Un alto diplomático de Corea del Norte huyó y entró en la clandestinidad, dijo a la prensa el parlamentario surcoreano Kim Min-ki este jueves (03.01.2019) tras reunirse a puertas cerradas con oficiales de los servicios de inteligencia en Seúl. De esta forma, se confirma un reporte del diario JoongAng Ilbo, que aseguraba que Jo Song-gil había pedido asilo en un país no identificado de Occidente.
"El período del embajador en funciones Jo Song-gil (en Italia) terminó a fines de noviembre del año pasado, pero él dejó el edificio diplomático a comienzos de noviembre” junto a su esposa, dijo el parlamentario a las agencias de noticias. El JoongAng Ilbo, en tanto, citó a fuentes diplomáticas en Seúl señalando que "pidió asilo a comienzos del mes pasado”.
Jo era el encargado de negocios de la embajada de Corea del Norte en Roma, pero asumió como embajador en funciones en octubre de 2017 luego de que Italia expulsara a Mun Jung-nam como representante norcoreano, a raíz de la prueba nuclear del mes anterior, la mayor que se conozca hasta ahora y un claro desafío del régimen de Kim Jong-un contra las sanciones impuestas por Naciones Unidas.
Según el JoongAng Ilbo, Jo –de 48 años– se encuentra en un lugar seguro con su familia bajo la protección del Gobierno italiano. "Simplemente salieron de la embajada y desaparecieron”, dijo el parlamentario Kim. En un caso similar ocurrido en agosto de 2016, Thae Yong-ho, que servía en la representación diplomática de Corea del Norte en Reino Unido, desertó con su familia y viajó a Corea del Sur.
La mayoría de los diplomáticos norcoreanos que trabajan lejos de su país deben dejar en Pyongyang a varios miembros de sus familias, normalmente sus hijos, para así evitar que deserten. Sin embargo, Jo fue autorizado en mayo de 2015 a viajar a Roma con su esposa y sus hijos, lo que sugiere que formaría parte de un grupo privilegiado en la cúpula gobernante norcoreana.