Los diputados británicos aprobaron este miércoles una ley que obliga al Gobierno a pedir un nuevo aplazamiento del Brexit, actualmente previsto para el 31 de octubre, si es que no se alcanza un acuerdo con Bruselas en las próximas semanas.
El texto, que debe aún ser ratificado por la Cámara Alta del Parlamento, recibió 327 votos a favor y 299 en contra, lo que significa un nuevo revés para el Primer Ministro Boris Johnson, quien se oponía a una nueva prórroga.
El Premier siempre se ha mostrado contrario a la idea de aplazar el divorcio europeo y en varias ocasiones ha dicho que "bajo ninguna circunstancia" pediría su retraso.
Si se llega confirmar en la Cámara de los Lores -Cámara Alta británica- esta ley, Johnson deberá buscar un nuevo acuerdo o una prórroga.