El plan de Sergio Massa, según le dijo el candidato a su equipo más cercano en las oficinas del comando cuando comenzaron a recibir los datos de las mesas testigo que lo daban como ganador, es convocar a los votantes de Juntos por el Cambio, de Juan Schiaretti y de Myriam Bregman que se asustaron con las ideas de Javier Milei sin mencionar a partidos ni dirigentes políticos, consignó el diario Clarín, de Argentina.
“Voy a hablar de las ideas, no de los partidos ni de los dirigentes“, adelantó el ministro de Economía este domingo por la tarde.
Pese a la muy mala situación de la economía, el candidato Massa consiguió en su campaña posicionarse como la única opción electoral que defendía la actual configuración institucional y económica de la Argentina, frente a una oposición que se dividió en dos convocatorias diferentes al cambio, añadió Clarín.
En los últimos tramos de su campaña, Massa buscó diferenciarse de Milei levantando banderas tradicionales del radicalismo, como la defensa de la educación y la salud pública, e incluso ofreció una medida dirigida a la clase media, cantera electoral histórica del radicalismo: la eliminación del Impuesto a las Ganancias para los asalariados.
Massa tiene una excelente relación con varios dirigentes de la UCR, entre ellos Gerardo Morales, gobernador saliente de Jujuy, y también con el sector radical de la Cámara de Diputados que encabeza Emiliano Yacobitti.