El plebiscito de salida del pasado domingo, en que triunfó categóricamente la opción de Rechazo a la propuesta de nueva Carta Magna, ha sido observado detenidamente por el mundo, desde la prensa internacional hasta los líderes latinoamericanos de todos los colores políticos.
Uno de ellos, Nicolás Maduro, se pronunció a través de la señal televisiva en la que acostumbra hacer discursos a la ciudadanía.
“Al proceso chileno le cortaron las alas, desde el viejo Congreso de Piñera, antes de arrancar como proceso constituyente; lo maniataron”, partió señalando quien es reconocido por muchos como dictador.
“Nunca en Chile se convocó un proceso originario, soberano, plenipotenciario”, continuó, “le cortaron las alas temprano, lo llenaron de limitaciones“.
Así, profundizó en su argumento que “en Chile mediatizaron el poder constituyente originario que se despertó del estallido social contra el modelo neoliberal y Piñera en el año 2019; lo mediatizaron desde la primera jugada”.
No obstante las críticas al contexto, también tuvo palabras de crítica hacia la propia Convención: “Faltó un liderazgo firme, claro, creíble, con apoyo popular, que se pusiera al frente del texto constitucional”.
“Al final quedó vigente la Constitución de la dictadura de Pinochet; qué dolor para los pueblos, qué dolor para los pueblos de América Latina y El Caribe, qué dolor para la memoria de los mártires de los desaparecidos, de los torturados“, dijo, agregando que esta fue una “derrota del proyecto histórico, derrota de la fuerza popular constituyente del estallido social, porque la mediatizaron“.
Así, finalizó, “caerán sobre los hombros, de quienes mediatizaron esa fuerza, porque el pueblo se recuperará y más temprano que tarde, como dijera el gran Salvador Allende, ese pueblo volverá a transitar las grandes Alamedas hacia un verdadero proceso popular, constituyente, originario, plenipotenciario y soberano”.