Oh I'm just counting

Senador y ex ministro Insulza a Cambio21: “Me indignan los que dicen que con el 10%, las personas compraron una televisión: es plata de ellos"

Por María Cristina Prudant
 
El ex secretario general de la OEA, ex ministro y actualmente Senador por Arica, José Miguel Insulza en entrevista con Cambio21 analiza todo lo relacionado con el plebiscito y asegura que la derecha no quiere que se regule el financiamiento porque ellos disponen de muchos recursos para ocupar en este importante proceso constitucional del país.
 
También se refiere a una nueva reforma tributaria y al cambio previsional que el país espera, aunque hay “propuestas progresistas” que mucha gente no está dispuesta a aceptar.
 
¿Cómo observa usted la decisión de las autoridades de iniciar el desconfinamiento?
Hasta ahora los resultados parecen mixtos, un día un poquito más u otro un poco menos. Está claro que todavía no estamos sufriendo una situación difícil, la verdad está funcionando. Ahora, de ahí hay que esperar porque todavía hay mucho contagio, de lo cual mucho contagio también porque hay mucha prueba, eso es cierto, mucho test. Pero en realidad creo que es muy temprano todavía para saber si funcionó o no funcionó.
 
Además, no olvidemos que la gran parte del desconfinamiento tiene lugar en la zona oriente de Santiago que es la que la otra vez demostró ser más positivo en cuanto a la cuarentena. Yo creo que la real prueba del desconfinamiento va a empezar con Estación Central y Santiago. Ahí vamos a ver porque va a ser un poquito más complicado y veremos qué es lo que pasa cuando llegue a las comunas del sur de Santiago, donde la pandemia ha sido más fuerte.
Se espera que la pandemia vaya cediendo sobre todo porque se viene el plebiscito pronto y se están presentando algunos inconvenientes como lo ha dicho el Servel por falta de recursos para implementar el sistema de manera correcta. ¿Cuál es su opinión?
Es verdad, pero hubo una buena señal en la ley que se aprobó en el Senado que realmente muestra que hay intención de resolver los problemas, sacar la ley etcétera, pero al final ciertamente la buena voluntad del gobierno se va a mostrar si pone la plata. Si no va a ser como Trump que está cortando la plata al correo para que no haya voto por correo. Si no hay dinero para hacer el plebiscito y para tomar todas las medidas que se acordaron, naturalmente eso va a ser un problema por cierto.
 
Hay un sector de la derecha que no quiere plebiscito. La UDI está proponiendo ahora una reforma constitucional para que se haga un congreso constituyente ¿qué le parece a usted esa postura?
En realidad, yo opino que esa es una torpeza porque no les va a dar ningún resultado. Si no tienen mayoría en el Congreso para hacer una reforma constitucional, en el fondo es casi un acto de propaganda a favor para que la gente de la segunda opción vote por la convención mixta, en realidad, porque no va a pasar ninguna otra cosa. Esto tiene que ver con que hace un tiempo atrás Pablo Longueira propuso una cosa parecida, pero en el fondo lo que él estaba diciendo era demos por hecho el plebiscito, como ganador el Apruebo, y a cambio de eso tratemos de hacer la convención, pero esto no es así es más desfachatado si se quiere.
 
¿Pero usted cree que eso no va a prosperar?
No, de ninguna manera tendría que tener el apoyo de algunos partidos de oposición y eso no va a ocurrir y de toda Renovación Nacional que tampoco va a ocurrir.
Con motivo también del plebiscito han comenzado a surgir acuerdos entre algunos partidos de la centro izquierda con algunos partidos del Frente Amplio, ha surgido una plataforma denominada ¡Dignidad Ahora!
Si, pero ¡Dignidad Ahora! en realidad es el antiguo partido humanista, una mezcla de partidos. No es una gran novedad política, es una novedad en cuanto al nombre y en cuanto a que acentúa esta división del Frente Amplio, pero la verdad que creo que los actores son más o menos los mismos.
 
Respecto a algunos encuentros que han sostenido partidos de la centro centro izquierda y la DC ¿qué le parece?
Yo lamento mucho que no se haya producido ya una unidad en cuanto a un concepto fundamental y es que todos queremos una nueva Constitución y ahora no se está pidiendo todavía que hablemos de los contenidos. Cuando haya elección de constituyentes yo espero que cada candidato diga que Constitución quiere hacer, pero ahora queremos una nueva Constitución, ese es el acuerdo por lo tanto yo no veo razón para tener todavía varias líneas de trabajo en el Apruebo. Yo veo cosas buenas, cosas interesantes del punto de vista de la gráfica de todas esas cosas, pero una campaña en común sería muy importante.
Si en la elección Constituyente llevamos varias listas, ahí mismo empezaremos a perder
 
Respecto a la oposición tradicional en la cual a veces también está el PC, ¿todavía está lejos de llegar a acuerdos?
Yo creo que todavía no hemos avanzado nada en eso, tampoco voy a decir que estamos más lejos, no. Eso está estático y estamos ya a pocos días de que tenga que empezar la campaña del plebiscito y también estamos cerca de los plazos para presentar candidaturas para ver si se van a hacer primarias o no y la verdad que todavía no se mueve nada en materia de alianzas esa es la realidad, mucha palabrería no más.
 
Además, la nueva presidenta del partido Convergencia Social, Alondra Arellano partió diciendo que queremos una amplia unidad de todos los que piensan igual que nosotros, o sea, quieren unidad entre ellos mismos, es un poquito raro. Desgraciadamente hay mucho de eso y se va a notar en la pluralidad de campañas por el Apruebo. De la manera en que todos van a votar Apruebo, es una mala cosa, pero no irreparable.
 
Ahora, si después llevamos candidaturas de todos, cada uno por su cuenta con los que piensan como uno, en ese mismo momento vamos a empezar a perder la Constituyente. En la derecha diferencia o duda en la derecha es si van a tener una lista o dos, todo lo demás está completamente claro. Ahora, el resto si nos presentamos en cuatro listas usted comprende que con un tercio de la votación la derecha puede obtener más de la mitad de los constituyentes y eso sí que sería una derrota grande.
 
Hay problemas de regulación del financiamiento para el plebiscito, pero no todos concuerdan con esa situación como la presidenta de la UDI que dijo que con esto se pretende favorecer al Apruebo.
 
No entendí muy bien por qué esto estaría favoreciendo al Apruebo, que hubiera financiamiento, si se financia la campaña para el plebiscito se financia para todos, asi es que no veo nada raro. Ahora ellos en la práctica tienen razón porque los que están por el Rechazo tienen mucho más dinero que los que están por el Apruebo, en eso sí, en términos prácticos tienen razón y que eso ayudaría a financiar a la gente que no tiene dinero para hacer campaña. L a derecha tiene su poderosa caja electoral y con eso están contentos y por eso no quieren que haya ningún tipo de financiamiento público y de nada por el estilo. Ni regular tampoco el financiamiento privado, si las leyes electorales no están todavía vigentes para el plebiscito. Entonces, el riesgo es que la derecha llene de plata, como lo hacían antes todas las campañas en grande, por eso a la derecha no le conviene que haya justicia en materia económica para el plebiscito, naturalmente que no es algo que le convenga.
 
Respecto a la situación del machi Celestino Córdova ¿qué opinión tiene usted?
Desgraciadamente en esto es difícil pronunciarse mucho porque la Corte Suprema podría haber regulado este tema simplemente diciendo: mándenlo a un recinto cercano a su familia y a lo mejor eso podría haber resuelto el problema, pero la Corte Suprema no acogió el recurso de protección a favor del machi y en realmente es poco lo que se puede hacer.
¿Usted concuerda con quienes dicen que el gobierno ha tenido una política errática para enfrentar la violencia en La Araucanía como la creación del Comando Jungla, criminalizar la protesta del pueblo mapuche, lo que pasó con el crimen de Camilo Catrillanca y que todo eso ha contribuido a aumentar el problema?
Eso ciertamente ha creado un clima ciertamente negativo y finalmente si usted mira la agenda que le pidió el Presidente al Congreso el otro día, es una agenda compuesta con casi ese puro tipo de medidas y eso acrecienta y le hace el juego a los que quien la violencia en La Araucanía, por cierto. Y hablemos del principal asunto que son el surgimiento de grupos paramilitares. Cierto que ahí hay una dictación negativa del gobierno al actuar de manera que no se relaje la tensión.
 
El gobierno anuncia proyectos para reactivar la economía. Sin embargo se han producido algunos problemas en el Senado que ha rechazado algunas propuestas
Lo que pasa es que hay un concepto que tenemos que revisar bien que es la mipymes, son microempresas, pequeñas empresas y medianas empresas y el gobierno propuso al margen de eso, porque hay grandes empresas, el gobierno propuso una ley que tiene ventajas tributarias y ellos dijeron mucho que estos favorecía a las mipymes, eso es verdad para algunas, porque para que a usted le favorezca una rebaja de impuesto usted tiene que estar trabajando y ganando plata por o si no, no va a pagar impuestos y lo que vemos es que el gobierno no ha entendido que las pymes, las microempresas y las pequeñas empresas están en un modo de supervivencia no en un modo de reactivación.
 
Entonces, eso fue lo que pasó y se dio muy claramente, en la reunión que hubo en el Senado hablaron todos los voceros de las pymes, todos criticaron mucho la política del gobierno, pero al día siguiente cuando quedó más menos claro que se podía votar en contra la ley como ocurrió, algunos dirigentes empezaron a llamar para decir: no, por favor apóyenla, eran fundamentalmente dirigentes que representan a sectores de empresas medianas, pequeñas pero todavía activas, mientras que el resto lo que preguntaba era por qué no había ayuda.
 
Aquí hay dos posiciones distintas, y así estamos tratando de discutirlo en el Senado nosotros. Hay una política para la reactivación para el trabajo para aquellas que están en condiciones de trabajar y hay otra política para las que están cerradas y tratando de sobrevivir, ahí hay una gran diferencia en eso. No es lo mismo una empresa de transportes que una maestranza que puede tener 200 trabajadores, que puede ser una empresa mediana que una pequeña empresa que tiene cinco dependientes.
 
También se ha dicho que se necesita un nuevo pacto tributario para solucionar problemas derivados de la pandemia
 
Estoy de acuerdo en eso. A mí me gusta más un nuevo marco tributario que el impuesto a los ricos. Un sistema por el cual los ricos paguen más impuestos de manera general y no por una sola vez. Esta es una especie de medida parecida a las AFP, pero eso es por una vez porque son los fondos de pensiones, pero la política tributaria nunca debe ser por una sola vez, sino permanente y tampoco debe ser cambiada a cada rato dicho sea de paso.
Entonces, yo soy partidario de una política tributaria mucho más redistributiva que la que tenemos hoy día, evidentemente. Si hoy día usted compara el famoso Gini, el coeficiente de desigualdad antes y después de pagar impuestos las cosas no cambian mucho, el coeficiente de desigualdad no cambia. En un país nórdico el coeficiente de desigualdad cambia en dos puntos o más. En cambio, en Chile no cambia porque el principal impuesto es el IVA, que no es redistributivo, es igual para todos.
 
"Me indigna la gente que dice que con el 10%, las personas compraron un refrigerador o un televisor: es la plata de ellos"
 
Después del 10%, la ciudadanía espera el cambio previsional. ¿Usted cree que el proyecto que está en el senado que envió Piñera da soluciones a los problemas graves de pensiones en el país?
Creo que lo que el gobierno hizo fue inteligente, al partir del proyecto de Bachelet, que pertenece a un período de la Presidenta y creaba este Fondo Solidario sobre la base de aumentar sustantivamente las contribuciones de los empresarios de un 5% del cual un 2 iba al Fondo Solidario y un 3 a las cuentas personales. Hoy día se está hablando de 3 y 3, pero del punto de vista de la oposición se habla de 6% y yo creo que es difícil que eso se acepte porque el gobierno sabe, más allá que sea justo o no, que sea todo para el Fondo Solidario, sabe que la mayor parte de la gente quiere que la plata vaya a su propio fondo.
Hay una encuesta que dice que el 53% de la plata vaya a su propio fondo y el 33 quiere que sea repartía entre fondo solidario y cuenta particular y solo un 3% aparece apoyando el Fondo puramente solidario. Entonces, en esas condiciones es difícil que el gobierno, mientras no cambie la mentalidad de la gente y no se les demuestre que todos van a salir ganando, todos van a seguir diciendo la plata es mía no me la toquen, ese es el problema.
 
Ahora, ese es un impacto que lo creó de todas maneras el 10%. El 10% ha sido un éxito inesperado, le confieso que yo esperaba que se produjera un estímulo a la economía pero no en los volúmenes de ahora, que se dice que hasta 2 puntos podría disminuir la tasa del producto, gracias al gasto de más de 8 mil millones de dólares. Ese es un impacto absolutamente inesperado y me indigna la gente que dice que con el 10%, las personas compraron un refrigerador o un televisor: es la plata de ellos. Oiga si a mí no me importa lo que compren, lo que importa es que lo gasten y reactiven realmente la economía y eso está pasando, pero la gente al mismo tiempo siente que se está gastando su plata y eso fortaleció un poco la idea del fondo de ahorro personal.
 
Creo que la mentalidad de la gente, en materia de pensiones la va a cambiar mucho y no siempre a las propuestas más progresistas. Pero hay mucha gente que dice cuidado con tocar mi plata y ya se lo demostramos con una ley. Y eso hace cuesta arriba la reforma.