Carlos Alcaraz y Jannik Sinner se enfrentaban en una vistosa final de Roland Garros. El número uno y el dos del mundo frente a frente, en uno de los torneos más icónicos del tenis mundial.

El español ya había conocido la gloria en Francia. Fue, precisamente, en la última edición del torneo galo, cuando Carlos Alcaraz logró su tercer Grand Slam, lo que se vería incrementado pronto por el triunfo en Wimbledon 2024.

Por su lado, Jannik Sinner quería lograr su primer Roland Garros y ratificar, de esa manera, la superioridad en el circuito ATP. Una final que ya prometía desde antes que las zapatillas se llenaran de arcilla.

Pese a que fue Carlos Alcaraz el primero en quebrar el servicio de Sinner, en el quinto juego del primer set, fue el italiano el que terminó llevándose la primera manga por 6-4.

En el segundo set, el desarrollo fue menos adrenalínico. El italiano quebró en el segundo juego y Alcaraz se vio con el partido encima. Pese a ello, el español devolvió el quiebre en el noveno game, pero terminó sucumbiendo en el tie break.

Por fin, al español se le dio el tercer set. Dos quiebres, uno por cada lado, en el inicio de la manga, que terminó dejando arriba a Alcaraz por 6-4 y poniendo algo de incógnita al final del partido.

Cuando parecía que el número dos del mundo estaba liquidado, surgió de la cenizas, como el ave fénix. Jannik Sinner estaba 5-3 arriba en esta manga, pero el español estuvo intratable con la presión encima. Finalmente, mandó el partido a una definición de quinto set, llevándoselo por 7-6 en el tie break.

Set final
Resumiendo: 6-4; 7-6; 4-6; y 6-7. Así estaba el partido cuando llegó el set final. Pese a que Carlos Alcaraz venía remontando en su juego, pronto Jannik Sinner pudo volver sobre el último set.

Con un 5-5 en el luminoso, el número uno del mundo consiguió ganar su saque y le puso toda la presión encima al español. Sin embargo, Alcaraz está hecho con la misma materia prima de Nicolás Massú y la presión le vino bien. Lo mandó al tie break, nuevamente.

Finalmente, Carlos Alcaraz realizó la proeza épica. Pese a ir abajo gran parte de la final, consiguió un tie break heroico, con un puntazo final, llevándoselo por 10-2.