Minutos de terror se vivieron durante los Mundiales de Natación en Budapest (Hungría), luego de que la nadadora estadounidense Anita Álvarez se desmayara en plena piscina y fuese rescatada por su entrenadora española Andrea Fuentes, quien se transformó en heroína.

El tenso momento sucedió mientras Álvarez se encontraba realizando su prueba en la categoría solo libre, fue ahí cuando la deportista se desvaneció bajo el agua, lo que fue resuelto con suma agilidad por la medallista olímpica en Pekín 2008, que evitó una tragedia.

Fuentes, que se sumergió en la pileta sin traje de baño, fue ayudada por un personal del recinto, con quien pudo retirar a su pupila del agua para que pudiese ser chequeada por médicos.

La impactante imagen, capturada por el fotógrafo británico Oli Scarff, dio la vuelta al mundo tras viralizarse rápidamente.

Afortunadamente, la nadadora logró recuperarse de forma íntegra minutos después del suceso y la competición siguió su curso, siendo la japonesa Yukiko Inui, quien logró llevarse la medalla de oro.