El club Flamengo de Brasil suspendió el contrato del peruano Paolo Guerrero, por lo que está impedido de cumplir sus compromisos profesionales, informó el vicepresidente jurídico del club brasileño, Flávio Willeman, en entrevista al blog Ser Flamengo.
"El contrato está suspendido, está previsto en la legislación, está previsto en el contrato. Mientras el contrato esté suspendido, (Guerrero) no recibe (dinero) del club", señaló este fin de semana.
Con esta noticia, el artillero y gran estrella del club carioca dejó huérfano el ataque del 'Mengao'. Todo partió el 3 de noviembre, cuando la FIFA le suspendiera por un resultado adverso en un control de dopaje.
Una contraprueba del examen antidopaje al que fue sometido el capitán de la selección peruana confirmó la presencia de un metabolito procedente de la coca, pero en baja concentración, informó una semana después de la suspensión el abogado del atacante al diario O Globo de Brasil.
Ante esto, Willeman dijo que el "Fla" sigue de cerca la evolución del caso pero subrayó que no interviene en la defensa ante la FIFA. "Hay total participación (por parte de Flamengo), pero no en la relación del atleta con la FIFA. Eso es un problema personal y el atleta contrató sus abogados y se defendió", puntualizó.
A su juicio, el atacante peruano de 34 años -que consiguió la reducción de la pena de un año a seis meses y podrá estar en el Mundial de Rusia- "puede haber sido inducido a tomar un té, puede haber sido una contaminación mínima, pero usar drogas jamás".
Guerrero inició su carrera en el peruano Alianza Lima. Tras pasar una década en el fútbol alemán, desembarcó en Brasil en 2012 para jugar en el Corinthians, club en el que permaneció por casi tres años. Poco después, en 2015, firmó con el carioca Flamengo un contrato hasta agosto de este año.