Con el nombramiento de los ministros que integrarán el gabinete del presidente electo Sebastián Piñera, se despejaron varias dudas y se fueron las ilusiones de muchos que soñaban con ser ministro. Pero no todo está perdido porque aún quedan cargos para repartir aunque siempre va a ser más importante ser ministro. Foto: uno de los que no fue designado, el economista Klaus Schmidt-Hebel
Los que no fueron ministros de Piñera; Trabajaron como chinos pero quedaron con los crespos hechos
Por María Cristina Prudant
“Quedarse con los crespos hechos” se define como: quedarse preparado para algo que no llegó a suceder. Dejar a alguien o quedar uno mismo esperando una cosa que nunca se verifica. Así se define este conocido refrán popular que muchos tuvieron que escucharlo el último tiempo porque, probablemente pensaron en cooperar en la campaña del candidato de Chile Vamos, para recibir a cambio un nombramiento importante. En el caso de Piñera no es tan fácil penetrar en su círculo de hierro. De hecho, en su primer gobierno corrió todos los riesgos nombrando a sus amigos, empresarios, economistas y abogados de la Universidad Católica. Ahora no fue muy distinto. Y cómo además es desconfiado, esta vez nombró a seis ministros que estuvieron en su gabinete anterior y la gran mayoría estudió en la Pontificia universidad. Tanto criticar a la Nueva Mayoría y al final igual hubo ministros que se repitieron el plato, igual jugaron a las sillitas musicales.
La composición de su gabinete muestra claramente lo que es y lo que quiere Piñera para la segunda administración del país que le tocará ejercer desde el próximo 11 de marzo hasta 2022.
El cientista político Patricio Gajardo, cree que el mandatario electo hizo una “apuesta política” con el gabinete que nombró.
“Creo honestamente que es una apuesta política. Lo que está tratando de evitar es que el proceso de instalación sea lento, engorroso, complejo. Hay una apuesta clara por producir resultados rápido. Como habrá un cambio de mano quiere que eso se note. Esa apuesta por repetir personas es por plena confianza de Piñera y porque ellos van a usar su experiencia que tendrá un impacto político y en lo social”.
Hay que generar espacios de confianza
Para Gajardo “hay distintas formas de relacionarse en las campañas. Hay mucha gente que participa en distintos comités busca generar un espacio para dar un salto al gobierno, para ser partícipe de la nueva administración si es que esta se produce. Eso es normal”
“Ahora, una cosa es ser parte de la campaña y otra es participar en comités donde no hay gran poder resolutivo muchas veces puede ser un espejismo creer que por trabajar en la campaña se va a asegurar un cargo” apunta el especialista.
En su opinión “lo importante es generar espacios de confianza en los equipos claves, cercanos al candidato. La clave está en que si te sumaste puedas estar cercano a los más relevantes. Es normal que mucha gente quede con los crespos hechos porque aumentaron mucho sus expectativas”.
En el área económica “los nombramientos son de relevancia puesto que ellos manejarán una de las partes más importante y los nombrados son potentes ( Felipe Larraín en Hacienda y José Ramón Valente en Economía) asegura Gajardo.
En el área de Economía fue donde quedaron varios en el camino y con los crespos hechos. Se daba por hecho que el reconocido economista Klaus Schmidt-Hebel sería el nuevo ministro de Hacienda. Sin embargo, no fue así y nuevamente fue nombrado Felipe Larraín.
La realidad nos ha mostrado un economista sumamente liberal y por sus declaraciones deja en claro que no quedó con los crespos hechos, pero no se sabe si le ofrecieron o no la cartera.
Klaus Schmidt-Hebbel se declaró totalmente piñerista y argumentó que
“no formaré parte del gobierno por motivos familiares y profesionales. El economista que trabajó en la Ocde se dedicó durante la campaña de Piñera a criticar duramente la política económica del gobierno de Bachelet. A tal punto llegó que dijo que Piñera recibe la economía "en una situación muy difícil. Así como en marzo de 2010 recibió un país con enormes retos de recuperación post crisis 2008-2009 y de reconstrucción post terremoto 2010. En este caso recibe un país que pasó por otro terremoto, que fue el segundo Gobierno de Michelle Bachelet".
En todo caso cuando fue consultado si trabajará n el gobierno de Piñera o no manifestó que “cualquiera sea la posición en que yo estaré, eso no depende exactamente de mí", dijo, y remarcó: "No depende de mí... A buen entendedor pocas palabras".
Otro que aspiraba a manejar la billetera fiscal fue Rodrigo Vergara, quien durante la campaña de la derecha fue el vocero de los temas económicos. Se comentó que le ofrecieron el ministerio de Economía y no lo aceptó, obvio si viene de ser presidente del Banco Central. El último rumor en torno suyo es que recibiría como premio de consuelo ser el nuevo presidente ejecutivo de Codelco. ¿Será? Esperaremos.
Ministerios con sorpresas
Hubo ministerios con sorpresas sobre todo Educación donde nombró a Gerardo Varela que casualmente estudió en la Universidad de Chile, pero es egresado del Saint George y eso, según Piñera, le dio confianza inmediatamente y además, defendió al “Choclo Délano” su gran amigo.
Sobre este nombramiento Gajardo dice que “en educación fue distinto porque nombró al menos esperado porque todos pensaban en la Silvia Eyzaguirre. A veces no hay claridad por qué fueron nombrados algunos”.
Y reitera que sin duda lo de Piñera “es una apuesta política. Lo que se está tratando de hacer es que la instalación sea más rápida. Piñera busca resultados con efectos político y social”.
Otra área muy importante es la de Salud donde se trabajó full time, porque lo que busca el presidente electo es conformar a la gente.
El doctor Enrique Paris, trabajó en la campaña del candidato Piñera según su relato fue “una buena experiencia, positiva. Pudimos aportar algunas ideas al tema de la salud. Se trabajó duro”.
“Aprendí muchas cosas. Hubo mucho debate. Se trabajó con altura de miras. E Insistí mucho en que había que hacer una reforma a las isapres, reforzar Fonasa, hacer desaparecer la preexistencia y otras cosas relacionadas con los adultos mayores. En este plano se trabajó muy a conciencia” manifestó el facultativo.
Ex presidente Colegio Médico
Su nombre fue mencionado para ocupar la cartera de Salud, pero Enrique Paris aclara que trabajó sin pensar en ocupar algún cargo. Cuando el candidato me llamó no conversamos nunca de ocupar un cargo. Ni él me lo ofreció ni yo se lo pedí. Cuando él me llamó me comprometí a trabajar en el programa de salud. Solo eso. Todo lo demás apareció en la prensa y yo lo aclaré”.
Para la cartera de Salud también se mencionó bastante el nombre de la diputada Karla Rubilar que no fue a la reelección. Según rumores de pasillo, ni el doctor Paris ni ella tenían opción de ocupar la cartera de Salud porque ambos están a favor del aborto en sus tres causales.
También se quedaron con los crespos hechos Andrea Molina (UDI)y Carmen Ibáñez (RN) que postulaban al ministerio de la Mujer. La primera es diputada y perdió en la pasada elección parlamentaria y la segunda fue diputada y embajadora de Chile en Grecia.
El ex contralor general de la República Ramiro Mendoza quien fue mencionado como uno de los más seguros para ocupar el ministerio de justicia también quedó en el camino. Al igual que el abogado Luis Hermosilla.
La sorpresa más relevante del gabinete fue el nombramiento del empresario Alfredo Moreno en el ministerio de Desarrollo Social, que ahora hasta será parte del Comité Político de La Moneda. En este caso estaba postulando una cercana al senador Manuel José Ossandón. Najel Klein que es esposa del alcalde de Puente Alto, Germán Codina, fue directora ejecutiva del Instituto Libertad ligado a RN.
Carlos Larraín (RN) también fue candidato a un ministerio en este caso el de Agricultura. El exsenador y exconcejal lleva algunos años fuera de la primera línea política.
A Gonzalo Cordero (UDI) lo postularon para Bienes Nacionales. Fue uno de los encargados comunicacionales de la campaña de Piñera, pero no le ofrecieron el caargo.
La principal pelea en estos momentos es quienes van a ocupar las intendencias más importantes del país. Las principal es la de la Región Metropolitana donde suenan el diputado Gustavo Hasbún (UDI), derrotado de manera rotunda en la senatorial de La Araucanía, el exalcalde de Las Condes Francisco de la Maza (UDI) y los ediles de Estación Central y La Florida, Rodrigo Delgado (UDI) y Rodolfo Carter (Ind.), respectivamente.
En la quinta región de Valparaíso, en tanto, postulan Raúl Celis (intendente en el primer gobierno de Piñera), Jaime Perry (consejero regional y asesor del senador de RN Francisco Chahuán) y Daniel Morales (alcalde de Limache).
A su vez, en Coquimbo, la polémica está al rojo vivo con el posible nombramiento de la senadora Lily Pérez. Esto porque la UDI aspira a poner a uno de los suyos ahí y RN rechaza que Pérez, que renunció al partido para formar Amplitud, sea incluida en el listado de funcionarios de confianza presidencial, lo que serviría para una potencial candidatura a la Cámara Alta en 2021.
“Quedarse con los crespos hechos” se define como: quedarse preparado para algo que no llegó a suceder. Dejar a alguien o quedar uno mismo esperando una cosa que nunca se verifica. Así se define este conocido refrán popular que muchos tuvieron que escucharlo el último tiempo porque, probablemente pensaron en cooperar en la campaña del candidato de Chile Vamos, para recibir a cambio un nombramiento importante. En el caso de Piñera no es tan fácil penetrar en su círculo de hierro. De hecho, en su primer gobierno corrió todos los riesgos nombrando a sus amigos, empresarios, economistas y abogados de la Universidad Católica. Ahora no fue muy distinto. Y cómo además es desconfiado, esta vez nombró a seis ministros que estuvieron en su gabinete anterior y la gran mayoría estudió en la Pontificia universidad. Tanto criticar a la Nueva Mayoría y al final igual hubo ministros que se repitieron el plato, igual jugaron a las sillitas musicales.
La composición de su gabinete muestra claramente lo que es y lo que quiere Piñera para la segunda administración del país que le tocará ejercer desde el próximo 11 de marzo hasta 2022.
El cientista político Patricio Gajardo, cree que el mandatario electo hizo una “apuesta política” con el gabinete que nombró.
“Creo honestamente que es una apuesta política. Lo que está tratando de evitar es que el proceso de instalación sea lento, engorroso, complejo. Hay una apuesta clara por producir resultados rápido. Como habrá un cambio de mano quiere que eso se note. Esa apuesta por repetir personas es por plena confianza de Piñera y porque ellos van a usar su experiencia que tendrá un impacto político y en lo social”.
Hay que generar espacios de confianza
Para Gajardo “hay distintas formas de relacionarse en las campañas. Hay mucha gente que participa en distintos comités busca generar un espacio para dar un salto al gobierno, para ser partícipe de la nueva administración si es que esta se produce. Eso es normal”
“Ahora, una cosa es ser parte de la campaña y otra es participar en comités donde no hay gran poder resolutivo muchas veces puede ser un espejismo creer que por trabajar en la campaña se va a asegurar un cargo” apunta el especialista.
En su opinión “lo importante es generar espacios de confianza en los equipos claves, cercanos al candidato. La clave está en que si te sumaste puedas estar cercano a los más relevantes. Es normal que mucha gente quede con los crespos hechos porque aumentaron mucho sus expectativas”.
En el área económica “los nombramientos son de relevancia puesto que ellos manejarán una de las partes más importante y los nombrados son potentes ( Felipe Larraín en Hacienda y José Ramón Valente en Economía) asegura Gajardo.
En el área de Economía fue donde quedaron varios en el camino y con los crespos hechos. Se daba por hecho que el reconocido economista Klaus Schmidt-Hebel sería el nuevo ministro de Hacienda. Sin embargo, no fue así y nuevamente fue nombrado Felipe Larraín.
La realidad nos ha mostrado un economista sumamente liberal y por sus declaraciones deja en claro que no quedó con los crespos hechos, pero no se sabe si le ofrecieron o no la cartera.
Klaus Schmidt-Hebbel se declaró totalmente piñerista y argumentó que
“no formaré parte del gobierno por motivos familiares y profesionales. El economista que trabajó en la Ocde se dedicó durante la campaña de Piñera a criticar duramente la política económica del gobierno de Bachelet. A tal punto llegó que dijo que Piñera recibe la economía "en una situación muy difícil. Así como en marzo de 2010 recibió un país con enormes retos de recuperación post crisis 2008-2009 y de reconstrucción post terremoto 2010. En este caso recibe un país que pasó por otro terremoto, que fue el segundo Gobierno de Michelle Bachelet".
En todo caso cuando fue consultado si trabajará n el gobierno de Piñera o no manifestó que “cualquiera sea la posición en que yo estaré, eso no depende exactamente de mí", dijo, y remarcó: "No depende de mí... A buen entendedor pocas palabras".
Otro que aspiraba a manejar la billetera fiscal fue Rodrigo Vergara, quien durante la campaña de la derecha fue el vocero de los temas económicos. Se comentó que le ofrecieron el ministerio de Economía y no lo aceptó, obvio si viene de ser presidente del Banco Central. El último rumor en torno suyo es que recibiría como premio de consuelo ser el nuevo presidente ejecutivo de Codelco. ¿Será? Esperaremos.
Ministerios con sorpresas
Hubo ministerios con sorpresas sobre todo Educación donde nombró a Gerardo Varela que casualmente estudió en la Universidad de Chile, pero es egresado del Saint George y eso, según Piñera, le dio confianza inmediatamente y además, defendió al “Choclo Délano” su gran amigo.
Sobre este nombramiento Gajardo dice que “en educación fue distinto porque nombró al menos esperado porque todos pensaban en la Silvia Eyzaguirre. A veces no hay claridad por qué fueron nombrados algunos”.
Y reitera que sin duda lo de Piñera “es una apuesta política. Lo que se está tratando de hacer es que la instalación sea más rápida. Piñera busca resultados con efectos político y social”.
Otra área muy importante es la de Salud donde se trabajó full time, porque lo que busca el presidente electo es conformar a la gente.
El doctor Enrique Paris, trabajó en la campaña del candidato Piñera según su relato fue “una buena experiencia, positiva. Pudimos aportar algunas ideas al tema de la salud. Se trabajó duro”.
“Aprendí muchas cosas. Hubo mucho debate. Se trabajó con altura de miras. E Insistí mucho en que había que hacer una reforma a las isapres, reforzar Fonasa, hacer desaparecer la preexistencia y otras cosas relacionadas con los adultos mayores. En este plano se trabajó muy a conciencia” manifestó el facultativo.
Ex presidente Colegio Médico
Su nombre fue mencionado para ocupar la cartera de Salud, pero Enrique Paris aclara que trabajó sin pensar en ocupar algún cargo. Cuando el candidato me llamó no conversamos nunca de ocupar un cargo. Ni él me lo ofreció ni yo se lo pedí. Cuando él me llamó me comprometí a trabajar en el programa de salud. Solo eso. Todo lo demás apareció en la prensa y yo lo aclaré”.
Para la cartera de Salud también se mencionó bastante el nombre de la diputada Karla Rubilar que no fue a la reelección. Según rumores de pasillo, ni el doctor Paris ni ella tenían opción de ocupar la cartera de Salud porque ambos están a favor del aborto en sus tres causales.
También se quedaron con los crespos hechos Andrea Molina (UDI)y Carmen Ibáñez (RN) que postulaban al ministerio de la Mujer. La primera es diputada y perdió en la pasada elección parlamentaria y la segunda fue diputada y embajadora de Chile en Grecia.
El ex contralor general de la República Ramiro Mendoza quien fue mencionado como uno de los más seguros para ocupar el ministerio de justicia también quedó en el camino. Al igual que el abogado Luis Hermosilla.
La sorpresa más relevante del gabinete fue el nombramiento del empresario Alfredo Moreno en el ministerio de Desarrollo Social, que ahora hasta será parte del Comité Político de La Moneda. En este caso estaba postulando una cercana al senador Manuel José Ossandón. Najel Klein que es esposa del alcalde de Puente Alto, Germán Codina, fue directora ejecutiva del Instituto Libertad ligado a RN.
Carlos Larraín (RN) también fue candidato a un ministerio en este caso el de Agricultura. El exsenador y exconcejal lleva algunos años fuera de la primera línea política.
A Gonzalo Cordero (UDI) lo postularon para Bienes Nacionales. Fue uno de los encargados comunicacionales de la campaña de Piñera, pero no le ofrecieron el caargo.
La principal pelea en estos momentos es quienes van a ocupar las intendencias más importantes del país. Las principal es la de la Región Metropolitana donde suenan el diputado Gustavo Hasbún (UDI), derrotado de manera rotunda en la senatorial de La Araucanía, el exalcalde de Las Condes Francisco de la Maza (UDI) y los ediles de Estación Central y La Florida, Rodrigo Delgado (UDI) y Rodolfo Carter (Ind.), respectivamente.
En la quinta región de Valparaíso, en tanto, postulan Raúl Celis (intendente en el primer gobierno de Piñera), Jaime Perry (consejero regional y asesor del senador de RN Francisco Chahuán) y Daniel Morales (alcalde de Limache).
A su vez, en Coquimbo, la polémica está al rojo vivo con el posible nombramiento de la senadora Lily Pérez. Esto porque la UDI aspira a poner a uno de los suyos ahí y RN rechaza que Pérez, que renunció al partido para formar Amplitud, sea incluida en el listado de funcionarios de confianza presidencial, lo que serviría para una potencial candidatura a la Cámara Alta en 2021.