El Mandatario boliviano reaccionó a la detención de su ex par brasileño, quien entró este sábado a prisión en Curitiba. "Cárcel sin juicio justo y sin pruebas, es delito", indicó el Jefe de Gobierno altiplánico
Evo Morales tras encarcelamiento de Lula: "Brasil sufre el peor golpe contra su democracia"
El Presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó este domingo que Brasil "sufre el peor golpe contra su democracia" después de que el ex Mandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva se entregara a la Policía para cumplir una pena de 12 años de prisión por delitos de corrupción.
"Elección sin Lula, es fraude. Cárcel sin juicio justo y sin pruebas, es delito. Brasil sufre el peor golpe contra su democracia", escribió Morales en su cuenta oficial en Twitter.
Agregó que "movilizados los pueblos de Latinoamérica denuncian el más grave atentado de injusticia perpetrado por derecha pro imperialista ante los ojos del mundo".
Además, en un evento en la región sureña de Tarija, el Jefe de Gobierno boliviano reiteró su solidaridad con el ex Mandatario brasileño y aseguró que "la lucha sigue por Lula libre". Morales dijo a Lula que "no se sienta solo" y expresó su confianza en que ganarán "esta batalla desde la cárcel" porque "estamos con la verdad".
"Los pueblos nunca abandonan cuando los gobiernos, los presidentes, los dirigentes trabajan para su pueblo", añadió.
Evo Morales es uno de los líderes latinoamericanos que más ha mostrado su respaldo Lula da Silva, al considerar que el proceso judicial contra él es una maniobra para evitar que vuelva al poder.
Da Silva se entregó el sábado en Sao Paulo a las autoridades para cumplir el mandato de prisión decretado el jueves por el juez Sergio Moro, quien lo condenó el año pasado por haberse beneficiado por los dineros políticos de la petrolera estatal Petrobras. Su ingreso en prisión en Curitiba estuvo marcado por los incidentes que se produjeron cuando aterrizó en el helipuerto de la sede policial y explotaron dos supuestos petardos en medio de la concentración de los seguidores de Lula, según la versión de la Policía.