El Gobierno de Venezuela repudió las sanciones que le impuso la Unión Europea (UE) y aseguró que esta decisión pretende "imponer ilegales, absurdas e ineficaces" medidas "contra el pueblo", según una nota de la Cancillería del país caribeño.

"El Consejo Europeo pretende además convencer al mundo de un supuesto consenso entre sus Estados miembros para adoptar medidas hostiles, cuando la realidad es que las grandes economías europeas ejercieron notables presiones hacia el resto de los Gobiernos del bloque y hacia las propias instituciones de la UE", prosigue el escrito.

Los ministros de Exteriores de la UE acordaron imponer sanciones como un embargo de armas y un veto a material que pueda utilizarse para la "represión interna" contra los venezolanos, además de abrir la puerta a la posibilidad de imponer medidas selectivas contra los responsables.

Según Caracas, la UE ha tomado esta decisión "violando descaradamente el derecho internacional", "siguiendo línea de conducta de Washington (...) con argumentos calcados de los documentos sancionatorios que contra Venezuela y su pueblo ha generado" la Administración del republicano Donald Trump.

"Es de hacer notar que las pretendidas sanciones no solo agreden al pueblo venezolano sino también al casi millón de europeos que escogieron nuestro país como su hogar y que han sufrido directamente los embates de la violencia política y económica generada por la oposición en meses pasados", asegura la nota oficial.

La Administración de Maduro considera también que con estas decisiones la UE establece un "peligroso precedente" en sus relaciones con América Latina "arrogándose la autoridad para sancionar a un país soberano", y acusa a Bruselas de entorpecer la continuidad del diálogo político en la nación petrolera.

El oficialismo y la oposición han acordado reactivar un proceso de negociación política este miércoles en República Dominicana con miras a la elección presidencial de 2018 y con las expectativas del antichavismo de lograr la excarcelación de "presos políticos" y la apertura de un canal humanitario.

"Lejos de contribuir con la concordia y la paz en Venezuela, la UE ha aprobado decisiones hostiles que solo procuran el fracaso del diálogo nacional y busca favorecer a quienes han generado violencia política, muerte y destrucción como mecanismos para acceder al poder", pondera el Ejecutivo venezolano en el comunicado.

El Gobierno de Maduro agrega que ante hechos como este "se reserva la toma de decisiones en distintos ámbitos para garantizar la defensa de la paz y soberanía nacional".

Los ministros de la UE explicaron que las medidas adoptadas se utilizarán de forma "gradual y flexible" y que podrán ser "extendidas" a quienes "no respeten los principios democráticos o del Estado de derecho" o estén implicados en "la violación de los derechos humanos".