Por Alfredo Peña R.
Ver a estos jugadores de Colo Colo es una verdadera verguenza. Es exasperante ver a estos sujetos que se dicen profesionales. Son todos unos mediocres, torpes, abúlicos con una excepción, el uruguayo Falcón. Pero son unos millonarios mediocres y torpes. Porque tienen un promedio de sueldo por cerca de los 12 millones de pesos. Sí lo que leyó usted: Cerca de 12 millones de pesos.
Sólo un ejemplo: Blandi, el delantero argentino, que no le hace un gol ni al arco iris, gana cerca de ¡30 millones de pesos al mes!
Creo que estos jugadores merecen irse al descenso. No merecen tener el respeto ni menos el cariño de la gente del club más popular de Chile. La gente, especialmente los más humildes sufren al ver a estos jugadores.
Con estos jugadores, no existirá esa frase del "té y la marraqueta tuvo el mejor sabor" por el triunfo colocolino. Estos jugadores no lo entienden.
Los seguidores de Colo Colo, entre los que me incluyo, no merecen sufrir por estos jugadores: son el peor equipo de toda la rica historia de Colo Colo.
En un trabajo normal, una oficina, una empresa, una universidad, una escuela u otro cualquier lugar, te exigen hacer bien tu trabajo. Y si eres mediocre, te tienes que esforzar. Sino te despiden.
Todos los jugadores, incluido el técnico Quinteros deberían ser despedidos y deberían jugar los juveniles. Les aseguro que ellos le pondrían más ganas y esfuerzo por el hecho de vestir esa camiseta que lleva al bravío cacique Colo Colo en el pecho
¿Con quién perdieron ahora? Es la pregunta que nos hacen, cuando saben que jugó Colo Colo. En esta oportunidad con el otro colista, La Serena y jugando de local en el estadio Monumental. 2-0 fue el marcador. Y pudieron ser más.
Colo Colo se hunde como colista con 18 puntos tras 22 fechas.
Es un grupo de jugadores sin técnica, sin ganas, torpes, lentos, abúlicos, sin inteligencia, lo peor que ha pasado por la escuadra popular.
¿Con quién perdieron ahora? Con estos jugadores y este abúlico técnico, con el que venga.
Da lo mismo: Van a jugar como nunca, para perder como siempre...