El Gobierno de Escocia ha comunicado este jueves que se ha detectado un caso de encefalopatía espongiforme bovina (EEB), popularmente conocida como enfermedad de las vacas locas, en una granja de la localidad de Aberdeenshire, al noreste del país, informa Reuters.
Las autoridades anunciaron que se han implementado restricciones en la granja en cuestión a modo de precaución mientras se investiga el origen del caso. "He activado el plan de respuesta del Gobierno escocés para proteger a nuestra valiosa industria ganadera", declaró Fergus Ewin, ministro de Agricultura de Escocia. Asimismo, aseguró que el caso no supone ningún tipo de peligro para los seres humanos.
La EEB se detectó por primera vez en Reino Unido a finales de la década de 1980, y se extendió a otras partes de Europa, diezmando a miles de rebaños hasta principios del siglo XXI. Se ha relacionado con la enfemerdad de Creutzfeldt-Jakob, una patología que afecta el cerebro de las personas.