Por Teresa Frías
El periodista José Antonio Neme también fue desvinculado de Mega. Fueron 75 personas despedidas con Neme.
El comunicador deja el canal luego de casi seis años en la estación, donde se convirtió en uno de los rostros más populares del área de prensa.
Neme, quien también fue parte del matinal Mucho Gusto, había renunciado a TVN en 2014 luego de una década, para integrarse al canal del grupo Bethia.
La noticia llega luego de que se confirmara también el despido de Felipe Bianchi, quien reveló la noticia a través de Twitter.
En conversación con Cambio21, Neme se refirió a la actual situación del país y los derechos humanos. Además de confirmar que por ahora no volvería a la televisión.
¿Cuál es su opinión con respecto a la actual situación de los medios luego del estallido social?
Me parece que es una industria que se acomodó a la forma antigua de hacer negocios, y que ha sido sumamente lenta en adaptarse, poco visionaria, con gente poco preparada. Y que estas son las consecuencias de aquello.
Los medios en todo el mundo están sufriendo modificaciones, por la aparición de las redes sociales, con los cambios de patrones de consumo. Pero hay industrias de medios, donde trabajamos personas más capacitadas que son capaces de adelantarse a eso y enfrentar la metamorfosis que se necesita.
No hay ningún país en el mundo que no tenga medio de comunicación, lo que pasa es que en el mundo se adelantan, y aquí los medios de comunicación y sobre todo los oligopólicos como el caso del nuestro, lo acomodaron donde fue más fácil de hacer negocios, que le valió por un tiempo pero que ahora le está pasando la cuenta.
Después del estallido social, hubo varios casos en que se produjo despido por cómo pensaba como el caso de Daniel Stingo o Freddy Stock ¿qué le parece a usted?
Desconozco esos casos. No tengo claro de que ellos fueron despedidos por lo que pensaban, no lo he conversado con ellos, y ellos tampoco sé que dieron explicaciones.
¿Qué opina sobre el apoyo que recibió cuando se supo de su despido?
Cada persona tiene su opinión y agradezco a quienes hablan bien de mí y de mi trabajo. No tengo nada más que decir porque Twitter es como un océano raro, entonces hay de todo. No sé quién está detrás de la cuentas, pero si trato de hacer bien mi trabajo, y he tratado de estar a la altura de lo que necesita el país en este momento tan difícil, si quiero trabajar en una empresa que valore este tremendo desafío, que yo tengo algunas herramientas que pueden ser funcionales a lo que requieren los medios.
¿Cómo cree usted que han reaccionado los medios ante el estallido social?
Loa medios quedaron medio aturdidos con el estallido social. Tengo la visión que los medios tenían a gente poco preparada, hay muchos editores poco preparados, ignorantes, leen muy poco, entonces la verdad es que muchas veces los medios en general son el reflejo de quienes están tomando las decisiones atrás. Son personas que manejan poca información, leen un diario y de ahí hacen una nota, son incapaces de mirar el mundo.
Habló en general, no hablo de un medio en particular, pienso que todos los medios debieran poner el capital humano de buena calidad.
¿Qué le parecen a usted las funas, las que ya no son sólo para los políticos, sino también han sido contra periodistas?
Las funas no me gustan, encuentro que no tiene ningún sentido gritarle a una persona que no está haciendo nada, o impedirle que camine, me parece una acción ridícula. Podrían expresarse de otra forma, pienso que cada uno tiene el derecho de no estar de acuerdo con una persona, puede decirlo en las redes sociales, las funas es algo absolutamente injustificado, cómo una persona porque no piensan como tú ¿qué es eso?
¿Cuáles son sus planes ahora fuera de la televisión?
No sé, tengo algunos proyectos, estoy analizándolos todavía.
¿Cuál es tu opinión con respecto al estallido social?
El estallido social es la expresión del Chile incompleto, que construimos un relato en base a la falta del relato que creamos. Los países no son solamente lo que son, sino también lo que dicen que son. Cada país tiene un relato de sí mismo.
Cuando vino la reconstrucción de la democracia después de la dictadura, comenzamos a contarnos cuentos falsos, lo que terminan por pasar la cuenta. Porque en un momento incluso éramos comparados con Singapur, algo muy extraño.
¿Usted cree que los políticos no están escuchando las demandas sociales?
Los políticos escuchan pocas cosas, algunos, otros no, no quiero generalizar, creo que hay buenos políticos, como hay pésimos políticos, y otros que dan vergüenza.
No soy lapidario en decir que se vayan todos, soy demócrata y creo que algunos merecen seguir. Hay malos políticos también.
Con respecto al plebiscito de abril y la polémica por el voto obligatorio ¿usted está de acuerdo o en contra que fuese así nuevamente?
Soy partidario del voto obligatorio, soy partidario de eso, la representatividad de la gente. Piñera ganó con una mayoría, pero también por la minoría respaldada. Porque el porcentaje que no votó no sabemos qué pasó con ellos, porque se dijo que no querían participar pero no ha sido así, con el voto obligatorio puedes hacer una radiografía exacta de lo que pasa.
¿Cuál es su opinión con respecto a los diversos informes de violaciones a los derechos humanos?
Son lamentables y serios. Deberían ser tomados en cuenta a la hora de enseñar políticas de seguridad, porque el orden público es muy necesario, no hay ningún derecho que se pueda garantizar, sino hay orden público. Sí creo que se pueden establecer políticas de seguridad y defensa, y combate al delito, que no implique la violación a los derechos humanos, una cosa no tiene que ver con la otra.
Es una falacia decir que para defenderse hay que violar derechos humanos, una persona puede ser detenida pero no tiene por qué ser torturada.
Sí valoro el rol de Carabineros, como institución, y también creo que el orden público debe estar, porque no podemos construir nada en un desorden.
Me gustaría volver a la TV
¿Qué le pareció a usted la campaña que hubo en redes sociales llamada Apaga la Tele?
La tele es otra institución que entró en la deslegitimación, no se salvó tampoco, y que también hay una suerte de generalización injusta, no creo que todos los programas son malos, y que toda la gente se aburre, no sé si responde a la verdad.
Hay programas buenos, como programas malos, hay periodistas buenos, como periodistas malos, es algo de la televisión, y creo que sí está pasando por una crisis y debe ingeniárselas por el Chile que viene, pero apagarla es un poco extremo.
¿Le gustaría volver a la TV?
Sí. No está dentro de mis preocupaciones, las cuales son estar en mi casa y generar los ingresos necesarios para cuidar a mis perros y además encontrar un espacio para poder contribuir como chileno y periodista, a todas las necesidades que el país tiene dentro de un año que es muy complicado.
