Por Alfredo Peña R.
Lo cierto es que el partido fue muy extraño.
Con un entrenador del equipo chileno, perdido, irresoluto, torpe, sin ganas de ganar, aunque redunde.
Es inentendible que mientras el técnico peruano realizó los cuatro cambios, Gareca no hizo ninguno sino hasta el minuto 92.
¿Necesitaba piernas frescas el equipo chileno? Obvio. Pero cuando restaban tres o cuatro minutos y ya jugándose el alargue, al irresoluto y perdido Gareca, se le ocurrió hacer cambios. No quería ganar. Sus asesores, le gesticulaban como exigiéndole cambios. Pero el perdido y lenguaraz Gareca, nada de nada.
Se sentía cómodo con el empate ante un equipo peruano, quizás el peor cuadro incaico que hemos visto en años.
Con Gareca, no tenemos mucha opción ni siquiera de llegar al repechaje. Hoy demostró en Lima, su falta de deseos de ganar, de llegar rápido al arco rival. O sus ganas que lo despidan y así llenarse los bolsillos e irse dejándonos en la peor ubicación en muchos años de una selección chilena.
El partido: Sin muchos comentarios
La selección chilena empató 0-0 con su par de Perú en calidad de visita y se mantiene en el fondo de la tabla de posiciones de la clasificatoria sudamericana.
La Roja necesitaba urgentemente de los tres puntos para salir del último lugar de la tabla e ilusionarse con alcanzar a los equipos que disputan un lugar en el próximo mundial de Norteamérica 2026.
Sin embargo Chile no logró dañar a la selección peruana y con seis puntos en la tabla se ubica precisamente a seis unidades de Venezuela, equipo que se encuentra en posición de repechaje y que será el próximo rival de la escuadra nacional en Santiago.
En el último minuto de juego se cobró un penal a favor de Perú, decisión que se revirtió por posición de adelanto de uno del Rimac.
El VAR salvó a Gareca de un nuevo bochorno....