La justicia rusa rechazó este jueves la apelación del líder opositor Alexei Navalni contra su arresto, mientras las autoridades detenían a miles de sus simpatizantes y lanzaban advertencias contra las redes sociales, en medio de multitudinarias protestas exigiendo la liberación. En declaraciones a la corte por videoenlace, Navalni dijo que el proceso penal en su contra era parte de la campaña del Gobierno para intimidar a la oposición

"No lograrán asustar a decenas de millones de personas que han sido robadas por ese Gobierno", dijo. Navalni, de 44 años, el crítico más conocido del Presidente Vladimir Putin, fue arrestado el 17 de enero al regresar de Alemania, donde convaleció durante cinco meses del envenenamiento con una sustancia neurotóxica, hecho del que acusa al Kremlin. Las autoridades rusas han rechazado las acusaciones. El dirigente opositor fue arrestado por 30 días a pedido del servicio penitenciario, que lo acusó de violar las condiciones de su libertad bajo una condena en suspenso de 2014 por lavado de dinero. Ahora enfrenta acusaciones en dos investigaciones penales.

La corte regional de Moscú rechazó su apelación contra el arresto. Durante la audiencia, la defensa de Navalni alegó que estaba en tratamiento en Alemania y por lo tanto no podía presentarse a las autoridades durante ese período. Sus abogados dijeron que el arresto violó reiteradamente el debido proceso. Los partidarios del líder opositor están organizando nuevas manifestaciones para el domingo. La policía allanó el miércoles del departamento de Navalni, donde vive su esposa Yulia, y las residencias de varios de sus seguidores. El hermano del dirigente detenido, Oleg Navalni, su principal aliado Lyubov Sobol, la doctora Anastasia Vasilyeva de la Alianza de Doctores y Maria Alyokhina del colectivo punk Pussy Riot fueron detenidos durante 48 horas como parte de una investigación penal de presuntas violaciones de las normas del coronavirus en las protestas del sábado pasado.

El vocero de Putin, Dmitri Peskov, dijo que los allanamientos y detenciones fueron parte legítima de la investigación de presuntas infracciones durante los eventos. El jueves la policía de Moscú notificó al público que no debe participar en las protestas del domingo, que los agentes actuarán enérgicamente para dispersar los mitines no autorizados y llevar a los participantes ante los tribunales