El tenista nacional Nicolás Jarry (55° en el ránking ATP) cerró una decepcionante participación en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, tras caer en cuartos de final frente al brasileño Joao Menezes (212°), por parciales de 7-5 y 6-4.

El chileno, quien además no pudo responder a su condición de primer sembrado del certamen, tuvo un errático tenis, completando 52 errores no forzados en todo el partido contra los 25 de su adversario, quien logró el mejor triunfo de su carrera.

Menezes controló en todo momento al nieto de Jaime Fillol, quien entregó muy rápidamente el servicio en el primer set, entregando de forma muy rápida una ventaja de 5-2 ante su rival.

No obstante, algo de jerarquía logró mostrar en ese período del partido, para reponerse a aquel difícil momento del partido, aunque el esfuerzo terminó pasándole la cuenta y terminó perdiendo de igual forma la manga.

En el segundo set, la historia se vio siempre adversa para el chileno, aunque mantuvo su juego de saque en gran parte del parcial, pero que era delatado por su rostro de disgusto y los constantes reclamos por la cancha, el público y algunos cobros del árbitro.

De igual forma, el "Príncipe" pudo estirar la historia hasta fases decisivas de la manga, en la cual nuevamente terminó cayendo en fallas no lógicas para su nivel, terminando por perder en casi dos horas de partido.

Con esto, el chileno no solo pierde la posibilidad de darle una nueva medalla a Chile, siendo una carta prácticamente segura, sino que además puso en jaque su participación en los próximos Juegos Olímpicos de Tokio 2020, a los cuales solo podrá acceder siendo uno de los 56 mejores tenistas del orbe.