El papa Francisco aceptó este sábado la renuncia como decano del colegio cardenalicio del que fue también secretario de Estado, Angelo Sodano, y estableció que este cargo no sea vitalicio.
Sodano, de 92 años, era el decano de los cardenales desde 2005 en un puesto que era hasta ahora vitalicio y fue acusado en numerosas ocasiones sobre supuestos encubrimientos en casos de pederastia cuando era secretario de Estado.
La decisión del Pontífice se hizo pública este sábado a través de un documento papal después del tradicional encuentro para las felicitaciones de Navidad a la Curia romana, en donde agradeció la labor de Sodano y pidió a los obispos elegir un nuevo decano.
Sodano fue nuncio apostólico desde 1978 y secretario de Estado entre 1990 y 2005 y sucesor de Joseph Ratzinger (ex papa Benedicto XVI) como decano del Colegio cardenalicio.
Además, entre 1977 y 1988 fue nuncio apostólico en Chile, donde es acusado de encubrir casos de abusos, ya que durante su nunciatura se registraron los mayores casos de abuso de los que se tiene registro en nuestro país, entre ellos, el ocurrido en la parroquia de El Bosque con Fernando Karadima.
"Con el aumento del número de los cardenales, compromisos cada vez mayores pesaban sobre la persona del cardenal Decano, me parece oportuno que de ahora en adelante el cardenal Decano, que siempre será elegido por los miembros de la Orden de los obispos (...) permanezca en el cargo por un quinquenio eventualmente renovable", escribió el papa.
Tras esta decisión del papa, el cargo de decano de cardenales sólo podrá durar un periodo de cinco años, que eventualmente podría ser renovable, y se le quita el estatus de vitalicio.