Nicolás Jarry (63 ATP) ganó un infartante duelo al argentino Nicolás Kicker (94°), por 6-7, 7-5 y 7-6 y avanzó en la qualy del Masters 1000 de Roma.
Fue duro desde el inicio el match para el nacional. En la primera manga no hubo grandes diferencias, sin ni siquiera algún punto de quiebre, y recién en el tie break y gracias a dos mini break, el trasandino logró llevarse la manga en 46'.
El segundo set parecía idéntico. Todo seguía igual, hasta que llegó el undécimo juego y el nieto de Jaime Fillol pudo amarrar el primer y único quiebre de todo el partido para llevarse luego el segundo parcial en 50 minutos.
En el tercer set nada cambió, siguieron muy parejos y forzaron un tie break de infarto, donde recién después del tercer match point, Jarry logró cerrar la manga en 58 minutos y el partido en más de 2 horas y media de juego.
Entre las cosas positivas de este match para la primera raqueta chilena está que bajó mucho sus errores no forzados, pudo dar vuelta un partido complicado y además el primer servicio le está funcionando mucho mejor.
Sólo una muestra: marcó 15 aces contra 3 de su rival. Y lo que le viene ahora para el mejor nacional en el ranking ATP en el papel aparece mucho más empinado, porque deberá enfrentar al portugués Joao Sousa (48°) para buscar su paso al cuadro principal del certamen italiano. El europeo llega al duelo frente al criollo tras vencer a otro trasandino, Horacio Zeballos, por 6-4 y 6-0. Jarry y Sousa no registran enfrentamientos previos en el circuiro, pero el europeo viene de ser campeón del ATP 250 de Estoril.