Grupos de manifestantes, jóvenes en su mayoría, siguen concentrados la noche de este viernes en el microcentro de Asunción y piden la renuncia del presidente, Mario Abdo Benítez, en la foto, después de que las fuerzas de seguridad dispersaran con gases una concentración de centenares de personas frente al Congreso en protesta por la gestión del Gobierno ante la pandemia.
Según los reportes de algunos medios habría varios heridos por balines de goma, así como algunos policías a causa de las piedras lanzadas por algunos manifestantes.
El núcleo de los incidentes, una zona que comprende la Comandancia de la Policía Nacional, el edificio legislativo y el Palacio de Gobierno, presenta desperfectos y en algunos puntos se propagaron algunas barricadas incendiaria
De acuerdo con varios medios locales, el grupo de manifestantes, en torno al centenar, tiene la intención de hacer una vigilia frente al Congreso para pedir la dimisión de Abdo Benítez, del derechista Partido Colorado.
Renuncia de todos sus ministros
El presidente de Paraguay, pidió a todos los ministros de su gobierno que renuncien, después de que la manifestación en protesta por su gestión de la pandemia terminara en disturbios. El mandatario tuvo esta mañana su reunión con sus colaboradores más próximos en la residencia presidencial de Mburuvicha Roga para "evaluar las situaciones de ayer" y preparar un mensaje a la ciudadanía para algún momento de este sábado, como informó a los medios el ministro de Tecnologías de la Información y Comunicación, Juan Manuel Brunetti.
"El mensaje concreto es ese: el presidente escuchó a la ciudadanía, convocó a su Gabinete y pidió que pongan su cargo a disposición", dijo Brunetti. El viernes por la noche hubo enfrentamientos entre los manifestantes y la policía en el centro de la capital, Asunción, que se saldaron con veinte heridos. Los manifestantes, que protestaban inicialmente de forma pacífica por la falta de insumos médicos, arrojaron piedras a los agentes, quienes a su vez respondieron con balas de goma y gases lacrimógenos. Abdo Benítez respeta las protestas pacíficas, dijo Brunetti.
El portavoz insistió en que Abdo Benítez había recibido "el mensaje de la ciudadanía", a pesar de que lo que los manifestantes pedían la salida de todo el Ejecutivo, empezando por el propio presidente, y no cambios de ministros. Brunetti también avanzó que será el jefe del Estado quien anuncié las salidas ministeriales en el momento en que "tenga hechos concretos para comunicar a la ciudadanía". "El presidente tiene la mejor predisposición en que este segundo periodo de Gobierno sea un buen periodo, podamos recuperar la confianza de la ciudadanía y podamos hacer la mejor gestión posible", agregó.
El sistema de salud del país sudamericano está al borde del colapso. Recientemente, el gobierno tuvo que admitir que hay una escasez de medicamentos para tratar a los pacientes con COVID-19 y que casi todas las camas de las unidades de cuidados intensivos en los hospitales públicos están ocupadas. El ministro de Salud, Julio Mazzoleni, renunció el viernes debido a la presión pública. Hasta ahora, unas 165.000 personas en Paraguay han sido contagiadas con el coronavirus y más de 3.200 pacientes han muerto con la enfermedad que causa, el COVID-19, dijo el Ministerio de Salud.