“La situación del Tribunal Constitucional es realmente inadmisible. No solo se han convertido en tercera cámara modificando acuerdos del Congreso, sino que hoy se han convertido en cómplices de investigaciones que se están llevando adelante en relación al procesamiento de altos mandos del Ejército”.

Asi reaccionó el vicepresidente del Senado e integrante de la comisión de Constitución de la Cámara Alta, Alfonso de Urresti (PS), luego de conocer que el Tribunal Constitucional (TC) alista su resolución que paralizará la causa contra el ex Comandante en Jefe del Ejército, Humberto Oviedo, llevada adelante por la ministra en visita Romy Rutherford.

El senador socialista agregó, además, que el TC “se han convertido en un tribunal de la impunidad y de la protección para delincuentes que se han amparado en el Ejército para saquear los gastos reservados. Esto es una vergüenza”.

Para el senador de la DC, Francisco Huenchumilla, -quien también participa de la comisión de Constitución- “es muy complicado que los más altos órganos del Estado tengan un cuestionamiento de legitimidad. Porque el TC está actuando con variables políticas al respecto, con influencias de poderes fácticos”.

El senador Pedro Araya, afirmó, por su parte, que “creemos que la ministra tiene que seguir avanzando en la investigación del Ejército. Que hoy por un artilugio legal se pare la investigación es una mala noticia. A raíz de lo que está haciendo hoy el TC se hace necesario absolutamente una modificación de este tribunal”.

Añadiendo que “le pediremos al gobierno que apure la reforma al TC, porque hemos visto que el TC se está conformando en una verdadera piedra de tope para llevar adelante varias investigaciones en determinados temas complejos”.