La ministra de Medio Ambiente de Alemania, Svenja Schulze, presentó hoy en Berlín un plan de cinco puntos que busca reducir la cantidad de plástico que se utiliza en la vida diaria y potenciar el reciclaje, según informa AP.
"En las ciudades, en cualquier punto, los ciudadanos deberían tener acceso a fuentes para poder rellenar sus botellas de agua", indica el documento dado a conocer por la política socialdemócrata.
Schulze recalcó además que los comercios deberían seguir la línea iniciada hace ya algún tiempo, cuando redujeron de forma drástica el uso de las bolsas de plástico, y comprometerse a eliminar envases innecesarios a la hora de vender productos como la fruta o la verdura.
Este nuevo plan forma parte de una nueva normativa de envases que el Gobierno alemán ha acordado recientemente y que entrará en vigor en el mes de enero. Schulze aboga además por promover el uso de materiales reciclables entre los productores de envases.
En Alemania, un país muy concienciado con el reciclaje, la mayoría de las botellas de plástico y de cristal son retornables. Los clientes, cuando van al supermercado y compran bebidas como cerveza o agua, además de pagar por el contenido pagan unos céntimos por el envase que la contiene.
Posteriormente, una vez que lo devuelven, recuperan su dinero. Un estudio publicado a mediados de este año por la empresa germana de auditoría financiera BDO y el Instituto de Economía Internacional de Hamburgo (HWWI), determinó que cada ciudadano alemán separa una media de 415 kilos de residuos anualmente, lo que convierte a Alemania en el país europeo en el que más se recicla.