El gobierno de Nueva Zelanda sumó a dos nuevos grupos en su lista de agrupaciones calificadas como terroristas. Los colectivos ultraderechistas Base y Proud Boys se suman a otros 18 como organizaciones de alto riesgo. Eso implica que en esa nación es ilegal financiar, reclutar o participar en ellos.
Se trata de dos grupos originarios de Estados Unidos y que ahora lleva a las autoridades a tomar acciones contra ellos. Por ahora el poder ejecutivo no tiene información de que esas colectividades estén activas en el país. Nueva Zelanda está en alerta sobre los grupos de ultraderecha desde que sufrieron un asesinato masivo en 2019.
En esa ocasión un supremacista blanco mató a 51 fieles musulmanes en dos mezquitas de la ciudad de Christchurch. Ese ataque terrorista inspiró a otros supremacistas blancos, incluyendo a un sujeto de ultraderecha que asesinó a diez personas afroamericanas al interior de un supermercado en Buffalo de Nueva York.
Los Proud Boys ya son considerados terroristas en Canadá desde 2021 y la Base recibió ese mismo calificativo en Australia, Canadá y Reino Unido. A inicios de junio el exlíder del grupo ultraderechista, Henry Tarrio, fue acusado en Estados Unidos de conspiración sediciosa por el ataque en contra del Capitolio.
The Guardian detalla que para las autoridades de Nueva Zelanda el grupo Base busca “entrenar a un cuadro de extremistas capaces de acelerar la violencia”. El gobierno de ese país dijo que su fundador Rinaldo Nazzaro aconsejó “a los miembros en línea sobre la violencia, la adquisición de armas y las acciones para acelerar el colapso del gobierno”.