El principal opositor ruso, Alexey Navalny, en campaña para desafiar a Vladimir Putin en la elección presidencial de marzo próximo, fue detenido el viernes por la policía al salir de su domicilio en Moscú, cuando iba a acudir a un mitin político en provincia.

 

A menos de seis meses de estas elecciones -para las que el Presidente ruso no ha presentado oficialmente su candidatura- Navalny lleva a cabo una campaña política en toda Rusia, pese a los obstáculos puestos por las autoridades.

 

"Me han detenido en la entrada del inmueble. Me llevan a algún lugar para dar explicaciones" dijo Navalny en su cuenta Twitter. Según indica la portavoz del opositor, Kira Iarmych, en la misma red social, Alexey Navalny, debía tomar un tren para acudir a un mitin que había sido autorizado por las autoridades en Nijni Novgorod, a 400 kilómetros al este de Moscú.

 

"El viejo Putin no quiere realmente que vaya a Nijni Novgorod. Salgo de mi casa, me detienen en la entrada del inmueble" escribe el opositor en Instagram, acompañando el mensaje con un video de los policías que le piden que "los acompañe para una conversación".

 

En un comunicado, la policía de Moscú justificó la detención del opositor por "sus reiterados llamados a participar en actos públicos no autorizados". "¡Nunca he hecho eso"!, se defendió Navalny.

 

Navalny cumplió este año dos penas de detención administrativa por haber organizado a fines de marzo y en junio manifestaciones anticorrupción de gran magnitud en toda Rusia, que fueron prohibidas por las autoridades.

 

 

Se trata de la primera detención de Alexei Navalny desde el fin de su arresto administrativo en junio. El opositor organizó en las últimas semanas varios actos de campaña en toda Rusia, que congregaron a miles de personas, en medio de la indiferencia de la prensa nacional.

 

Quienes lo apoyan han denunciado intentos de las autoridades de obstaculizar estas reuniones. En julio, el local de campaña en Moscú de Navalny fue ocupado y bloqueado por la policía, que incautó objetos y volantes políticos promocionales.

 

Su futuro político es no obstante incierto, ya que la comisión electoral lo consideró no apto para presentarse contra Putin debido a una condena por desvío de fondos.

 

Alexei Navalny, principal opositor al Kremlin, ha sido objeto de numerosas agresiones y varias imputaciones judiciales. Por su lado Putin se ha limitado a presentarlo como una figura marginal y un oportunista.