El Congreso de Perú aprobó debatir el viernes un pedido de destitución o vacancia contra el presidente peruano, Martín Vizcarra, después de la difusión de un audio que reveló las coordinaciones del mandatario para desligarse de una denuncia de presunta corrupción.
La Junta de Portavoces del Parlamento acordó presentar el pedido de vacancia (destitución) con el voto de 26 legisladores y esta moción tendrá que ser admitida a debate con el apoyo de al menos de 52 legisladores, de un total de 130.
Los parlamentarios sostienen en su pedido de vacancia presidencial que Vizcarra “de manera reiterada y permanente ha faltado a la verdad al país y ha obstruido las investigaciones en sede congresal y penal respecto al caso Richard Swing”.
El aludido caso responde a la contratación del desconocido cantante Richard Swing por el Ministerio de Cultura para labores para las que no estaba calificado.
Vizcarra intentó eludir la responsabilidad en esta contratación, en plena pandemia, aunque recordó haberlo conocido en la campaña electoral del 2016, en la que postuló como vicepresidente en la fórmula del ex presidente Pedro Pablo Kuczynski.
El pedido de vacancia necesita el voto de 87 legisladores para ser aprobado, tras su admisión por el pleno, un trámite que se podría realizar el mismo viernes si así lo deciden los parlamentarios.
Horas antes, Vizcarra fue categórico en denunciar a quienes difundieron las grabaciones como parte de “un complot contra la democracia” y defendió sus palabras que aparecen en las grabaciones como “conversaciones privadas” obtenidas “ilegalmente” que no constituyen “ningún delito”.
Los audios difundidos por el presidente de la comisión de Fiscalización del Congreso, Edgar Alarcón, revelan las coordinaciones de Vizcarra con sus asesores para supuestamente negar su vinculación con el cantante Richard Swing, que durante años fue contratado por el ministerio de Cultura para trabajos poco justificables y para los que no tenía calificación.
“Nunca ha negado conocer al señor Richard Swing, pero no he intervenido en el proceso de contratación“, aseveró Vizcarra, tras admitir también que las conversaciones fueron coordinaciones internas realizadas en Palacio de Gobierno.
“Si quieren vacarme, aquí estoy con la frente en alto. Pero nada constituye causal de vacancia”, remarcó el gobernante.
Vizcarra recordó que en marzo del 2018 firmó “un compromiso con todos los peruanos de culminar el mandato y así lo haré”, al recordar la fecha en que asumió la presidencia tras la renuncia de Pedro Pablo Kuczynski por vínculos con la empresa Odebrecht.
“No voy a renunciar, no me corro”, insistió.