"No tengo ni idea si seguiré en el cargo". Las palabras de Eduardo Berizzo tras la derrota del Athletic de Bilbao con Levante habían dejado sobrevolando la posibilidad de que el argentino se convirtiera en el cuarto entrenador echado en esta temporada de la Liga de España. Y así se formalizó este martes, un día después de ese 0-3.

 

Lo hizo a través de su cuenta de Twitter. Allí, anunció: "El Athletic Club ha decidido resolver el contrato que unía a su entrenador Eduardo Berizzo con la entidad".

 

Además, el club vasco indicó que "a partir del miércoles 5 de diciembre", Gaizka Garitano -técnico del equipo filial desde julio de 2017- "será el responsable de dirigir el primer equipo del Athletic Club".

 

Los números no ayudaron a que Berizzo resistiera en el cargo. El Athletic está decimoctavo, en zona de descenso, y apenas ganó una vez en 14 partidos. De los restantes, empató ocho y perdió cinco. Y es uno de los equipos más goleados, con 23 goles recibidos.

Su reemplazante llegó a Bilbao en 2017 para hacerse cargo del Bilbao Athletic, el equipo filial que lucha en la Segunda División B de España. En Primera había entrenado al Deportivo La Coruña, donde fue despedido el 26 de febrero del año pasado tras 23 partidos. El DT vasco también pasó por Eibar y Valladolid.

Un fútbol hostil para los técnicos argentinos

El caso de Eduardo Berizzo se sumó a los de Leonardo Franco y Antonio Mohamed, los otros dos entrenadores argentinos despedidos en el curso de esta temporada. A ellos solo se le sumó un español: Julen Lopetegui, ex DT de Real Madrid y la selección española.

El primer entrenador destituido esta temporada fue el argentino Leo Franco, despedido por el Huesca tras la octava jornada y relevado por Francisco Rodríguez.

Después fue el turno de Julen Lopetegui, sustituido en el banco del Real Madrid por el argentino Santiago Hernán Solari. Poco después al que despidieron fue al Turco Mohamed en el Celta, relevado por Miguel Cardoso.

De los cinco que iniciaron esta temporada, solo siguen dos: Diego Simeone, el técnico argentino más exitoso de los últimos años con sus títulos en Atlético de Madrid, y Mauricio Pellegrino, quien llegó al Leganés tras su paso por el fútbol inglés, donde dirigió al Southampton.