El seleccionado nacional abrió las puertas a su equipo justo cuando la diferencia abajo auguraba una derrota inminente. La "chispeza" del niño maravilla ilusionó a su equipo que se levantó e igualó el lance.
El seleccionado nacional abrió las puertas a su equipo justo cuando la diferencia abajo auguraba una derrota inminente. La "chispeza" del niño maravilla ilusionó a su equipo que se levantó e igualó el lance.