El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, presentó ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE), su inscripción para participar en las elecciones presidenciales de su país previstas para el 4 de febrero de 2024. Bukele llegó al poder en 2019 y termina su mandato el 1 de junio del próximo año.
Polémica decisión. La Constitución de El Salvador prohíbe la reelección, pero la Sala Constitucional de la Corte Suprema interpretó que uno de sus artículos permite la participación del presidente en los comicios por segunda ocasión.
El vicepresidente del país, Félix Ulloa, explicó recientemente que, tras hacerse oficial la candidatura, Bukele tendría que pedir permiso al Congreso para ausentarse del cargo antes del 1 de diciembre, seis meses previos del inicio del nuevo mandato presidencial. El Parlamento elegirá entonces a la persona que lo reemplazará durante su licencia.
Abogados constitucionalistas y opositores han señalado que la reelección es ilegal y que la Carta Magna la prohíbe en seis artículos diferentes.
Alta Popularidad
Nayib Bukele cuenta con una popularidad de 90% en su país, la más alta entre los presidentes de América Latina, según Latinobarómetro. De acuerdo con una encuesta del Centro de Estudios Ciudadanos de la Universidad Francisco Gavidia de El Salvador, citada por The Associated Press, Bukele tiene un 68,4% de la intención de voto, seguido muy de lejos por Joel Sánchez, candidato de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), con el 4,3%. Un 19,1% se abstendría o anularía su voto.
Su imagen también es positiva entre los chilenos. Según un sondeo Panel Ciudadano UDD a más de 1.800 personas, un 79% de los encuestados tiene una buena imagen de Bukele, superando a cualquier otro mandatario extranjero en ese ítem.
Nacido en 1981, Bukele fue alcalde de Nuevo Cuscatlán y San Salvador. Militó en el izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), movimiento político que surgió de una organización guerrillera que participó en la guerra civil en el país centroamericano. Pero en octubre de 2017, Bukele fue expulsado por “proferir agresiones verbales” contra la síndica Xochilt Marchelli, a quien llamó “maldita traidora» y «bruja» y le arrojó incluso una manzana hacia el rostro.
Después de dos intentos fallidos de presentarse como candidato presidencial de grupos de centro izquierda, Bukele se alió con GANA (conservador). El 3 de febrero de 2019, logró la presidencia con una mayoría absoluta de 53,1%,. Derrotó al candidato de derecha de la Alianza Republicana Nacionalista, ARENA, Carlos Calleja, marcando el fin de 30 años de bipartidismo.
Estrategia contra el crimen
«En mi opinión, es como dar una aspirina a una persona que tiene un tumor en la cabeza, primero enviando a la policía, luego enviando al ejército, si consiguen encarcelarlos… después de largas discusiones legales, la violencia vuelve y la rueda sigue girando».
Así explica Nayib Bukele las estrategias tradicionales contra el crimen. La suya es diferente: arrestos masivos, con estado de excepción y una mega cárcel para 40 mil presos; por lo cual ha sido acusado por organismos de Derechos Humanos de violaciones generalizadas y fragrantes. Actualmente, el 2% de la población adulta del país se encuentra repartida en las cárceles.