Este miércoles 2 de octubre, el Ejército israelí desplegó más unidades de infantería y blindadas en el sur de Líbano y aseguró que estas se suman a lo que ha denominado en los últimos días "incursiones localizadas" contra objetivos de Hezbolá.
Por otra parte, las tropas israelíes confirmaron la muerte de alrededor de 10 de sus soldados durante una operación en el vecino país.
Los últimos movimientos se producen justo un día después de que Irán, que respalda a Hezbolá, lanzara al menos 180 misiles contra Israel. En las últimas horas, el Estado de mayoría judía y la República Islámica han intercambiado nuevas amenazas, en medio de la mayor escalada de enfrentamientos en años, que promete prolongarse.
Poco después de anunciar su primer muerto en territorio libanés desde la guerra de 2006, identificado como el soldado Eitan Itzhak Oster, un nuevo comunicado castrense recogió los nombres de otros siete fallecidos en combate. Otros dos no se han identificado.
Los fallecidos son los capitanes Harel Etinger e Itai Ariel Giat, ambos de 23 años; los sargentos de primera clase Noam Barzilay, de 22 años, y Or Mantzur y Nazar Itkin, de 21; y los sargentos Ido Broyer y Almken Terefe, también de 21.