma Chile) y en 1996 lo llevó a LanChile, donde ejerció como gerente general de LanPerú por casi cuatro años. Desde 2003 a 2008 estuvo al mando de la gestión general de Farmacias Ahumada, en el mismo tiempo en que se desarrolló la colusión de las farmacias.

Guillermo Correa, en tanto, es presidente de Travell Security del grupo Security en el cual, según informe de Ciper Chile, Piñera tiene al menos un 1% de participación a través de su fideicomiso ciego.

El pasado mes de mayo, un grupo de 22 agentes de viajes y empleados de turismo presentó un recurso de protección para revertir la obligatoriedad de tener que ingresar en los establecimientos de tránsito que sólo gestionan Cocha y Travel Security. A esto se suman ahora los reclamos de Mauricio Vásquez y decenas de chilenos que han tenido que desembolsar dinero de sus bolsillos para pagar hoteles caros y por al menos diez días pues la tramitación de sus ingresos al país es lenta e intrincada, pese a que en su mayoría se trata de viajes por asuntos de humanidad.