El portavoz de la rama castrense, Enrique Balbi, precisó que la búsqueda seguirá "hasta agotar los medios" disponibles e informó que se centrarán en la dirección que llevaba el ARA San Juan.
Tras 23 días Armada argentina amplía área de búsqueda de submarino a un sector "más al norte"
El submarino Ara San Juan desapareció con 44 tripulantes a bordo en el océano Atlántico, sin conocerse hasta hoy su paradero. La Armada argentina ya ha barrido casi dos veces el área donde se sospechaba que podría estar y, a falta de novedades, informó este viernes que ampliaron el área de búsqueda.
El portavoz de la Armada, capitán de navío Enrique Balbi, informó durante el parte oficial que una nave se centrará en un sector "más al norte del área circular" en "la dirección que estaba llevando el submarino hacia Mar del Plata".
El submarino estableció su última comunicación el pasado 15 de noviembre, mientras viajaba desde el sureño puerto de Ushuaia, el más austral del país, hasta su base de Mar del Plata, 430 kilómetros al sur de Buenos Aires.
Por otra parte, Balbi afirmó que esperan la llegada al área de operaciones de un sonar de barrido lateral de "muy alta resolución" para realizar el tercer barrido en la zona donde se cree que podría estar el submarino ARA San Juan.
"Si bien el área de mayor probabilidad de ocurrencia ya fue barrida casi dos veces, la idea es que ese sonar de barrido lateral a bordo del aviso barra esa elipse que inicialmente la embajada (argentina) de Viena, en Austria, había informado sobre ese evento consistente en una explosión", explicó Balbi desde la sede de la Armada. Dicho sensor –añade- aportado por Estados Unidos, llegará al área de operaciones este sábado.
La explosión a la que hacía referencia es "un evento anómalo singular corto violento y no nuclear consistente con una explosión" anunciado el pasado 23 de noviembre por el embajador de Argentina en la capital europea en un área cercana a donde reportó el San Juan su última ubicación.
El área de operaciones, de cerca de 4.000 kilómetros cuadrados, ya está siendo barrida por aeronaves y buques, que se van turnando en una búsqueda sin fin en una parte del océano -donde finalmente han mejorado las condiciones meteorológicas- inspeccionando y barriendo el fondo tres naves; cada una está centrada en verificar "de forma simultánea" un "objeto" que podría ser el submarino en profundidades que rondan los 800 metros.
El portavoz aseguró que el barrido que se ha realizado hasta ahora "fue efectivo" porque durante la búsqueda han encontrado otros buques hundidos, pero estos se encontraban a menores profundidades, lo que facilitó su hallazgo.
Para ejemplificar la dificultad de la búsqueda, Balbi comparó la búsqueda del submarino en esta área como "tratar de encontrar un cigarrillo de 6 centímetros en una cancha de fútbol de 100 por 40 metros". En este caso, el submarino es de 66 metros de largo, de casco negro y está diseñado "para que no sea detectado bajo el agua", contextualizó.
El operativo de rastreo continúa "hasta agotar los medios" nacionales e internacionales y "no hay ninguna fecha fijada" para finalizar los barridos.
Las dudas sobre el submarino
Pocas son las dudas que han logrado despejarse desde que comenzó el operativo, ya que desde que se inició se ha sabido que el submarino tuvo una falla en las baterías, que fue restaurada, en medio de una climatología adversa.
También salió a la luz pública un registro de varias llamadas y comunicaciones satelitales de las que no se han obtenido las grabaciones.
Por todo esto, más la cantidad de días que han pasado desde que se supo por última vez de los tripulantes, las esperanzas sobre encontrar con vida a los 44 tripulantes son prácticamente nulas.
La opinión divide la actitud de los familiares de los desaparecidos, ya que mientras unos no quieren comenzar su luto hasta que se confirme una tragedia, otros ya han escrito a través de sus cuentas en redes sociales mensajes de despedida.