Coquimbo Unido fue a Barranquilla a jugar con Junior el partido de ida de cuartos de final de la Copa Sudamericana 2020 y obtuvo un histórico triunfo por 2 a 1, luego de comenzar perdiendo el partido con un inexistente penal en contra.

A partir de ahí, Junior -abatido por las ausencias por lesión, suspensión y contagio de coronavirus- trató de manejar la pelota y un balón filtrado dejó a Miguel Borja mano a mano con Matías Cano a la entrada del área. El delantero colombiano intentó pasarse al portero argentino, que le tocó primero la pelota y luego impactó al contrario, lo que significó que el árbitro cobrara penal.

Cano estuvo más de seis minutos en el suelo, con evidentes muestras de dolor, mientras el juez venezolano Jesús Valenzuela en ningún momento fue al VAR (más allá de que hubo comunicación) para ver una jugada donde evidentemente Borja buscó el contacto. De esta forma, el propio Borja marcó de lanzamiento penal a los 25 minutos.

 A los 67 minutos fue Fernando Manríquez el que elevó y, seis minutos después, Ábrigo sorprendió con un zurdazo que rebotó en un jugador del la escuadra colombiana, lo que permitió que la pelota pasara justo sobre Viera, en lo que fue el 1-
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Esos fueron los mejores pasajes de Coquimbo, con Ábrigo mucho más cómodo por el carril central y no abierto a la izquierda, como lo hizo prácticamente una hora.

La algarabía llegaría a los 89 minutos, cuando Palacios recibió en el área, pudo girar y casi llegando al vértice del área chica, sacó un derechazo cruzado, por arriba, que terminó batiendo a Viera para poner el 2-1.