Once personas, incluidas varias generaciones de la misma familia, fueron encontrados ahorcados en su casa en el norte de Delhi, India. Estaban colgados por telas y con los ojos vendados. La policía investiga si se trata de un suicidio colectivo o hay un "juego sucio" detrás de los fallecimientos.

Entre los fallecidos había niños y adolescentes. Todos tenían algodón y telas atadas a los ojos, tal y como recoge un medio local, lo que llevó a la policía a sospechar que se habían suicidado. Un vecino llamó a emergencias a las ocho de la mañana al ver la puerta abierta y encontrar los cadáveres colgados.

Nueve de ellas fueron encontradas junto a una parrilla de hierro en la terraza pasillo de la casa. Una mujer, que parecía tener más de sesenta años, estaba en el marco de la puerta de una habitación. Otra mujer, octogenaria, estaba en el salón. 

Un oficial de policía dijo que el propietario del domicilio era un empresario conocido en Sant Nagar, que dirigía una tienda de contrachapado y productos lácteos. Él también se encuentra entre los fallecidos.

No se hallaron rastros de robo, pero durante la búsqueda encontraron notas manuscritas que indicaban que la familia observó ciertas prácticas espiritualeso místicas. 

La investigación sigue abierta, a falta de que les hagan la autopsia. Los vecinos están siendo interrogados en busca de pistas y el equipo de criminalística está tomando huellas.

"El vecino nos dijo que la puerta por lo general permanecía cerrada. Pero ese día estaba abierta. Estamos tratando de averiguar si se trata de un caso de pactosuicida o si hay algún juego sucio detrás de las muertes", dijo el oficial de policía.

Los fallecidos fueron identificados como Narayan Devi (77), sus dos hijos Bhavnesh (50) y Lalit (45), sus nueras Savita (48) y Teena (42), su hija Pratibha (57), sus nietos Priyanka (33), Nitu (25), Monu (23), Dhruv (15) y Shivam (15).