Tiger Woods, que no competía desde el pasado Abierto Británico, reapareció a lo grande en el PNC Championship de Orlando, en el que compitió junto a su hijo Charlie, con quien vivió un momento muy emotivo cuando metió su primer hoyo en uno.
Woods, de 48 años, volvió a competir tras someterse en septiembre a una nueva operación en la espalda para aliviar el dolor y los espasmos que sufrió durante largos períodos de 2024.
En el Ritz-Carlton Golf Club Orlando, el ‘Team Woods’ cayó ante el afamado golfista Bernhard Langer y su hijo Jason, pero Tiger y Charlie vendieron cara su derrota, ya que intercambiaron golpes constantemente y requirieron un desempate para determinar un ganador.
El equipo Langer y el equipo Woods anotaron rondas de 59-57 cada uno en el formato scramble de dos jugadores, requiriendo tiempo extra para determinar los títulos del PNC, en un día en el que Charlie Woods hizo un hoyo en uno en el cuarto hoyo par 3 y procedió a embocar putts por todo el patio.
El momento del día fue cuando Charlie sorprendió con el hoyo en uno. Y lo curioso fue que el más sorprendido fue él, porque no se había dado cuenta de la hazaña hasta que el público presente comenzó a vitorear y su padre fue directamente a abrazarlo, regalando una postal conmovedora que también muestra lo prometedora que puede ser la carrera de Charlie, de 15 años.