El diputado Matías Walker, (DC) se ha mantenido en la presidencia de la comisión de Constitución desde el año pasado, debiendo tramitar una serie de proyectos que responden no sólo a las demandas ciudadanas, sino al proceso constituyente y a la pandemia.

Ha sido un año intenso, asegura, pero donde el Congreso ha aumentado su aprobación en la ciudadanía, estableciéndose un ritmo y una forma de legislar a la altura de las necesidades. De aquello, de las recientes primarias y las elecciones que vienen, nos habla desde su comisión, la de Constitución legislación y Justicia; y desde su domicilio conocido: la Democracia Cristiana.

Diputado, la DC fue el partido más votado en las primarias. ¿Qué lectura realiza usted? ¿Cuáles son los desafíos que vienen, y cree usted qué va a ocurrir con la participación ciudadana en las elecciones de abril? Las primarias son una forma de empezar con una nueva política de cara al país

 A pesar de la baja en la participación, que era muy esperable, porque era una elección nueva del gobernadores regionales; no tuvimos primarias de alcaldes simultáneas, a pesar de que la Democracia Cristiana hizo todo lo posible por tener primarias con el resto de la oposición; aun así, y pese a que no tuvimos financiamiento público, no había franja electoral, tuvimos una tremenda votación. Fuimos el partido más votado y estamos muy contentos no solamente por la votación de la Democracia Cristiana dentro del pacto Unidad Constituyente, que fuimos más del 40% dentro del pacto, sino también porque Unidad Constituyente, como tal, convocó más ciudadanos a votar que el Frente Amplio y que Chile Vamos.

Estoy seguro que en abril vamos a tener más participación, porque va a coincidir con la participación de alcaldes y convencionales, pero estoy seguro, también, que nuestros candidatos y candidatas que ganaron estas primarias van a llegar muy legitimados electoralmente a esas elecciones en abril.

Los gobernadores harán su estreno en la política chilena otorgando más poder a las regiones. ¿Están dadas las condiciones para este inicio de un nuevo periodo político para los territorios, ahora con representantes elegidos democráticamente?

Siempre va haber excusas para postergar las elecciones de gobernadores regionales, y es una paradoja que, precisamente, los que fueron más renuentes a entregarle más competencias a los gobiernos regionales hayan sido los más partidarios de postergar estas elecciones, sobre todo en el propio gobierno.

Finalmente se traspasan más de 40 competencias a los gobiernos regionales; siempre quisiéramos que fueran más, pero vamos a tener gobernadores regionales suficientemente empoderados, y la dinámica propia de la gestión de los gobernadores regionales va a llevar, estoy seguro, al convencimiento de que tenemos que traspasar más competencias aún, porque así lo va a exigir la ciudadanía y va a ser un tema, también, dentro de la nueva constitución, sobre todo en lo que tiene que ver con un nuevo capítulo de Gobiernos Regionales. 

El 11 de abril se elegirán, además, alcaldes y constituyentes, estos últimos tendrán un desafío histórico. Aún están pendientes las normas para independientes y escaños reservados. ¿Cómo ve este escenario?

Yo fui uno de los autores del proyecto para que tuviéramos más participación de los independientes y espero que, finalmente, pueda ratificarse lo que aprobamos en la Cámara de Diputados, solamente un 0,2% para los candidatos independientes, y también una menor exigibilidad para las listas.

Respecto a los escaños reservados, se inició esta semana el debate en la Comisión mixta, nosotros vamos a defender un principio y es que todos los pueblos originarios tienen el derecho a un escaño, eso incluye al pueblo Chango que acaba de tener su reconocimiento por ley. No tenemos tiempo para un padrón especial confeccionado para estos efectos, y por tanto la autoidentificación va a ser fundamental al momento de que las personas puedan elegir en cuál de las papeletas votar, porque también puede haber personas de los pueblos originarios que quieran votar por las candidaturas de los partidos. Entonces, la libertad de elección a nosotros nos parece fundamental, y esperamos que se apruebe un número mínimo de 20 escaños reservados para los pueblos originarios, y que sean supernumerarios, porque así entendimos siempre la norma que aprobamos el año pasado en la Cámara de Diputados, que de hecho fue una indicación del diputado Andrés Molina que es presidente de Evopoli, una indicación que además aprobamos antes que se publicara la reforma constitucional de convocatoria del plebiscito, por lo tanto nadie debiera sorprenderse de la incorporación de los escaños reservados para los pueblos originarios.

Usted ha participado activamente en el proceso constituyente desde el Congreso, impulsado una serie de reformas y normas que están haciendo posible que avancemos hacia la nueva Constitución. ¿Cuál será, a su juicio, el rol de los independientes y cual debiera ser el rol de los partidos políticos?

Hemos dicho que la nueva Constitución es la casa común, y por lo tanto la Convención Constitucional tiene que ser el espacio de todos, que represente la diversidad de la sociedad chilena. Por eso insistimos tanto en la paridad, pusimos el proyecto en tabla, por eso presentamos el proyecto que favorece la postulación de independientes y por eso estamos trabajando en la Comisión Mixta para que haya escaños reservados para todos los pueblos originarios, sin excepción.

El rol de los partidos políticos, por supuesto, es insustituible, porque representa corrientes de opinión que tienen que estar consignadas en la nueva constitución, pero finalmente la lógica, la esencia del acuerdo del 15 de noviembre, de la reforma constitucional que fue refrendada por la ciudadanía el 25 de octubre pasado, es que independientes, militantes de los partidos, representantes de los pueblos originarios, y siempre con la paridad en el centro de las decisiones, puedan acordar cuáles van a ser las reglas del juego básico que nos permitan que toda la sociedad chilena, o una gran parte de ella, se sienta identificada con la nueva constitución, y que exista ese sentido de pertenencia de todos y todas.

Desde el 18 de octubre de 2019 son varias las demandas sociales que se han puesto sobre la mesa, a su juicio ¿cuáles de ellas tienen mayor relevancia e impacto y obviamente debieran estar en la nueva constitución?

Respecto a las demandas sociales que surgen a partir del 18 de octubre de 2019, yo creo que las que tienen más relevancia tienen que ver con la salud, tiene que ver con las pensiones, tiene que ver con el acceso al trabajo, tiene que ver con terminar con la desigualdad y los abusos, fortalecer los derechos de los consumidores, el acceso al agua en el caso de las comunidades rurales, y eso yo creo que va a estar muy presente en el trabajo de la convención. Y los 2/3 garantizan que tiene que haber un mínimo de derechos sociales garantizados, que estoy seguro va a estar en la nueva constitución.

"Hemos legislado pensando en las familias ante la falta de apoyo del Gobierno”

Finalmente, en los últimos meses hemos sido testigos de dos visiones distintas en torno a las demandas sociales, una desde La Moneda y otra desde el Congreso. Se le ha acusado de legislar fuera de marcos constitucionales y ha existido una insistencia desde el Ejecutivo en acudir al TC. ¿Qué visión tiene usted, además, como presidente de la comisión de Constitución?

 Nosotros tenemos la convicción de haber actuado siempre dentro de los márgenes que establece la propia constitución. De hecho, la noche del Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, la noche del 15 de noviembre, yo fui testigo cómo la derecha fue la que más insistió en que mientras no tuviéramos una nueva Constitución, el actual Congreso conservaba su poder constituyente. Y eso es algo que está avalado por lo que han señalado destacados constitucionalistas, como Patricio Zapata, como Tomás Jordán, que han sido muy claros en que el ejercicio de este poder constituyente derivado permite, por ejemplo, al Congreso regular lo que es el ejercicio al derecho a la Seguridad Social durante la pandemia, en una situación excepcional, y es que los trabajadores puedan recurrir a sus ahorros provisionales, dada la incapacidad del gobierno de entregar una respuesta a tiempo. Hemos legislado pensando en las familias ante la falta de apoyo del Gobierno”.

Así lo ratificó la propia Organización Internacional del Trabajo respecto del primer retiro del 10%, entonces, eso es algo que no solamente lo he avalado yo como presidente de la Comisión de Constitución, y tengo la conciencia muy tranquila respecto de que no hemos actuado al margen de la Constitución, sino que hemos hecho reformas en artículos transitorios en base a las competencias que nos entrega la actual Constitución. Pero, tengo la convicción, también, que el Presidente de la Cámara así lo he entendido, de lo contrario no habría declarado él y el Secretario General de la Cámara que son absolutamente admisibles y constitucionales estos proyectos de reforma constitucional, y así lo ha ratificado también el Secretario General del Senado.

Estoy seguro que, de tener la oportunidad, el Tribunal Constitucional va a ratificar este criterio, tal como ha dicho el profesor Patricio Zapata, el profesor Tomás Jordán: nunca el Tribunal Constitucional ha declarado inconstitucional una reforma constitucional. Entonces, tengo la tranquilidad, como presidente de la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, de haber actuado a tiempo, en beneficio de la gente que lo está pasando mal, pero con pleno respeto a nuestras normas constitucionales